Ojos congelados me miraron sin mirarme en realidad, la diminuta boca abierta buscando decirme algo y ese sentimiento que detestaba se filtró en mi pecho.

-Shh... Espera.

Fui hacia el pequeño refrigerador que en cuanto llegué vacié para poner bolsas de sangre. Le llevé una y la abrí con mis dientes. Él parecía estar ahogándose al respirar, clavando sus uñas en el dorso de mi mano y haciendo pequeños sonidos al tener la sangre en su boca.

El hilo bermellón cayó desde sus comisuras y la sensación se apoderó de mi vientre bajo. Quería tocar con mi boca la comisura de la suya y llevarme la sangre con mi lengua, quería hacer algo obsceno con él.

Y su torso subió por voluntad, manos frías apretándome los hombros y luego el cabello de mi nuca.

-¡Debiste dejarme ir contigo!- gritó pareciendo por fin despabilado.

-Lo sé.

-¡Si no fuera por mí estarías muerto ahora... realmente muerto, idiota!- sus manos empujaron mi pecho con escasa fuerza.

-Lo sé.

-¡Tienes idea de lo horrible que es despertar con el cuello partido y el presentimiento de algo malo!

-Lo s-

-¡Deja de decir que lo sabes todo, no sabes nada!- tomó la almohada de detrás suyo y me golpeó con ella, una y otra vez- ¡Vampiro idiota y malvado... Jodido cobarde y egoísta!

-¡Basta!- intenté sujetar sus manos pero soltó la almohada y me golpeó con puños cerrados. Joder, era la primera vez que veía a un vampiro llorar.

-¡No pueden dejarme solo, son horribles... Los odio... Te odio!

Oprimí su cuerpo contra el colchón que se amoldó a él y pegué mi boca a su oído, seguía respirando agitado, lloriqueando igual a un humano, golpeándome con esfuerzo.

-Gracias.

Y él se relajó, su pecho se contrajo y luego lloró un poco más.

Pero no podía estar más tiempo con él porque en el oscuro sitio de mi mente existía esa necesidad de tenerle más cerca y yo no entendía de qué se trataba.

Estaba demasiado confundido para confundirlo a él también, aunque sabía que ese chico más que quererme me detestaba. Y por ahora, me encontraba satisfecho con eso.

Sentí la piel de su cuello bajo mis labios y la excitación me recorrió por completo, pero me alejé antes de ceder ante esto y di un golpe al salir de esa habitación, sin poder evitar pensar en Haechan.

Estaba cansado de pensar en él, quien era mi maldito karma. Yo morí con esa sensación del primer amor, cuando estaba convirtiéndome en un monstruo me aferré a esa emoción...

¿Cómo se suelta el fantasma del primer amor?

Y este chico que logra extrañamente revivir mi corazón me recuerdo demasiado a eso a lo que me sigo aferrando Estoy aterrado de estar cayendo por una ilusión.

Creí que estaba bien con ello hasta que este muchacho llegó y ahora no sé si se trata de él y su irremediable manera de sacarme de quicio, o se trata del sentimiento que Haechan me regaló.

He aprendido muchas palabras a lo largo de mi vida y todavía no encuentro una para describirle.

<<🌙>>

DongHyuck

¡No volveré a permitir que me quiebren el cuello! Era quizás el segundo peor episodio que había experimentado en mi vida... ¿O muerte? Como sea, era detestable. Primero se sentía como si mis propios huesos se astillasen hasta ser triturados e impidiesen que el aire entrase, luego mi cerebro se hinchaba por la falta de oxígeno y antes de poder gritar, ya no podía hacer nada... ¡Ahg...!

Caelum ~ {Nomin/Markhyuck}Where stories live. Discover now