Hinata: Del fracaso al amor

Del fracaso al amor

"Sí. En este momento tu hija está demasiado rota para ser parte de las fuerzas regulares de shinobi. Debido a esto ... tendremos que incluirla en un programa especial. ANBU".

Hiashi asintió, con los ojos bajos. Se levantó de su asiento, se inclinó y salió de la oficina. Parecía roto, pero Hiruzen no sentía simpatía por él. Con un profundo suspiro, pidió un ANBU.

"Cuando Yoru (noche) regrese de su misión, tráelo a mí. Tengo un recluta para él".

Yoru, de 11 años, el agente más temido y desconocido de ANBU. Después de solo 3 años de servicio activo en ANBU, ya tenía una reputación impresionante. Se había especializado en el campo de competencia más peligroso y poderoso que un shinobi podía: el sigilo. Su sigilo no estaba a la par con el habitual Jonin, no, era mucho más avanzado, lo que le permitía permanecer invisible incluso durante el día y a la vista, y eso sin usar ningún chakra. Además, en caso de ser descubierto, algo que aún no había sucedido, tenía un repertorio de ninjutsu lo suficientemente grande como para garantizar el escape.

Silenciosamente, se abrió paso a través de la torre, pegándose a las sombras, moviéndose como un espectro, incluso cuando se topaba con personas, ellos no lo notaron. Su pequeño cuerpo estaba revestido de negro, el negro de su pañuelo ocultaba su cabello, el negro de su máscara de porcelana, el negro de su armadura, el negro de su capa. Fue un pedazo de la noche dada la vida. Finalmente, llegó al escritorio de la secretaria del Hokage.

"Fui llamado por Hokage-sama". Dijo, mirando impasible al hombre mientras saltaba sorprendido. El hombre asintió y le indicó que entrara por la puerta, Yoru podía sentir sus ojos en él todo el tiempo. Lo ignoró. Entró en la oficina y se paró frente al escritorio del anciano líder. "Hokage-sama, ¿qué necesitas que haga?"

"Ah, Naruto-kun, por favor toma asiento".

Yoru, conocido por los civiles como Uzumaki Naruto, ninja de rango no especificado, suspiró con irritación, pero no obstante se sentó. "Ya te dije, Hokage-sama, Yoru es quien soy ahora".

El anciano líder agitó su mano despectivamente. Eso irritó a Yoru. Cuando tenía 6 años, había sido atacado por un hombre que no pudo superar sus pérdidas durante el ataque de Kyubi y quería venganza. A Naruto le contaron todo mientras lo apuñalaban hasta la muerte, le dijeron una y otra vez que había tomado demasiadas vidas, que nadie lo amaría, que ni siquiera era humano. Cuando se despertó en el hospital, su mente estaba rota, y solo quería una forma de reparar sus supuestos crímenes. Después de dos años de agotador entrenamiento en ANBU, sabía que no tenía la culpa, pero aún veía el deber como su única razón para vivir. Yoru nació. Pero el Viejo no dejaría de intentar traer a Naruto de vuelta, sin importar lo inútil que fuera. Molestaba a Yoru, pero sabía que el viejo Kage tenía buenas intenciones.

"De todas formas." Dijo Sarutobi. "Tengo una recluta para ti. Aquí está su archivo. Todavía no le han dicho que será inducida".

Yoru tomó el archivo y leyó rápidamente las partes importantes. Un Hyuga, estos tipos solían ser reclutas pobres para los ANBU, eran demasiado orgullosos. Esta parecía interesante. Tal vez podría convertirla en un ANBU decente si pudiera motivarla, pero este tipo de perfil generalmente era difícil de motivar, tendían a sentir que no valía la pena hacer el esfuerzo, porque fracasarían de todos modos. Tendría que improvisar. Él podría vivir con eso.

"Ya veo. ¿Algún otro parámetro en la misión, señor?"

"Sí. La recogerás en la Academia tan pronto como puedas. Ella te conocerá como Uzumaki Naruto, Jonin de nuestra aldea". Dijo el líder mientras le lanzaba un pergamino. "Dale esto a su maestra, Umino Iruka".

Yoru gruñó disgustado. No le gustaba ese nombre, pero era parte de la misión. Se ocuparía de eso. Al menos, ahora tenía un rango oficial. "¿Ella está fuera del hospital?" Sarutobi asintió con la cabeza. "Muy bien, la recogeré de inmediato".