Los Merodeadores Y Tú

🩸BOGGART🩸

- Un boggart toma la forma de nuestros peores miedos y existe un encantamiento que lo obligará a tomar una forma de algo gracioso y esa risa será el motivo de su derrota - decía el profesor de DCAO mientras acercaba al frente de la clase un baúl que se movía bruscamente - No pueden dejar que la entidad los domine, que el miedo no los invada, tienen que concentrarse o puede acabar mal, pónganse de pie jóvenes -

Una vez que todos se levantaron, el profesor levantó su mano y apartó todas los mesa bancos hacia las esquinas

- Bien, quiero que todos formen un círculo alrededor del baúl y se concentren...bien ahora respondan esta pregunta ¿Qué es lo que más les aterra? Piénsenlo detenidamente, todos hemos tenido mucho miedo a algo o nos pasó una situación tan cruda que ahora no podemos olvidarla, en lo que piensan, yo comenzaré la demostración, observen mi movimiento de varita y memoricen muy bien el encantamiento ¿Listos? -

El profesor se acercó frente al baúl y con un movimiento de su mano los seguros se soltaron, poco a poco una mano grande con uñas demasiado largas comenzaron a sobresalir en la pequeña abertura tomándola por abajo y su vez abriendo por completo la tapa con mucha violencia, la mano se había quedado inmóvil unos segundos hasta que el mismo baúl salía otra mano esta dirigiéndose al suelo, después dejó salir todo su brazo para después asomar la cabeza, cuando salió completamente todo el salón estaba atónito, la figura no tenía piel, parecía carne pegajosa y sanguinolenta, había dos agujeros en donde se supone tendrían que estar los ojos, sus vértebras estaban de fuera y sus piernas parecían de algún animal, comenzó a acercarse al profesor amenazador haciendo ruidos como los de un toro, el profesor levantó su varita

- ¡Riddikulus! - dijo apuntando directamente, de pronto la figura fue disminuyendo de tamaño hasta parecerse a un duendecillo de jardín malhumorado que golpeaba el piso como si estuviera haciendo una rabieta, todo el salón estalló en risas

- Así es jóvenes, me aterran los demonios necrófagos, la razón se las explicaré en otra clase, el punto es que no dejé que me dominara y eso es lo que quiero que ustedes hagan, pensar en algo gracioso en lo que se pueda convertir su peor miedo, recuerden que esto es una clase se pueden equivocar y lo pueden intentar hasta que lo dominen, pero si no lo dominan aquí, afuera será peor para ustedes, ahora es uno controlado, pero allá afuera pueden enfrentarse a dos o más, así que quiero ver que tan valientes son, confío en ustedes -

El profesor comenzó que elegir a los alumnos al azar, muchos se ofrecían voluntariamente pues algunos querían demostrar sus habilidades y valentía frente a los demás, en especial los alumnos de Gryffindor.

Los boggart en su mayoría eran muy comunes para el, arañas, serpientes, insectos, la oscuridad, dragones etc, nada que no hubiera visto en otras clases.

Era el turno de Jason, el profesor se quedó muy atento, era el más disciplinado de su clase y por lo tanto uno de sus favoritos.

Jason caminó al centro del círculo y se detuvo frente al boggart anteriormente convertido en una burbuja con forma de pingüino, pensó en su temor más grande que según el creía (perder a sus papás) pero antes de que cambiara, le comenzó a doler el estómago y el boggart giró tan rápido para después convertirse en ____, confundido se sonrojó, el salón entero comenzó a murmurar, incluso algunos chicos se burlaban

- Esto no es lo que pensaba profesor - dijo apenado

- Bueno, es algo que me sorprende, pero un boggart no se equivoca -

Jason levantó su varita dispuesto a terminar cuando una risa proveniente del baúl se escuchó, pronto el aula se hundió en una penumbra y del baúl salió un figura humanoide, parecía medir casi dos metros, se lograban apreciar sus brillantes ojos amarillos, unos de sus brazos se estiró tomando a ____ por la espalda, apreciándose mejor sus brazos grandes y completamente llenos de pelo, donde se supone que estarían sus manos habían unas garras como de un perro gigante, con su otra mano, liberó lo que parecían unas uñas afiladas que brillaban como navajas entre la penumbra, de pronto el las acercó a la garganta de ____.