🌻Querido Omega🌻//Verkwan

2. Todavía no es un omega 🌻

En la minúscula mochila que llevaba el pequeño habían encontrado una libreta con los datos del niño e identificación de la madre en caso de emergencia. Apenas pudieron contactarse con la mujer para que fuera a recoger a su hijo supieron que el pequeño era más listo de lo que imaginaban, se había escapado de la escuela sin que nadie lo hubiera visto y había venido a la universidad buscando a su alfa. O eso fue lo que el niño dijo después de haberse calmado en los brazos de Vernon.

Ahora mismo la sensación en la habitación se había vuelto tan pesada que al joven alfa ya le era casi imposible levantar la mirada, no podía justificar porque le había gruñido así a la presidenta del consejo. Sentía que tener al pequeño aun en sus brazos influía en su comportamiento, pero era peor si intentaban quitárselo. Sintió como este le jalaba de la chaqueta y al no darle respuesta Seungkwan se apretó a él para buscar consuelo, quería llorar.

—Vernon, nadie va a hacerle daño al niño, cálmate. — Seohye, la segunda al mando, le habló firmemente para que este dejara de transmitir su inseguridad. Todos los veían desde sus lugares en la mesa de trabajo.

—Estas asustando al niño. Detente ahora. — la voz dominante de Jisoo lo hizo tener que levantar la mirada ante su superior. Vio las caras nerviosas de los menores del consejo y las caras confundidas de los mayores, incluyendo la de Seungcheol que se inclinó un poco al oído de la chica susurrando algo.

—Lo siento. — dijo para tratar de ayudarse a sí mismo a tranquilizarse. Jisoo se levantó de su lugar y fue directamente a ellos dejando salir sus feromonas para calmar a Seungkwan.

—Correcto, Hansol. Hay que hablar de esto con tranquilidad, no pasa nada, simplemente hablemos. ¿De donde conoces a este niño?—ella se acercó lo suficiente a ellos y agachándose tomó una postura más amigable.

—No lo conozco, es la primera vez que lo veo. Para mí también es confuso. —le respondió mirándola con sinceridad. Jisoo asintió y se acercó un poco a oler al niño. Vernon al principio no supo porque, pero al ver como la alfa se levantaba de nuevo y miraba a Seungcheol negando supo que debían saber algo que él no.

—No huele a ninguna jerarquía, ni siquiera se ha presentado. ¿Porque dice que entró buscando a su alfa?— Jisoo regresó a su lugar y volviendo la mirada a Vernon resopló.

—Vine aquí...— la vocesita de Seungkwan se escuchó desde el fondo de la chaqueta de Vernon que salió para poder hablar con los mayores. —Porque mi alfa estudia en esta escuela.

—¿Estas seguro de que tienes un alfa?— sonrió Seokmin probablemente pensando que el niño estaría confundido y que no sabría a que se refería con "mi alfa". —Eres muy pequeño todavía para que estés dentro de una jerarquía.

—¿Que edad tienes, Seungkwannie?— preguntó Soonyoung, un omega del cuarto semestre que había observado toda la charla hasta ahora. 

—Tengo diez años y sí, tengo un alfa. — de repente y para sorpresa de todos, mostró una gran sonrisa a los presentes, cosa que tranquilizó a los alfas haciéndolos saber que ya no tenía miedo, sin embargo esa felicidad se vio opacada por las palabras que con un tono triunfal y algo presumido gritó en dirección a Vernon —Es él.

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La atmósfera se había detenido en un momento y al siguiente tenía una jauría de alfas enojados apresándolo contra una esquina.

—¡MAS VALE QUE ME DES UNA EXPLICACIÓN DE LO QUE ESTE NIÑO ESTA DICIENDO, CHWE HANSOL!—  gritó Seungcheol sumamente fastidiado tomandoló de ambos lados de la camisa. Ya no le importaba que el niño viera si le daba una paliza a "su alfa". 

