Los mejores mentirosos

Start from the beginning
                                    

-Sé quién eres, tenemos algunas clases juntos. Eres la bonita pelirroja que se sienta adelante en la capacitación.

-Eso no quiere decir que me conozcas.

Me aseguro de mantener una cara neutral.

-¿Tiene nombre la bella pelirroja?-me pregunta él.- Mis amigos quieren saber, les gustas y eres un misterio para ellos.

Vuelvo a mirar sobre su hombro a sus amigos. Creo haberlos visto por los pasillos pero no puedo estar segura.

-Y a ti ¿Te gusto? ¿También crees que soy un misterio?

Él se inclina un poco hacía mí antes de responder.

-Sí y sí. ¿No me dirás tu nombre?

Golpeo mi mentón con un dedo mientras finjo pensar.

-Amelia.-le digo después de un momento.- Amelia Clarke.

-Amelia.-repite él mi nombre.-Amy, Lía...

Yo lo detengo.

-No, Amelia.

-Bueno, Amelia será. Me gustas.

Miro sus ojos color avellana, parece sincero. Pero a veces las apariencias engañan.

-¿Me darías tu número?

Él se para frente a mí con confianza y esa agradable mirada. Tal vez ha hecho esto muchas veces, es guapo, muy guapo y encantador, las mujeres no se le deben resistir y estoy segura que él aprovecha su encanto.

-Nunca recordaras llamar.-le digo.

No es un desafío pero me doy cuenta que él lo ve de aquella manera.

-Lo haré, voy a recordar llamar, es una promesa.

-No lo harás, conozco a los hombres como tú.

Él me mira con curiosidad.

-Vamos, confía en mí, seré gentil. Lo prometo.

Ahora esta coqueteando conmigo de forma descarada. Y me veo a mi devolviendo aquella sonrisa coqueta. Culpo al alcohol por eso. Lo veo sacar un pedazo de papel y un bolígrafo.

-Mañana ni siquiera recordarás mi nombre.-le digo mientras escribo mi número en aquel pedazo de papel.

Levanto la mirada y le sonrió, espero estar haciendo lo correcto al confiar en él. Sus labios están cerca de los míos y vuelvo a culpar al alcohol cuando tomo su rostro y lo empujo un poco hacía atrás antes de besarlo. Le sonrió cuando nos separamos y le doy mi número antes de dar media vuelta y salir de la fiesta.

Yo tenía razón, él no me llamó.

El teléfono del cuarto vuelve a sonar y corro hasta él ¿Será Henry? Él no le dijo a Stella que volvería a llamar, pero tal vez lo hizo. Tal vez se sintió mal por no llamar antes y ahora lo quiere compensar.

-Hola.

-¿Amelia?

Sé que es él.

-¿Qué te tomo tanto tiempo?-le pregunto en un tono burlón.

Pero en el fondo quiero una repuesta. Creo que merezco una. Pero él no responde a mi pregunta y divaga por diversos temas. Después de hablar un rato lo invito a mi habitación a ver una película, él acepta y le doy el número de mi cuarto.

Por favor, no dejes de amarme ✔Where stories live. Discover now