Capítulo 8 - El old man que dejó de ser old.

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Habíamos llegado al penthouse en una pieza

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Habíamos llegado al penthouse en una pieza. Por supuesto no había señales de Shiobban. Yo pensaba que estaba más enojada de lo que deseaba admitir y tenía toda la razón de estarlo. Si yo no me hubiera comportado como un zángano, ella no habría estado al alcance de Devon el lobizón.

Las clases con Camila y Vincent habían sido canceladas por mi parte y cuando llegué. Un bello mensaje de mi padre estaba aguardando en mi teléfono de línea. La cosa era que si me desaparecía más de quince días alguno de los dos se ponían en contacto conmigo. O PJ me visitaba de imprevisto

"Allan, espero que esta interrupción momentánea de tus estudios no perjudique nuestros planes y que no pongas el apellido Woodhouse en tela de juicio. Bastante que consiento que te tomes un año sabático en lugar de entrar al Oxford College. No seas el disgusto permanente que sueles ser y prepárate en etiqueta e idioma para representar a nuestro glorioso país. Espero avances y no quiero problemas. Llama cuando escuches esto."

Si, para mi padre era un fracaso ambulante. Jamás iría al Oxford College... todo lo que me gustaba estudiar se daban en universidades más modernas. Como un título en producción musical o técnico en sonido, para poder ser un friki productor de bandas o ¿Que tal guía turística? Podía verme definitivamente viajando por el mundo presentando tours embrujados aunque ¿Quien decía que necesitaba un título para eso? Era una pena que no existiera una carrera como relaciones públicas paranormales. Sino... la verdad era que con ser "el psíquico" y detective paranormal ya tenía el trabajo que me gustaba. Por ejemplo, Camdem me había pagado más que bien y solamente estuve al borde de la muerte una decena de veces.

Puse a Evie en el corralito y me fui a investigar más sobre el cazador Faë. No me gustaba que en los libros lo trataran como una criatura indestructible...sobre todo porque tenía que destruirlo antes de que encontrara el rastro mío y de la pequeña.

Sabía que Georgie y Shabby se habían separado para esparcir el rastro por lugares y también, sabia por Pemberly, que Georgie no había tenido más opción que comparecer ante la corte y que esta había decretado lo que siempre. A veces las uniones interespecie apuntaban a una raza definida: el frutito mágico salía con la raza de la mama o del papa, pero cuando la raza era indefinida como había sido la de Evie, las alarmas saltaban por todas partes y el cazador venía a ajusticiar a su "presa".

Es cierto que soy bueno para lo paranormal y que mis visiones pueden ser de gran ayuda...a veces, pero no puedo creer que mis amigos pensaran que yo me pudiese hacer cargo de un cazador mítico al que nadie parece poder detener.

Estaba quitándome el porta bebé y acomodando el bolso en mi perchero, para tenerlo a mano en caso de tener que hacer una salida de emergencia, cuando escuché que de la sala de estar Pemberly estaba gritando:

— ¡Santas Carambolas!

"Santas ... esto no puede ser nada bueno" pensé. Trastabillando me dirigí al corralito que le habíamos armado a Evie. Casi esperaba a ver juguetes levitando, pero nada me preparó para lo que me encontré en su lugar.

Siempre, mañana... (Allan Woodhouse # 3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora