𝐄𝐘𝐄𝐒 → KUROO TETSURŌ

𝑪 𝑨 𝑷 𝑰 𝑻 𝑼 𝑳 𝑶 2

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 2
𝑴𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒐𝒔

Sali de la sala de prisa.
Le odio, le odio, le odio.
Eres un imbecil Kuroo Tetsurō.
Y yo aún más a enamorarme de un imbecil que es mi rival y supuestamente mi mejor amigo.
Suspiré con pesadez y fui hasta el gimnasio.
Estaba sola.
Una lágrimas cayeron rebeldes de mi ojos.
No lo entiendo....
Me froté los ojos con fuerza.
No lloraré por un imbecil. Por lo menos no ahora ni aquí.
Me dirigí en la sale de vestir y me puse ropa mas comoda.
Ate mi cabello en una cola alta y forcé una sonrisa falsa.
Soy la manager del Nekoma, el equipo que llegará y ganará las nacionales: no me deprimiré por cosas tan tontas!

...

Cuando todos los chicos llegaron les acogi junto al entrenador con una enorme sonrisa.
Falsa. Pero una sonrisa.
Sentí sobre mi la intensa mirada de cierto gato pero la ignoré y empecé a hablar con el entrenador de un amistoso que ocurriría dentro de dos días.
Me pasé todo el tiempo del entrenamiento acomodando los papeles y documentos, logrando así no pensar en cierto azabache que me miraba atentamente.

—Naomi-san! Vienes con nosotros?- al grito de Nobuyuki me giré hacia el y asentí.
—Tenga Nekomata-san, aquí esta todo listo para el amistoso con el Karasuno. Nos vemos mañana!-
—Gracias Naomi! No llegues tarde que necesito que me ayudes con estos gatos salvajes!- gritó el con una sonrisa.
—Por supuesto!- y me fui con Nobuyuki.
—Oh Oh Oh, pero si no es la chica lista? Nos daras el onor de venir con nosotros?- dijo Kuroo con una sonrisa burlona.
Mi sonrisa flaqueó y lo miré con una mueca de desagrado.
—Kenma hoy hiciste muy buenos pases! Espero que juegues aún mejor en el amistoso!- dije tratando de ignorar al azabache.
Kenma me miró con una sonrisa ladina.
—Gracias Naomi.- dijo calmado el teñido.
—Jajaja Kuroo te están ignorando bastante bien no crees?- dijo burlón Yaku.
—Calla Yaku.- el tono de Kuroo fue escalofriante però trate de seguir hablando tranquilamente con Kenma y Nobuyuki durante todo el camino.

—Bueno, aqui nos despedimos!- dijeron Yaku y
Nobuyuki saludándonos.
Kenma, Kuroo y yo nos quedamos en silencio.
Llegamos a la casa de Kenma y este se despidió de nosotros sin despegar la vista de la consola.
Aunque cuando yo y Kuroo seguimos caminando susurró algo en el oido del azabache.

Seguí caminando hasta llegar a la casa de Kuroo pero este siguió caminando a mi lado.
—Oye es que no te das cuenta de que llegaste a tu casa?-
—Si. Pero quiero acompañarte a la tuya.—
Me quede en silencio.
—Te molesta?— preguntó mirándome seriamente.
Me quedé nuevamente en silencio.
—No entiendo...- susurré y el me miró curioso.
—Porque siempre me tratas mal y ahora bien? Es que eres bipolar o algo así?- pregunté sin poder ocultar mi molestia.
—Lo lamento.-
Me paré sorprendida y lo miré.
El dejo de caminar también y me miró a los ojos.
Nuestras miradas chocaron y una sensación de calidez invadió mi cuerpo.
Me sonrojé levemente.
—Lo lamento- repitió - Yo... yo me pasé y dije cosas que no pensaba.-
—Oye. Nos una mentira: no es como si yo sea linda como las chicas que te rodean o simpáticas como ellas. No soy suf-
—Calla.-
Le miré sorprendida.
—No es verdad lo que dices. Tu no eres mal enana.- masculló avergonzado.
Sonreí realmente.
—Tampoco tu eres mal Tetsurō.-
—Sabes cual es una cosa que me encanta de las chicas?-
Fruncí el ceño pero no dije nada. El siguió hablando —Sus ojos.-
—Porque?- pregunté con curiosidad y el me miró con una sonrisa.
—Eso te lo contaré otro dia. Nos vemos mañana, enana lista~- dijo llendo a su casa.
Me quede parada en frente de mi casa viéndolo alejarse y me sonrojé violentamente.

...

—Venga! No lo puedo creer! Realmente me lo dicen en serio?- pregunté enojada viendo el equipo.
Todos los chicos sonrieron.
—Lo sentimos Naomi-chan pero los únicos asientos libres son los de allí.- dijo Taketora con una sonrisa.
—Y de casualidad los únicos que no tienen asientos son tu y el capitán. La próxima vez apúrate Naomi-chan~ agregó Yaku burlón.
Apreté los dientes pero asentí.
Detrás de mi sentí como Kuroo subía al bus y Taketora le decía donde sentarse.
El no dijo nada y se sentó a mi lado.
Trate de ocultar mi vergüenza pero me fue imposible al oír las risas de todos.
El señor Nekomata subiendo al bus vos miró con una sonrisa y se sentó delante de nosotros.
Nos separaban varias horas de Miyagi y sin querer me quedé dormida.

Desperté dos horas después y me di cuenta de algo vergonzoso.
Estaba apoyada en el hombro de Kuroo!
Mi primer istinto fue el de moverme pero me di cuenta que el chico estaba dormido sobre mi así que decidí quedarme así: me acomode mejor en el asiento y me dormí nuevamente.

—Oigan, que hacemos? Les despertamos? Ya hemos tomado bastantes fotos!- escuché varias voces del equipo y abrí lentamente mis ojos.
—Ohh la bella durmiente despertó! Que hay de su principe?- dijo burlón Yaku.
Me sonrojé violentamente.
—Ya ya. No callarán verdad?- escuche la voz adormilada de Kuroo y me avergoncé.
El parecía molesto.
—Terminaron de mirarnos? Ya bajaron todo me imagino.- dijo con el ceño fruncido.
Todos asintieron.
—Bueeeno. Vamos al hotel!- y se estiró como un gato.
Todos bajaron y me quedé viéndole.
Sonreí cuando se giró hacia mi.
Me dio su mano para levantarme y la acepté gustosa.
Que raro es el amor a veces.

(sin revisión)