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Estaba preparada para entrar, pensé que estaría más segura si hacía equipo con Ruri pero lamentablemente la perdí de vista, bueno que más da?
No me queda de otra más que seguir.

Me adentré al bosque, apenas pasaron 10 minutos y no veía nada, guarde mi katana, mientras seguía buscando, escuche un grito agudo a lo lejos así que corrí lo más rápido que pude, pide ver que de espaldas un demonio estaba devorando a otros cazadores, y sin dudarlo ataque.

__- aliento de rayo, primera postura, Destello del trueno!!

Ya había perfecciónalo la técnica antes así que fue fácil, y al ver a quién devoraba me dio la impresión de que el "sobrevivir" no era juego, mis ojos no dejaban de ver a Ruri tirada en el suelo, su máscara estaba empolvada con algo de sangre, pero lo que más me dolió era verla con sus pulmones al aire, mientras que sus intestinos estaban afuera, su cara reflejaba dolor y angustia, en mi desesperación tome la máscara la sacudí y me la coloque en mi cabeza.

__- Ruri, así te tendré conmigo - susurre despacio.

Seguí caminando y aún no encontraba nada, pero en un segundo alguien se me lanzo encima mío, era un demonio, sus ojos eran totalmente rojos que me recordaron aquella ocasión, del susto pedía ayuda pero no encontré respuesta de nadie.

Narrador

__ estaba en problemas ella estaba asustada por el demonio, sin embargo por instinto colocó sus manos en el demonio impidiendo que se acercara, una estaba en su cuello y otra en su muñeca, mientras que el demonio tenía su otra mano clavada en el hombro de la chica, pero de una patada el demonio la soltó y en un segundo __ cortó su cabeza después de que este la perdiera de vista con su rapidez.

Narra __
Estaba asustada y paralizada del dolor podía ver cómo el demonio se desvanecía frente a mi mientras este me maldecía, seguí mi camino y gracias a mi vista logre matar a otros demonios, tenía una que otra herida pero por suerte no era nada grave solo golpes y rasguños.

La Prueba acabo y salimos del terreno nos felicitaron por pasar la prueba, pero al voltear solo pude ver 2 de las 8 personas que estaban, estaba algo triste por ellas, en ese momento las niña dijeron que escogeríamos la piedra de la que estaría hecha nuestra katana, solo analizé con mi vista las que parecían más resistentes, y tome una que era un poco lisa pero resistente , selo di a las chicas mientras que estás nos dieron cuervos parlanchines, nos dijeron que los uniformes llegarían junto con las katanas en unos días, solo teníamos que esperar.

Kimetsu no Yaiba   -Siempre a tu lado-  Tanjiro y tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora