Capitúlo único

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Escrito: 15/11/2019
Publicado: 14/02/2021
Palabras: +1200

N/A

¡Feliz San Valentín! Hoy es el día del amor y la amistad, así que público algo de esta linda parejita que son buenas amigas en el canon y una pareja romántica en el corazón de muchos fans. Disfrútenlo! 💕

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Los rayos de sol que se reflejaban en la hierba húmeda del parque hacían que el verde de esta se viese brillante. Casi como cesped de oro puro.

Ella abrió su carpeta y tomó una hoja blanca. La observó largamente, rotandola de diversas formas y frunciendo el ceño en concentración hasta que pareció decidirse por la forma en que deberia ocupar sus espacios vacios.

Sacó los lapices de colores, su goma y el resto de sus materiales de dibujo. Luego, tomando su lapiz negro, trazó con este una linea; la primera de muchas.

Trazo por trazo, parte por parte, la figura comenzó a tomar forma. Con las correspondientes interrupciones que se refieren a: sacar su celular para tomarle una foto a la carpeta en sus piernas, conectar sus auriculares y seleccionar las canciones a escuchar, levantar la vista para observar el paisaje a su alrededor, etc.
De todos modos se hallaba tan concentrada en su trabajo y canción que sonaba en sus oidos ese momento (y que no podia evitar tararear), que no oyó el grito de advertencia ajeno hasta que fue demasiado tarde y ya estaba de espaldas en el cesped con un peludo labrador dorado ladrando sobre ella.

Inmediatamente se quitó los auriculares e intentó que el gran perro se moviese de encima de sus piernas.

-- Arnold, deja a la chica en paz.

Una joven de cabellos rizados y rojizos sostenia una correa en una mano, un juguete para perro en la otra y una expresión agitada en su rostro que demostrada lo mucho que habia corrido para llegar hasta allí.
El gran labrador ladró y -al fin- se alejó dando saltos y correteos juguetones entre su dueña y la muchacha aún en el cesped.

La chica de cabellos rubios se levantó y observó su dibujo. Sonrió al ver que no se habia maltratado y volteó hacia la pelirroja que la miraba de forma arrepentida.

-- Lo siento tanto, de verdad --. Se apresuró a decir--. Arnold nunca me hace caso cuando salimos, y le gusta saltar sobre la gente. Lo siento si se arruinó tu dibujo, cuando llegaba pude ver algo de él y me pareció hermoso. Si se dañó puedo pagartelo, de verdad, yo...

La rubia levantó sus manos con una sonrisa relajada y respondió al mismo tiempo que negaba con la cabeza:
"No es necesario, el dibujo está bien."

La chica de cabellos rojos se quedó mirandola sorprendida, y luego de morderse nerviosamente el labio y sacudirse en su lugar acabó por responder sonrojandose casi tanto como el color de su cabello:

-- Oh, yo... no entiendo lenguaje de señas. Perdón.

Ella sonrió ampliamente entrecerrando sus ojos y negó con expresión risueña. Haciendo señas sencillas de forma lenta le dijo que tampoco debia preocuparse por eso, la chica pareció comprender y asintió aún sin estar muy convencida.

-- Por... ¿por casualidad no tendrás en tu mochila algo dulce? Es que si Arnold se acercó así hacia ti fue porque seguramente olió que tenias algo que le gusta...

La rubia lo pensó un momento, para luego agacharse y buscar algo en su mochila. Sacó un paquete de galletas con chispas al cual solo le quedaban dos de ellas, y se las entregó con una sonrisa al animal para que las comiese.
Arnold pareció conformarse con eso, porque ladró alegre y luego de olfatearlas comenzó a comerlas.
Luego, mientras ellas intentaban comunicarse correctamente, él esperaba mirando de una a otra en silencio y con las orejas levantadas; como si percibiese que algo importante estaba pasando allí.

La dibujante silenciosa [OS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora