꧁𝑯𝒂𝒔𝒕𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒎𝒆 𝒓𝒆𝒄𝒖𝒆𝒓𝒅𝒆𝒔꧂

Prólogo

En aquella fría sala se encontraba un joven cabellos azabache alado de una camilla de hospital, en donde se encontraba la persona más importante en su vida, en un sueño en el que hasta ahora después de tanto tiempo no lograba despertar.

-Krist - Llamo el mayor - ¿Cuándo decidirás despertar amor? Eres un vago.

Seguía acariciando el rostro del menor, contemplando la belleza que tenía y suplicando en el día en el que volvería a ver esa dulce sonrisa de su labios dedicada a su persona.

Ese era el diario vivir de Singto, trabajando y cuidando de su novio, con la esperanza de tenerlo de nuevo junto a él.

Hasta este día en el que todo volvería a ser como antes. O bueno no del todo por completo.

Aquel joven de piel blanca decidió despertar de aquel largo sueño aquel día y volver a sonreír a la pareja que tanto lo había extrañado.

Con una cara de confusión trataba de ver el lugar en el que se encontraba y con el pasar de los minutos intentó hablar, pero por el estado en el que estaba se le dificultó.

-Krist- llama Singto con una gran alegría y unas lágrimas traicioneras que salían por la alegría que estaba viviendo. - Despertaste.

Al ver que el menor no podía pronunciar palabra alguna decidió darle de beber agua para aliviarlo.

Luego de un rato Krist se acostumbró a la luz y se sintió más aliviado. Pero ahí es cuando su duda despertó.

"¿Quién es aquel hermoso joven?" Fue la duda que despertó en el.

-Dis~culpa pe~ro... ¿Qui~én e~res?- fueron las primeras palabras que pronunció en menor con dificultad y voz rasposa. Palabras que lastimaron en manera significativa a Singto.

Singto por su parte simplemente puso una mirada triste dirigida a Krist.

-Soy Singto Prachaya, un conocido tuyo- puso una sonrisa triste y luego se acercó a Krist para susurrarle algo.- Bueno, un conocido solo hasta que me recuerdes.

Sin más Singto salió de aquella habitación para avisarle la noticia al doctor y las demás personas. Para luego desahogarse ante el hecho de que su amado lo había olvidado.