Capítulo nueve: Domingo a la tarde

0 0 0
                                    

Adrián se encontraba con Sarah en el comedor, ella le tenía que decir algo muy importante. Adrián se fijó que hora era en un gran reloj que había en esa sala, eran las 4:30 de la mañana.

- Bueno, primero, antes de contarte esto, quiero que me digas por qué se fueron sin autorización – le dijo Sarah a Adrián.

- Eh... nosotros... usted sabrá, lo que queríamos hacer... creo que estaba fuera de las reglas, y por eso no le queríamos decir nada... no fue nuestra intención escaparnos, yo lo siento.

- No quiero ser mala, pero un lo siento no siempre les arreglará las cosas en este lugar, tampoco en Santo. Quiero que me prometas que la próxima vez que se les ocurra algo así, me lo digan a mí, ¿De acuerdo?

- Mmn... sí. ¿Qué era eso que quería decirme?

- Es sobre ti, sobre por qué te elegí a ti y no a otro humano, y por qué tú puedes usar tus poderes y otros humanos no podrían. Te lo voy a contar, esto te lo tendría que haber contado cuando nos encontramos en el parque, y no haberlo dejado para último momento.

- Cuénteme.

- Hace muchos años, cuando en la Tierra los humanos y maxhumanos vivían en un solo hemisferio. Cuatro maxhumanos conocidos como los 4 antiguos, nombraron a un grupo de protectores, de guardianes, siempre maxhumanos, para cada Medallón, pero no para el Medallón de la naturaleza, ya que este era el elemento neutro. Los antiguos los bautizaron "los Guardianes de Vesided" porque su deber era cuidar de Vesided y de los 15 Medallones, como así también cuidar a los humanos y maxhumanos. El hecho fue que la unión de los 14 Guardianes no duraría mucho, ya que, en cierta época, se dividieron en dos grupos distintos, los Guardianes y los Anti-Guardianes, nadie sabe con exactitud por qué ocurrió eso, pero ya ves el resultado. El caso es, que, los humanos y maxhumanos, al nunca haber estado en guerra, los casamientos entre ellos no estaban prohibidos. En la segunda generación de Guardianes, cuando ocurrió esta separación, el Guardián del agua de esa época, se casó con una humana. Su rama de la familia cambió, y el siguiente Guardián del agua no fue el hijo de él, fue nombrado otro Guardián. Cuando esto pasó, nosotros, nos olvidamos de ese Guardián que se casó con una humana, porque al empezar la guerra, muchos documentos importantes fueron destruidos. Cuando mi padre, junto con los otros Guardianes, desaparecieron, tuve que nombrar a un nuevo grupo de Guardianes. Había nombrado a 6, pero me faltaba el Guardián del agua, y ningún maxhumano podía ser Guardián del agua, porque nadie venía de la familia mía o del segundo Guardián. Y tuve que, ver cuál era el humano que tenía en su sangre la sangre del segundo Guardián. Me llevó 5 años encontrarlo, eras tú.

- ¿Yo? ¿Cómo es posible que sea yo?

- Porque tus antepasados, desde donde surgió tu familia, eran mitad maxhumanos, la mitad de ellos aún pertenecía aquí, con los Guardianes, pero todos nosotros lo pasamos por alto. Cuando te encontré y vi que en ti había un gran poder, un poder que ningún otro humano tenía, tú eras el único, y me tomó casi un año convencer a Contratierra que tú eras el único que podía ser el Guardián del agua. Y si todavía te cuesta trabajo creerlo, piensa que tienes habilidades que a cualquier otro le hubiera tomado años aprenderlas, te tomó sólo unos días aprender a usar tus poderes, sin mencionar que puedes ver las ocasiones en que un Guardián va a estar en peligro.

- Pues si, es verdad. Pero aún me cuesta trabajo creer eso, entonces yo estaba destinado a esto desde hace mucho tiempo, ¿Pero por qué yo soy el único en mi familia que puede hacer esto?

- Supongo que a tus poderes, les tomó muchas generaciones reaparecer en un cuerpo de humano, que no estaba preparado para tanto poder.

- Aja, ¿Hay algo más?

Los Guardianes de VesidedWhere stories live. Discover now