Capítulo 18.

2.3K 133 12
                                    

**Editado**

Haley:

Esa noche, Theo y yo dormimos en un desastre de sábanas enrredadas y piel desnuda. Después de nuestra sesión de amor en la cascada de agua, nos apuramos a su casa para hacer exactamente lo mismo. Pareciera como si no pudieramos obtener suficiente del otro, la lujuria sobrepasaba  todas las otras emociones.

Despierto un poco temprano. El sol apenas se asoma por el horizonte. Mirando por las dos puertas francesas que cubren las paredes de Theo, me doy cuenta de que el cielo está oscuro y nublado, un día prometedor de lluvia. Normalmente odio los días lluviosos. No bronceado y no sol. Un día atrapado dentro viedo horas sin sentido de televisión. Ahora que estoy con Theo, no me importa. Quiero ua excusa para poder estar acostada con él. Aunque, realmente no necesito una.

Hoy día es domingo. Eso significa que no hay trabajo. No soy muy religiosa. Me refiero a que, creo en Dios y Jesus pero no soy una persona que va a la iglesia. Los domingos son mis días de Theo.

Theo ronca suevemente bajo mi piel. A pesar de que sus abdominales están muy marcados, es suave, apretable y adorable.

Hablando de eso, quiero decirle que lo amo. Quiero gritarlo desde los techos y que todos se enteren. Pero algo me detiene. Yo no soy la clase de mujer que abre su corazón al hombre. Soy esa mujer que se sienta y espera a que alguien venga y se enamore de ella solamente para dejarlo de patitas en la calle. No voy a poner resistencia en admitir que le temo al compromiso. Theo tiene que estar enamorado de mí antes de que cualquier palabra salga de mi boca. Pero esperar me podría tomar una eternidad y guardarlo me esta matando.

Pero no puedo esperar.

Tengo que hacerlo.

Los brazos de Theo se apretan a mi alrededor. Siento un beso en mi frente. Amo sus besos. Son suaves, son tan confortables. Lo amo.

-Buenos días amor,- dice en su voz rasposa de mañana. Me derrito. Cada ves se pone más sexy. Y lo único que provoca eso es que mi amor por él sea más grande.

-Buenos días bebé,- digo, besandolo gentilmente, ignorando nuestro aliento mañananero.

Una sonrisa aparece en su rostro, asumo que su cabeza está llena de recuerdos de anoche. Y una sonrisa parece en mi rostro también.

-Estuviste asombrosa,- susurra, besando mi cien, apretando mi cintura. Me sonrojo, no estoy tan acostumbrada a tal elogio en tal situación. -Fue notable. Nunca he experimentado algo así en mi vida,- me informa.

-Yo tampoco.- De verdad, nunca lo he hecho. Algo sobre estar con Theo es distinto a cuando estaba con otros tipos antes de él. El sabe exactamente que hacer. De alguna manera sabe exactamente que me gusta, cosas que ni siquiera yo sabía que me gustaban; almenos antes de la noche anterior. Me fascina.

Sus manos van más abajo apretando levemente mi trasero. Lo beso, queriendolo de nuevo. Theo rueda, haciendome quedar boca arriba y situandose arriba mío. Siento a su pequeño amigo-no tan pequeño- cerca de mi entrada. Suspiro antes de alejar a Theo.

-¿Qué pasa?- me dice, sus labios están rojos por besarme.

-Theo sabes que amo esto, sabes que amo estar contigo. Fue completamente notable. Fue especial. Pero algo tan especial como eso no puede ser estropeado. Debe de ser guardado, querido, así se mantendrá especial. Te quiero tanto como tu me quieres. Pero el deseo es el que nos mantiene juntos.

-Nunca pensé que tú rechazandome sería tan sexy,- dijo sentándose y rascandose la cabeza. -Pero quiero estar contigo. Si no te puedo tener todas las noches, que importa. Aún te seguiré teniendo, seguirás siendo mía, seguiremos siendo nosotros.

Puede parar de ser tan perfecto.

-Te a,-Los ojos de Theo se mezclan con los míos y me detengo.

-¿Qué fue eso?- dijo, con los ojos entrecerrados.

-Estaba a punto de decirte que amaba que me entendieras,- sonrío tímidamente evitando su mirada, esperando a que no se haya dado cuenta de mi mentira.

Dios Haley, no puedes dejar que se te salga así de nuevo.

-Amo que ames que yo entienda,- me dice, besandome tiernamente.

Somos interrumpidos por el sonido de un celular. Theo lo alcanza y lo saca del Ihome, respondiendo por mí. De repente un terrible sentimiento se apodera de mi mientras su ceño se frunce y sus ojos pierden luz. ¿Qué pasa si es Colin? oh no no no.

-Mmm está justo aquí,- dice antes de pasarme el celular, sin mirarme a los ojos.

Traigo el celular a mi oído, sin mirar al nombre de la persona que me llama. Ya se que es Colin.

-Hola,- suspiro. Pero la voz en la otra línea no era la de Colin. De hecho, no la reconozco para nada.

-Hola Haley Jacobs, soy Bob Miller de New House Real State, la llamo por el departamento que buscó en Bunker Street.

Casi río por mi idiotéz. Colin obviamente no sería tan estúpido como para llamarme después del incidente en el aeropuerto. Ni siquiera cuando lo besé de vuelta.

-Oh, hola,- digo. Ha pasado casi un mes desde que he buscado departamentos. Este es el único que realmente quería comprar pero alguien más me ganó.

-Originalmente, otra pareja había comprado este lugar, pero desde ayer que está de nuevo a la venta. Recuerdo que usted estaba iteresada y pensé en llamarla antes de ofrecerselo a otros.

El lugar era verdaderamente asombroso. Pero Theo, sentado tan cerca mío me distrae en el proceso de pensar.

-Esa es un oferta muy tentadora.

-La casa estará lista para mudanzas el siguiente sábado,- Bob me informa.

-Bueno, lo llamaré durante esta semana para informarle de mi decisión final.

-Suena bien. Ese departamendo de verdad está hecho para usted.- ¿Podría ser un poco más falso?

-bueno, adiós. Gracias.

Cuelgo y miro a Theo. Su cara está llena de tristeza. Aww. No quiere que me vaya.

-¿Sigues buscando un departamento?

-Para nada. Paré de buscar hace ya mucho tiempo. Sólo llamo porque habían desocupado un departamento que había visto.

-Mira, si te quieres ir está bien.- Por la mirada en su rostro, no está bien. Ahueco su rostro con mis manos, haciendo que me mire a los ojos.

-Theo, no me voy a ir. Lo prometo. Lo llamaré mañana para decirle. Solamente no podía con el bastardo fálso cuando estabas sentado justo en frente mío.

-¿Lo prometes?- Pregunta con ojos de cachorro-adorable

Me río ante su ternura. -Lo prometo Theo.

¿Porqué querría abandonar al hombre que amo?

Lovespoken - Theo James (traducción) BAJO EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora