Mi Reina( Marinette X Adrien ❤)

Capítulo 16

- ¡Majestad!, ¡Está vivo! - exclama muy sorprendida Alya.

- ¡Estas vivo hermano! - Dice con mucha alegría Nino, para después abrazarlo fuertemente. Adrien correspondió a su abrazo con mucha alegría, él extrañó mucho a quién ha considerado desde siempre como su hermano.

- Sí, estoy vivo - les confirma. – Y necesito tu ayuda, bueno la ayuda de los dos

Suelta sin rodeos. Alya desde el principio notó que todo el asunto era raro, además de que se preguntaba si él estuvo desde siempre vivo en donde estuvo todo el tiempo y porqué tardó tanto en regresar.

- Claro, majestad, puede contar con nosotros en cualquier cosa, estamos a sus órdenes. Pero ¿Por qué primero no se hace anunciar en el castillo?

- Aún no puedo, Alya. Necesito hablar con ustedes, pero no aquí, síganme - Alya y Nino sin preguntar lo siguieron hacia la mansión del Maestro Fú, donde al llegar fueron escoltados a un pequeño despacho.

- Maestro. - Saluda Alya y Nino al anciano quien ya los estaba esperando.

- Alya, Nino, por favor tomen asiento.

Les dice el maestro y estos le hace caso.

- ¿Por qué tanto misterio? - Inquiere Nino – Créeme, Adrien, el reino se pondrá feliz de saber que estás vivo y sobre todo la reina, que no ha hecho más que sufrir por tu supuesta muerte... Y también la de tu madre... Y la de su primer hijo.

Esto último lo susurra Nino, Adrien ya sabía sobre la muerte de su madre y el primer hijo que tendría con Marinette, ya que en donde estuvo siempre le informaban lo que pasaba en su reino y todo para torturarlo.

- Sí, supe lo de mi madre y lo de mi primer hijo. - Dice él afligido. - Pero para ponerlos al tanto de todo, necesito que nadie sepa que estoy vivo, no aún.

Los dos morenos se miraron uno al otro, estaban pensando lo mismo, de lo extraño que era el asunto. Pero los dos prometieron no decir nada.

- Bueno... Después de partir a la busca del remedio que necesitaba mi madre para su recuperación, se supone que debíamos llegar a una isla, ya que eso es lo que se mostraba en el mapa que se le había dado a mi padre. Pero todo era mentira, las direcciones dieron a España donde fui atacado por el Duque Luka y sus hombres, este me encerró en un calabozo y me confeso sus planes. Él quería gobernar a París, llenarse de poder. Uno de sus planes es subir los impuestos y tratar al pueblo como si fueran esclavos, además de que, aunque este reino es pequeño, posee las mejores armas de guerra y mejores hombres, así que también planea utilizar cada recurso para atacar y gobernar otros países. Fue él quien envió a un hombre a engañar a mi padre con una supuesta medicina. El imbécil aprovechó que mi madre estaba enferma, para así guiar a mi padre a España donde fríamente le quitó la vida. Así que, no fue ningún accidente, no hubo tormentas, él mató a mi padre... Pensaba en enviar a su hermana para conquistarme, así yo me enamoraría de ella y le pidiera que se casara conmigo quedando como la reina, después planearía mi muerte, quedando él en el reino, ya que, su hermana haría todo lo que él le ordenara, pero no contó con que ya estaba casado con Marinette, así que planeo otra estrategia, cuando vino la primera vez a Paris, con el pretexto de hacer negociaciones conmigo, en realidad fue a ver al papa, quien aceptó hacer tratos con Luka, es un corrupto ese señor que dice ser fiel a Dios.

- Sabía que era un pedófilo, pero me sorprende que también aceptara hacer ese tipo de tratos... – Espeta furioso Nino.

- Así es amigo, solo esperaron a que mi madre se pusiera peor. Ellos sabían que yo iba por dicha medicina, allá me capturó pero no me mató "porque el papa no quería sentir la culpa por matar a un inocente", que idiota. Estos dos años sólo me torturaron tanto física como mentalmente. El Maestro Fu se enteró de todo atreves de una carta que envié con Rachad, uno de sus hombres que estaba cansado de él y por eso lo traicionó. El Duque con el papa de su lado no podré volver al castillo sin antes matarme o acusarme de algo y ser juzgado, perdiendo la confianza del pueblo. Por eso tengo que ir por el Emperador y contarle todo e impedir que ese idiota destruya mi pueblo.