Capitulo IV.
Hoy era un gran día, hoy estaba predestinado hacer el mejor día porque simplemente con anticipación ya se predecía eso, hoy era una excursión escolar donde íbamos a compartir fuera del ámbito de estudios, íbamos a compartir todos incluyéndome y obviamente incluyéndola a ella, era un día perfecto... O eso pensé esa mañana.
Antes de comenzar con el día de la excursión los pongo en situación, el colegio había anunciado una excursión escolar a otra ciudad, era el último viaje del año y el auge era notable entre nosotros por ello decidimos ir a pesar de que no acostumbrábamos hacerlo. Noa no estaba decidida si iba a ir al viaje, cosa que me resultó extraña, es una chica aventurera que le gusta las nuevas experiencias, es una cualidad más que me llena de ella, por ello opté por preguntarle e intentar convencerla, la primera parte era difícil, ¿por qué preguntarle era tan difícil? Por mala experiencia, ¿no les conté? Resulta que pasaron muchos días, en esos días pues llegué a entablar una confianza con Noa que me hizo saber su respuesta ante mi pregunta de siempre, no fue una respuesta que quería pero era diferente: "No me gusta que otros carguen con mis problemas", que empatía, ¿no? Pues la empatía fue que colmó el agua de la copa en un rato sabrás por qué, entre esos días mi misión era dar opiniones y consejos a ciega, porque solo me basaba en suposiciones que hasta ahora sé que pueden ser ciertas, nunca me negó los hechos. Pero bueno, sigamos con lo de convencer a Noa, lo cual no fue muy difícil solo tuve que decirle lo divertido que puede llegar hacer el viaje, es una chica que se definiría por atracción a la diversión, pero había algo más y de manera extraña esta vez sí logró expresarse de más ante mí, me decía que tenía una sensación extraña que podría hacerla cambiar y arruinar su felicidad actual, era algo extraño lo que me dijo y no lo llegué a captar pero mezclando varias informaciones que tenía y enlazándola con el ciclo de Mario pues todo encajaba a la perfección, ¿su sensación extraña? No lo quiso aceptar así, pero es algo a lo que le llamamos "miedo", tenía miedo de que durante la excursión la felicidad que mantenía en el momento podría desgarrarse por algún acontecimiento no esperado, cosa que agregándole que podría disfrutar con sus demás amigos y que el viaje a primera vista se veía interesante pues no era algo que podría suceder, y así es una vez más hemos llegado a la convención y hemos pasado al siguiente nivel, el día de la excursión.
Podría saber porque estaba tan contento ese día aunque una expresión facial pues... no lo expresaba, pero merecía el momento estar contento por el simple hecho de que mi imaginación me hizo hacerlo, veía ese día tan especial, tan oportuno y tan a mí favor que así mismo todo se volvió una completa mierda. Habíamos partido hacia la ciudad donde empezaba la excursión, estaba todo normal, habían asistido todas las personas o al menos los que me importaban, pero principalmente ahí estaba ella un tanto extraña, estaba tranquila lo cual no acostumbraba, siempre estaba tan alegre que lo demostraba, pero me gustaba un pequeño viaje en el recorrido, no siempre nos levantamos de buen humor y menos cuando ni siquiera nos levantamos porque partimos de madrugada, quería mantenerla feliz, era algo que me prometí porque lo debía hacer para que todo salga bien, todo salga bien para mí y para ella que era lo más importante. La emoción disminuía, habían pasado horas de recorrido y ya era algo normal, había hablado con ella un buen rato de ningún tema interesante pero sí sonreía, sí me miraba con sus ojos claros y brillantes y aun manteníamos el ánimo de que el viaje iba ser sorprendente porque en sus ojos podría ver eso. No... Creo que lo hará, se sentó al lado de ella y yo tengo una chica al lado que sí es importante pero no es el momento, dije al ver que aquel chico del ciclo se acercó a Noa. ¿Cómo mierda arreglo esto? Me pregunté a mí mismo pero al igual me pregunté, ¿puede llegar hacer tan malo eso? ¿Qué tal si me equivoco y se siente bien? Pues sí, me dejé llevar de esa idea e ignoré la situación cosa que me llevó a una respuesta y era no, no se sentía cómoda... pareciese que esto era forzado, pareciese que necesitaba una nueva explicación y no dudé en buscarla en la fuente más cercana, ella misma. Noa se encontraba sola luego de un rato, era el momento oportuno para preguntarle directamente, ¿por qué te gusta hacer sentir bien a la gente cuando estás incómoda? Y nuevamente de manera extraña me respondió que es su deber, ¿Tu deber? ¿Acaso eres la bondad hecha persona? No es tu deber, le respondí, tu deber es tu felicidad y aunque se escuche de forma egoísta, no todos merecen que le brindes felicidad a cambio de tu tristeza, había entendido el mensaje, eso me hizo saber de qué el consejo que le brindé en el momento era adecuado para el momento y que lo había comprendido, me sentía feliz, por alguna razón comprendió la situación y me hizo entender de que me haría caso.
Habíamos llegado a la primera parada, les seré sincero... el viaje es una mierda, pero la emoción no estaba en la excursión sino en un enlace en el que me concentro y detallo aquí para expresar a tiempo completo mi situación. Como seguía diciendo pues habíamos llegado al primer lugar de la excursión donde me aburrí, había desaparecido, no la veía por ninguna parte pero no era preocupación, sabía que sí seguía mi consejo el cambio drástico de humor no iba suceder, casualmente íbamos a un sitio a parte de la excursión donde no hubo interés sobre ella de que estuviese allí pero aun así fui por Daniel, ¿se recordaban de él? Es que tampoco me basaré tanto de otras personas, el ambiente era normal pero sentía una sensación extraña, sentía como que el consejo comprendido de hace una hora estaba desapareciendo poco a poco y a pesar de que desaparecía tampoco la situación que se vivía en el momento era adecuada para el consejo, pareciese como si la hubiera cagado con la situación pero no con el consejo, porque no parecía incómoda a pesar de que la situación nuevamente se había dado pero esta vez se veía alegre, ¿qué sucedió? Me pregunté y esa pregunta cada vez incrementaba en mi cabeza al punto que tuve que alejarme, tuve que comenzar analizar distanciado de la misma situación porque estaba muy cerca y la ira que giraba allí no me dejaba concentrarme, ira que lleve hasta el fin del pasa-tiempo de ese lugar, fui nuevamente al bus con la misma ira pero manteniendo la cordura, quería saber la razón, quería saber si me equivoqué y quería saber si este viaje no iba ser como esperaba, quizás todo había cambiado desde ese momento pero como algo ilógico tenía un aura positivo, se trataba de ella y no podría pensar en nada negativo cuando algo gira en torno a ella. El viaje siguió y era como una montaña rusa, en un momento estaba bien y en otro estaba mal, no sabía si el consejo estaba bien dado o no, pero sí sabía que la comprensión, el entendimiento y el ejercerlo era algo que nunca pasó por su mente y no sé por qué sí eso había entendido yo, no sé si verdaderamente comprendió un segundo mensaje del consejo o simplemente le era imposible, las ganas no me dejaron pensar y hasta ahora sigo pensando que cometí un error con esto: Había preguntado nuevamente y directamente de qué pasaba, cosa que no solía preguntarle, sabía que no me respondería y sabía que lo veía como algo malo y no bueno, mis intenciones no eran vista como buenas para ello y eso me enojó muchísimo, al fin y al cabo el viaje fue aburrido, no salió como esperaba porque sin ayuda de ella no puedo ayudarle, y para ella... la situación tampoco fue la mejor.
