Ex-novio ❀ TaeKook

Ex novio

El joven y risueño Jeon no puede apartar la vista de aquel puesto de venta de besos. Sí, están vendiendo besos en su facultad para recaudar dinero para el festival de primavera que se celebrará a fines de semestre.

Es una idea estúpida, piensa, ¿Por qué un puesto de venta de besos? Es ridículo, demasiado ridículo y es aún más ridículo que Kim TaeHyung se haya ofrecido de voluntario para ser él quien reparta los besos a media universidad.

Y es que TaeHyung es muy popular, su singular simpatía y porte único hace que muchas chicas y chicos quieran un beso de él; porque efectivamente todos saben que él es gay, cosa que no les importa, porque TaeHyung está mucho más que bueno y no hay nada que discutir sobre su sexualidad.

JungKook está masticando una manzana observando lo bastante alejado como su ex-novio sonríe a todas las personas que se acercan al puesto de besos, como su ex- novio reparte besos a todos quienes colocan cinco dólares en ese tarrito de cristal, que por cierto, en lo que va de la mañana ya ha llenado por lo menos tres de ellos con puros billetes verdes.

TaeHyung sonríe y bromea con sus compañeros y compañeras de clases, algunos se toman un poco más de confianza y se apoyan en él, intentando conseguir un abrazo, pero TaeHyung sigue en su labor de vender besos, en las mejillas, en la punta de la nariz o en la frente, pero obviamente también hay jovencitas atrevidas que lo han pillado desprevenido y le han robado un fugaz beso en los labios, muchos de ellos apenas roces, pero se han ido más que satisfechas, es la única oportunidad para poder besarlo, al ser gay, él solamente se fija en chicos y ellas tenían que aprovechar la oportunidad.

HoSeok, la esperanza andante de la facultad se acerca a su mejor amigo y lo abraza por la espalda, susurrando algo en su oído, mientras que JungKook gruñe entre dientes, nunca le ha gustado como ese chico se acercaba tanto a su, por aquel entonces, novio. Siempre tan cercano, siempre tan meloso y TaeHyung nunca dejó de sonreír ante los celos del pequeño Jeon.

—Deberías ir y pagar por un estúpido beso para que dejes de gruñir como un idiota. —YoonGi se burla de su amigo, lo había estado observando desde hace unos minutos y pudo notar con facilidad los celos de JungKook.

—Ah... no quiero un beso de él, hyung. —Respondió frunciendo el ceño, fingiendo desagrado ante el comentario del rubio.

—Claro. —El mayor se sienta a su costado posando su mirada en TaeHyung, quien no para de sonreír y dar besos. —Parece que lo está disfrutando. —Comenta. JungKook asiente intentando posar la mirada en su manzana. —Deberíamos ir a decir hola ¿no crees?

—¿Qué? ¡No! ¡Claro que no! —JungKook se sobresalta y niega rápidamente, no puede acercarse a TaeHyung, hace mucho que no ha hablado con él... y no está listo, no aún.

—Oh vamos, no es gran cosa. —YoonGi se pone de pie y toma el brazo de su amigo, con mucha facilidad logra arrástralo con él, aun cuando JungKook está resistiéndose. —Ahí está Fei, vamos a saludarla. —Expresa cuando están muy cerca del chico de cabellos castaños.

—¡YoonGi! —Exclama Fei, quien había estado conversando con TaeHyung acerca de idear algo más para conseguir más fondos para el festival. —Oh JungKook... —Murmura insegura, pues ella es muy amiga del pelinegro y sabe perfectamente que este aun no puede sostenerle la mirada a TaeHyung.

—Hola Fei, hola Tae. —Saluda con una sonrisa YoonGi mientras suelta a JungKook y lo pone directamente frente a TaeHyung, este aun sonríe y aunque intenta captar la mirada del menor del grupo, no lo consigue, pues JungKook está con las mejillas rojas mirando directamente sus zapatillas blancas.

—Que genial ¿vinieron a ayudarnos a conseguir fondos? Podrían ser el reemplazo de TaeHyung por unos minutos tal vez. —Fei bromea para aligerar la tensión del menor, sin embargo, por el gesto de JungKook, se da cuenta que ha conseguido todo lo contrario.