Steve, el demonio del que me enamoré

Capítulo 1

Narra Andy

Abrí los ojos pesadamente luego de sentir la alarma. Empecé a tantear por mi mesita de luz hasta que dí con mi celular y pude apagarla.

Miré el reloj. Efectivamente eran las 7:00 am. Debía levantarme para ir al colegio.

De mala gana salí de mis calientes colchas y al sentir el helado suelo bajo mis pies comencé a buscar desesperado mis pantuflas.

Luego de haberlas encontrado me dirigí al baño. Encendí la ducha y me metí en ella. Al rato salí y me cambié para luego bajar a desayunar.

-Buenos días- dijo mi madre.

- Buenos días- la saludé y luego a mi padre, quien tomaba su café como siempre- Buenos días, padre- dije serio.

Ni siquiera se volteó a verme.

Apreté mis puños. Era costumbre que hiciera eso, pero aun así no dejaba de molestarme. Me senté en la mesa justo a su enfrente. Mi madre me pasó una taza de café y unas tostadas.

-Gracias- le dije con una cálida sonrisa que ella me devolvió.

- Ví que sacaste 9.6 en tu examen de física- dijo mi padre sin despegar la vista de su periódico.

Mi cuerpo entero se tensó cuando volteó a verme.

- Se acabaron tus dos horas libres luego de la vuelta del colegio- fruncí los labios.

- Querido, un 9.6 es una excelente calificación- empezó a decir mi madre.

- No lo salvarás ésta vez, Verónica- la hizo callar mi padre.

- Por lo menos déjale una hora- no lo dijo en forma de súplica.

- Está bien- espetó molesto.

Miré a mi madre con gratitud y ella me sonrió con algo de pena. Luego de acabar mi desayuno me dirigí directamente al colegio.

(...)

- Buenos días- Me saludó el pelirrojo ojos verdes que tanto adoraba.

- Buenos días, Mike- le dije sonriendo aunque algo desganado.

Él sólo frunció un poco el seño.

- Buenos días- Me dí vuelta y ví a mi otra persona favorita, Gwendy, la chica de pelo rubio y ojos marrones.

- Buenos días- volví a decir sin ganas.

-¿Otra vez te regañó tu padre por "tus malas calificaciones"?- redirigí mi mirada hacia el pelirrojo.

Me conocía demasiado.

Asentí.

- Me quitó otra hora de descanso- confesé y noté que se había enojado.

Pero justo antes de que pudiera decir algo, Gwen le tomó la mano.

- Tranquilo, debemos consolarlo, no hagas un escándalo ahora- dijo ella y se lo agradecí con la mirada.

En ese momento tocó el timbre de la primer hora y cada uno se fue por su lado.

Al entrar en el salón me senté en mi lugar. Cuando el profesor llegó nos saludó. Luego comenzó a repartir los exámenes.

- Andy Colsom- me paré inmediatamente.

Me dirigí hasta el profesor.

- Excelente calificación como siempre, Señor Colsom- Me entregó mi examen.

Había sacado 100%. Tenía la vaga esperanza que mi padre me diera aunque sea media hora de descanso de los estudios, más descarté esa idea casi al instante.