Shirley (Edward Cullen x oc)

Invitaciones

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Al día siguiente fue estresante para ella, ver que la mayoría de los chicos invitaban a Isabella la hizo sentir celosa. Deseaba que alguien la invitara a salir. No podía hacerse ilusiones que Charlie la invitara porque de hecho no se podía pedir demasiado a los dioses.

Ella vio como los Cullen ya estaban reunidos, Edward le dio una mirada afilada y vio como Rosalie le daba una leve inclinación de reconocimiento para después darle una mirada afilada a Edward.

Sintió que su corazón se apretó, que el aire se lo quitaron en un abrir y cerrar de ojos. Ella solo quería sentirse apreciada y sentir que no estaba sola... y Edward se lo quitó.

Sintió lágrimas que caían de sus ojos, rápidamente se limpió las lágrimas y fue hacia los baños. No necesitaba que la gente la viera en este estado, al final siempre había estado sola y Polly la tenía.

Se desato el moño que traía y despeinó por completo su pelo, se lavó la cara y para su sorpresa el grifo se despegó haciendo que el agua brotara como una fuente. Sonrió al ver que estaba toda mojada, agradeció que los moretones ya habían desaparecidos, si no iba a ser muy raro que la vean con la piel toda magullada.

Se quitó la sudadera negra que llevaba junto con la camisa de franela, al final solo quedo con una blusa de manga larga de color grisea. Sus pantalones anchos le hacían resaltar más la cadera y la cintura ahora que no tenía más de tres mudas de ropa. Cuando salió del baño sintió que todas las miradas estaban en ella.

Se sintió como un simio en medio de un zoológico. La mejor manera de evitar las miradas era poner sus ojos en una novela. Sacó Ana Karenina y se dispuso a leer.

Fue raro para ella cuando el chico de descendencia asiática la bloqueó y le preguntó:

—Shirley... ¿sabes que las mujeres invitan a los hombres al baile de la primavera?

— ¿quieres que te invite al baile de primavera? —respondió con una pregunta al no entender que quería Eric.

—sí.

—ohh... ¿Cuándo es el baile? —respondió con otra pregunta.

—dentro de dos semanas.

—ohh. ¿Creo que Mike quiere invitarte?

— ¿Qué?

—sí, te está mirando con una mirada muy intensa. Creo que él te va quiere preguntar. —le dio una palmada en el hombro como dándole ánimo.

Shirley dejó al chico con una expresión indescifrable en su rostro ella se adjudicó a que estaba completamente feliz al saber que Mike le pediría ir al baile con él.

¡Ay, qué lindo era ver una pareja que no eran opuestos!

En la hora del almuerzo ella se sentó en su lugar de siempre y se dispuso a seguir leyendo su novela cuando escuchó un silencio absoluto involuntariamente alzó la vista para ver a Isabella Swan hablar con Edward.

"idiota"

Suspiró abatida cuando volteó a ver a Rosalie que también miraba con desprecio a Edward. Sin poder evitarlo Shirley se levantó para ir hacia donde estaba Rosalie.

—Polly dice gracias. Vamos a ir a la Push mas al rato... ¿quieres ir con nosotros? —preguntó sin poner atención alrededor.

—y-yo... —Rosalie vio a la chica más baja y ella le dio un no con la cabeza—. No puedo, mi familia quiere ir Port ángeles a ver una película.

— ¿realmente no puedes ser mi amiga? —preguntó con un poco de pesadez y suplicio.

—lo siento...

Ella solo asintió.

—entiendo... los inhumamos no se pueden llevar con los humanos. Entiendo no soy torpe. —les dio una sonrisa falsa para regresar a su lugar.

Tan desesperadamente estaba por ser aceptada que le abren las puertas para después cerrarlas en su cara. Otra vez las ganas de llorar aparecieron. Pestañeó varias veces para evitar llorar en plena cafetería. Después de ver que ya no iba a llorar se levantó para ir a la siguiente clase.

Cuando se dio cuenta que iba a ser lo del grupo sanguíneo sintió repulsión. Ella odiaba la sangre... por eso a todas sus víctimas no los desangraba. Cuando iba a salir de la habitación se topó con Mike.

—Shirley... ¿quieres ir al baile conmigo?

Ella pestañeó varias veces para después asimilar la pregunta.

—pensé que querías ir con el chico que está siempre a tu lado... ¿Cómo se llama?

— ¿Tyler?

—Tyler es el que quería matarme ¿verdad? —Mike asintió— no, el no. El otro el de descendencia Asiática.

— ¿Erick?

—sí. Yo le dije que le querías invitar... el ya está entusiasmado con la idea.

Shirley vio como Mike se ponía de una cara pálida a una sonrojada.

—y-yo me gustan las mujeres, y-yo no me siento atraído por hombres.

—ohhhh. Creo que me equivoque al ver tus acciones. Bueno... creo que voy a buscar a Eric para decirle que no lo vas invitar.

Shirley vio como Mike asintió y le cedió el paso. No tardo mucho cuando encontró a Eric yendo al salón de Trigonometría.

—Eric... lo siento. Mike me acaba de decir que no le gustas. Disculpa por haber malinterpretado las miradas que te daba.

Shirley fue sincera en disculparse y notó como Eric asentía y se ponía nervioso al igual que un leve sonrojo cubría por toda su cara.

Al final ella fue a su auto y se quedó ahí por toda la hora. Vio como Mike se llevaba a Isabella junto con Tyler. Pareciera que llevaran un saco de papas. Ya que la llevaba arrastrando como si estuviera tomada.

Salió del auto para ver que Isabella no terminara en el suelo. Pero desafortunadamente Edward llegó al rescate y levantó a Isabella para llevarla a la enfermería.

— ¡Shirley! —gritó alguien. Ella volteó a ver hacia atrás y se sorprendió al ver a Tyler sonreírle.

—Hola —musitó.

— ¿Cómo estás? No he podido hablar contigo desde el accidente.

—bien... ¿pasa algo?

—si... ya sabes que se acerca el baile de primavera... ¿quiere ir conmigo?

Ella le dio una sonrisa. Se dice que las cosas empezaban por algo. El accidente el detonante para que Tyler se fijara en ella y si es así... podría tener un romance como en las novelas que le gusta leer. No era Charlie Swan pero no podía rechazar una oferta.

—no es síndrome de Estocolmo. Pero acepto ir al baile contigo. —Shirley le dio la sonrisa más sincera, hoy empezaba los cambios para ella. Ella quería ser libre.

—no, no puede. Ella ya había aceptado mi invitación ——dijo la voz amenazante de Edward.