El amor no es solo humano

Interludio: La(s) visita(s) a Wakanda

La primera vez que el Doctor Stephen Strange pisó Wakanda, fue cuando su pareja Everett Ross lo invitó a una festividad del país africano, ya que consideraba que era una excelente oportunidad para presentarlo a sus amigos. Everett no tenía familia cercana, solo algunos amigos que conservaba desde su época de piloto; al parecer fueron T'Challa, Shuri y compañía quienes lograron llegar a convertirse en algo así como su familia sustituta.

Cuando finalmente Ross lo presentó a todos sus amigos, Strange pensó que si este encuentro hubiera ocurrido antes de convertirse en hechicero, sí habría estado asustado por hallarse frente a semejantes personas, sobre todo M'Baku y Okoye, quienes no mostraron ningún gesto en sus rostros luego de haberlo saludado, sino todo lo contrario, parecían observarlo como si de un insecto se tratara.

-Vaya, todo salió mejor de lo que esperaba –sonreía el agente con evidente alivio

-¿Lo dices en serio? –preguntó su compañero, perplejo

-Créeme, si no les hubieras agradado, los jabari y las Dora Milaje ya estarían detrás de ti.

-... ¿Ya ha pasado antes?

-Bueno, solo digamos que tengo la sospecha de que, en lugar de detenerles, T'Challa les ha dado su bendición para que actuaran en un par de ocasiones.

Lo que Strange nunca le dijo al otro hombre fue que en esa ocasión el rey sí lo amenazó en caso de que lastimara a Everett. Stephen sabía que era una persona celosa y algo egoísta con quienes realmente le importaban, por eso no le hizo mucha gracia que Pantera Negra resultara tan protector de su bajito agente y no se dejó amedrentar. Vamos, el hechicero no era ciego, en lo más profundo de su mente aceptaba que T'Challa era un excelente prospecto y para el colmo nada menos que un rey, por eso aunque el otro fuera un buen hombre, nunca podría terminar de congeniar con él.

Afortunadamente el hechicero tenía a la fiel capa de levitación de su lado. Levi era tan cariñoso y protector con Ross como lo era su pareja (a veces sospechaba que hasta más), así que lo hacía sentir más tranquilo tener la certeza de que si el rey intentara algún movimiento hacia su llamado mejor amigo extranjero, Levi no dudaría en reaccionar. Probablemente se enrollaría alrededor de Everett y se lo llevaría volando; la táctica le daba igual a Stephen siempre y cuando funcionara.

La segunda vez que el doctor visitó Wakanda ocurrió cuando llevaron a Bas para (presumir) que le vieran ahora con vida. La mayoría parecían desconcertados y sorprendidos con la manta basotho, Shuri principalmente no podía ocultar su curiosidad y sorpresa mientras contemplaba a Bas convivir con los demás.

-Increíble –declaró ella-. No solo puede moverse y flotar a voluntad, sino que tiene personalidad propia. Es como si le hubieran instalado inteligencia artificial o algo parecido.

-Se trata de magia ancestral compleja y que debe usarse con mucho cuidado –corrigió Stephen en tono ufano

-Es maravilloso, ¿verdad, Shuri? –dijo Everett mirando con evidente emoción a su pareja mientras Bas se dejaba examinar por T'Challa (esto bajo la vigilante presencia de Levi)

-Antes decías lo mismo de mis experimentos –susurró la princesa de mala gana

-¿Qué dijiste, Shuri?

-Nada, que me alegra que Bas se esté adaptando tan bien a ustedes.

Sin embargo el hechicero por supuesto que alcanzó a escucharla. Esperó durante un rato hasta que pudo acorralar a la princesa a solas (Everett estaba revisando algunos documentos con el rey). Ella escaneaba a Bas con sus perlas kimoyo mientras un protector Levi los vigilaba, por lo que creyó oportuno acercarse.