—¡Ya te dije que no tengo idea de que esta hablando. Es la primera vez que lo veo!— le repetía una y otra vez. Soonyoung, Yuqi, Seolha y varios omegas más se habían alejado con el niño de la sala, más por seguridad de Seungkwan que por otra cosa, llevándolo al área recreativa donde habían un par de juguetes de los niños que algunos omegas que ya tenían crías llevaban mientras ellos estudiaban. Mientras tanto, los alfas y betas se habían quedado con el rubio entre enojados y pasmados por las palabras del niño.

—Ya no importa de donde lo conoce, lo que yo quiero saber es que haz hecho con este niño o que le haz dicho para que diga que eres su alfa. Estoy seguro de que ni siquiera sabe lo que eso significa. — le incriminó un beta de octavo.

—Maldición, ya les dije que no se nada. Yo fui al baño ya que últimamente tengo la mente en todo menos en lo que debo concentrarme; esta semana mi lobo ha estado aullando tan fuerte dentro de mi que hace berrinches, me dice que busque algo y se emociona de la nada con el olor a mandarina que me rodea últimamente, no se que sucede. Ahora tengo a este niño que cada vez que pasó a su lado, lo toco o lo miro mi lobo rasguña y me dice que debo cui...— al parecer fue el último en enterarse de lo que estaba pasando ya que todos lo miraban con una mano en la cara cubriendo su rostro casi diciéndole idiota. —Me dice que debo cuidarlo. Esto... ¿Esto es posible?

—¿Hola? — la puerta de la entrada a la sala se abrió dejando pasar a un pequeño omega de cabello rosado. —Cheol, hay una mujer afuera diciendo que viene por su hijo.

Seungcheol miró a su omega entrar y le hizo una seña para que dejara pasar a la mujer. Todos los alfas se alejaron del cuerpo de Vernon ahora que entendían que era lo que estaba pasando y regresaron a sus lugares en la mesa. Una mujer esbelta, de cabello muy negro y rostro amable entró detras de Jihoon cuando le dijeron que podía pasar.

—Buen día, hace dos hora se contactaron conmigo porque mi hijo se encontraba aquí ¿Quien es Jisoo?— saludó apenada aquella mujer. Jisoo de inmediato se levantó de la silla y estrechó su mano con la madre de Seungkwan.

—Soy yo, es un gusto. Lamentamos hacerla venir hasta acá, probablemente usted estaba ocupada, pero como ve su hijo escapó de la escuela y...—

Vernon se había quedado atrapado en un limbo mientras escuchaba todo aquello, ahora se llevarían a Seungkwan y realmente no sabía si eso le agradaba. ¿Su alfa? Él no era su alfa, al menos no por ahora, Seungkwan era un niño que ni siquiera se había presentado, sin embargo, el débil aroma que Seungkwan desprendía lo hacía no querer despegarse de él. ¿Debía decirle a la madre de Seungkwan lo que estaba pasando? ¿Y si lo castraba antes de tiempo?

—¡Maldición!— se quejó Vernon en voz alta haciendo callar a las personas hablando y haciendo que voltearan a mirarlo. De acuerdo, si quería hablar era ahora o nunca.

—¡Mamá!— gritó Seungkwan emocionado cuando salió de la sala recreativa con un libro para colorear yendo directamente a los brazos de la omega. Vernon sintió celos de que Seungkwan se emocionara de esa manera. —¡Mira! Es un dinosaurio y este es un delfín, este un hipopótamo y esta una gallina. ¿Podemos tener una gallina?— le dijo mientras señalaba uno a uno los dibujos en el libro.

—¡Seungkwan, no estamos para gallinas ahora!—le regañó la mujer delante de todos. —¿Porque saliste de la escuela? No debiste haberlo hecho ¿Y si te pasaba algo?

—No me pasara nada, mi alfa me defendería de todas formas. —le mostró una sonrisa cálida a su madre, sin embargo esta se quedó helada. Un bochorno pasó por toda la extensión de la espalda de Vernon al oírlo. Ahora estaría obligado a hablar.

—Sí. Señora Boo, debemos contarle algo que probablemente no le agrade escuchar. Vernon ¿Quieres comenzar tú?—rápidamente el balón fue lanzado a la portería de Vernon, este ni siquiera se molestó en bloquear. La madre de Seungkwan lo miró desconfiada. Era ahora.

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