Capítulo 6.

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Me habia quemado la mano sacando la pizza del horno, al parecer olvide que la puta bandeja se calentaba.

Sentia mi mano escocer, una linea roja se iba haciendo visible en la palma de mi mano.

- Ya esta la pizza- gruñi.

A los segundos aparecieron las chicas, mi hermanita incapaz de preparar su comida fue y tomo un trozo de pizza para meterselo en la boca.

Luego recorde que estaba caliente.

- Esta calien...- empece a decir mientras metia mi mano bajo el grifo.

- Ahhhhhhhh quema, quema, quemaaa- grito Luz y rei para mis adentros.

-NO PONGAS LA MANO BAJO EL AGUA- me grito Jewel y pegué un salto.

- ¿porque ?- pregunte alarmado, Luz me empujo y puso su boca bajo el grifo.

- El agua no lo calma, ven- me arrastro escaleras arriba hasta el baño.

Okay, esto podria mal interpretarse fácilmente.

Reviso las gabetas del baño y saco la pasta dental. Enarque una ceja. ¿Que pensaba hacer con eso? Puso pasta de dientes en su dedo y extendio la otra mano, pidiendo la mia.

- ¿Que vas a hacer con eso? - aleje mi mano protegiendola.

- No seas nena ,dame la mano- tomo mi mano y puso la pasta dental sobre la quemadura, un gran alivio me invadio, la pasta me habia refrescado la quemazón. - ¿Mejor? - Asentí.

Siguio acariciando la palma de mi mano con la pasta.

Jewel no era fea, ahora que me pongo a pensar, era alta, con piernas extraordinariamente largas que te hipnotizaban al caminar, manos suaves, ojos avellana con toques verdes, cabello castaño claro hasta un poco mas abajo de los hombros, y unos labios... unos labios que daban tremendas ganas de besarlos.

Es una niña, maldito pedofilo. - Me recordo mi conciencia.

Maldije porque tenia razón, pero nada nos haria un beso ¿Cierto?

Sin pensarlo mas me acerque hasta ella y le di un pequeño beso de diez segundos. Si, los conte. Sus labios eran suaves y parecian encajar a la perfección con los mios.

- Gracias - le dedique una sonrisa y sali del baño, ella no me siguio, se quedo alli, en el mismo lugar donde nos besamos.

Llegue a la cocina y Luz ya iba por su segunda porción de pizza. Tome una porción y me puse a comer.

- Mañana en la noche habra una fiesta- que raro mi hermana, queriendo ir a una fiesta(sarcasmo) - en casa - concluyo y casi me atraganto con la pizza.

- ¡¿QUE?! - deje la pizza a un lado, queria hablar y no podria mientras masticaba, eso no pareció molestarle a ella.

- Haremos una fiesta. Invitare a unos amigos, puedes invitar a algunas amigas tuyas, si es que tienes alguna- rio- en fin, tu podrias ser el Dj.

- ¿Porque crees que te dejare hacer esa fiesta?

- Por que... ¿me amas?- enarque una ceja- Por que ...¿habra muchas chicas de tu edad y podras ligar?- movi la cabeza en gesto de que no estaba del todo convencido- Te dare cien pesos.

- Docientos.

- Ciento cincuenta...

- Hecho- dije y le di un mordisco a la pizza.

Vi a Jewel bajar las escaleras, su mirada cruzo con la mia pero yo la aparte. Mi plan ahora; ignorar a Jewel, no queria que se ilusionara con que estoy enamorado de ella o algo parecido. Ella es linda, la quise besar y lo hice, nada más.

Tomo un trozo de pizza y lo mastico muy rapido, ella habia comenzado a comer la pizza después de mi y la habia terminado, yo aun iba por la mitad.

- Lu, tengo mucho sueño y me siento mal. Ire arriba a dormir ¿si?- Luz asintió y ella se fue.

Comi un segundo trozo de pisa y me levante de la mesa. Mi hermanita iba por el cuarto.

- Me ire a dormir, cuando termines con todo- señale la mesa- Acomodalo.- Asintió y yo me dirigi a la cama.

Entre a mi habitación, y me tire rendido en el colchón, no suelo quedarme hasta tan tarde en la radio, pero hoy me necesitaron para varias cosas, nesesitaron que les hiciera un resumen sobre los temas a tratar en la radio, una estadística de como iba la audiencia y bla, bla, bla.

Revise mi celular. Tenia un mensaje.

Jew:

¡NO TE HAGAS EL TONTO CONTESTA!

Rei y puse el celular a cargar. Sentia mis parpados cada vez mas pesados, contestaré mañana... me quite el pantalon y la camiseta quedando solo en boxers. Busque la sabana a tientas y lentamente cai dormido.

MelomaníaWhere stories live. Discover now