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❝CORONAVIRUS❞
─
¿Que mierda es eso? ─ pregunté
─ Que se yo, dice que es un virus que es peligroso y no se que más. ─ contesto mi mamá mientras veía facebook.
─ ¿Más peligroso que el dengue? ─ pregunté.
─ No, eso nada lo supera. ─ contesto mientras le daba like a una publicación, lo sabía porque se escucha el sonidito ese, mi mamá no le baja el volumen a nada.
─ ¿Y la gripe A? ─ pregunté de nuevo. Ella negó. ─ si pudimos pasar eso, el dengue y la macrisis podemos pasar esa verga.
─ Igual hay que tener cuidado, ahora en esta semana vamos a comprar comida y cosas porque se viene la cuarentena. ─ aviso.
─ ¿Cuarentena? ─ pregunté.
─ si, la cuarentena, no vas a poder salir a la calla ni para comprar pan. ─ Dijo mi abuelo mientras cebaba un mate.
─ ah. ─ me encogí de hombros ─ total nunca salgo de casa. ─ dije.
─ ¿Y tu novio? Mira que no lo vas a ver por un mes. ─ dijo.
─ existe la videollamada ─ respondí.
─ si, pero no es lo mismo ─ dijo de vuelta.
─ ahora voy a hablar con el. ─ avisé.
Me levanté de la mesa y me fui a mi pieza para buscar mi celular y hablar con mi novio. Cuando encontré mi celular puse mi contraseña super armi secreta y lo desbloqueé.
Busque el WhatsApp de Finn y lo llame, siempre nos llamábamos cuando estábamos al pedo. ─ Hola, amor.
─ ¿Que ondaaa? ─ saludé. ─ ¿Cómo te trata el coronavirus?
─ ¿Coronavirus? ─ pregunto. ─ ¡Ah, si! Aún no llego a América.
─ Ya va a llegar. ─ dije.
─ Ojalá no. Podría afectar a tu abuelo. ─ Dijo y mi sonrisa se borró.
─ No que no venga entonces. ─ dije. Que se vaya mi abuelo iba a ser horrible, eso sí que no.
Llegas a venir coronavirus y te cago a piña, ahre.
─ Probablemente estaremos en cuarentena y habrán mucho cuidados. ─ dijo Finn. ─ no te preocupes, amor. Ya se va a encontrar la cura.
─ ¿Y si no? ¿Y si este es el último año para la humanidad? Quiero decirte antes que me muero que te amo y q...
─ ¡Amor! ¡No pasará nada! ─ me interrumpió Finn. ─ No seas dramática. ─ rió.
─ dramática me dice el pendejo, ah pero cuando llegue el coronavirus y la mayoría de la población no esté te quiero ver, mierda. ─ dije.
─ Entendí nomás el mierda. ─ dijo Finn. ─ ¡No hables en español, mierda! ─ exclamó. ─ es que no entiendo.
─ Perdón amor, la costumbre. ─ dije riendo.
─ ¿Puedo ir a tu casa antes de que anuncien una cuarentena y no te pueda ver durante quince días? ─ pregunto.
─ Las cuarentenas duran cuarenta días, por algo el nombre, tarado. ─ Dije y el carcajeo. ─ ¿De que te reís?
