2

103 9 2
                                        

Dicen que una persona con el alma rota no puede hacerte sentir vivo.
Entonces,¿Por qué al sentirme reflejado en sus ojos color miel, sentí a mí corazón latir con más fuerza que nunca?

_______________________________

No sé realmente por qué me dirigí a aquel chico ayer en la playa, tal vez por que veía en sus ojos un reflejo de los suyos o por qué al fin y al cabo yo también necesitaba hablar con alguien igual de vacío...

En aquel momento, antes de verle, yo sentía que me ahogaba que la tierra se hacía pequeña frente a la terrible noticia que me acaban de dar y que aún no estoy preparado para asumir, no tan pronto. Pero entonces le vi aferrándose a la arena y llorando como si no hubiese nada más que pudiese hacer y sentí la necesidad de acercarme a el, de decirle que yo sabía lo que sentía, que sabía perfectamente como quemaban todas aquellas lágrimas.

Entonces me acerqué y empezamos a hablar, fue la conversación más profunda que jamás había tenido. Ese chico estaba destrozado, no tenía nada, tan solo lágrimas y yo... Yo estaba a punto de perder lo que más quería. Hablamos durante toda la mañana, hablamos del dolor, de quienes eramos, de a donde íbamos, de metas, de películas, de la infancia, hablamos más de lo que había hablado nunca con cualquier desconocido. Sabía muchas cosas de el, menos su nombre.

-¿En que piensas gatito?- pregunta con un leve ronroneo acariciando mi pierna. Alfred y yo no llevamos mucho tiempo saliendo, pero si el suficiente para conocer si algo nos carcomía la cabeza más de lo normal.

-En nada en realidad-me sentía terriblemente mal por mentirle pero no podía contarme nada, no por el hecho de hablar con aquel desconocido sino porque tendría que explicarle el motivo mis lloros y no, aún no podía pronunciar esas palabras así que aunque me sintiera el peor novio del mundo yo solo me limité a darle un beso en la frente. Pero el sabía que mentía, no era tan tonto ni yo era tan buen actor para disimular toda la rabia que acumulaba dentro

Y se levantó del sofá, molesto tal vez, ni si quiera sin mirarme. Nunca tenía en cuenta sus sentimientos, me sentía un idiota, siempre me he centrado en mi y en mis problemas y no he podido ver hasta ahora como esto, mis sentimientos ahora afectan a otra persona.

-Perdoname Alfred...- le agarré del brazo y le acaricié la cara y cada uno de sus lunares pidiendo a gritos que me perdone.

-Joder agoney lo siento, no quería ponerme borde, pero me importas y nunca de dices nada, no me cuentas nada

-Alfred, bonito, no te lo puedo decir ahora ¿vale? no estoy preparado, yo... no puedo ... Lo siento

-No te preocupes gatito, yo esperaré lo que haga falta- y sonrió,  sonreí, y le besé.Le besé con la mayor delicadeza que pude por miedo de hacerle daño y de alejarle más de lo que ya lo estoy haciendo-Pero porfavor, prométeme que no es por qué quieres a otro. Por qué porfavor si es así dímelo ya antes de que me enamoré más de ti-

-Alfred ya estás enamorado hasta las trancas de mí.

-Sabía que tenía que haberme fijado en la chica en vez de en el tío bueno con mirada intensa aquel dia- sonrío juguetón y después depositó un leve beso en la frente.

Y aunque todavia no estaba enamorado de él, sabía que le quería y que daría todo lo que fuese para verle feliz.

------------

Me fui a pasear por la playa para despejar mi mente durante un rato, a ver si con suerte podía sacarme todo este lío de mi cabeza

- Every Breathe you take, every move you make- comenzó a cantar una suave y delicada voz.

Mis ojos y trataron de buscar esa voz, pero no sabía de donde venía pero necesitaba conseguirlo, es de esas voces que nunca te cansas de escuchar y yo quería más, quería escucharla hasta el fin de los tiempos.

Y al fin, encontré a los ojos color miel que ayer lloraban mientras que hoy brillaban al ritmo de la canción.

-Every bond you make

-Every step you take- seguí la canción y por primera vez vi su sonrisa, y que sonrisa.

-I'll watching you-

-Cantas tan... WoW no tengo palabras- vale bien agoney, que manera de entablar conversación.

-Anda mira, si es el chico misterioso y profundo de ayer- le respondí con un codazo y soltamos una carcajada a dúo

-Anda mira, si tiene sentido del humor

-soy mucho más de lo que crees

-Que misterioso- respondí con cierto tono de burla y de nuevo ahí estaba, su carcajada y su bendita sonrisa.

-Bueno señor,"voy a entablar conversación con desconocidos"-hizo comillas con los dedos-¿Cómo cojones te llamas?, Llevo dándole vueltas desde ayer

Sonreí sin pensar. A pensado en mí

-Se que soy guapo, pero no sabía que lo fuera tanto como para tener ocupada tu mente 24 horas- sus mejillas se tornaron tan rojas que me resultó adorable, parecía un tierno reno de Navidad

-Mas te gustaría, barbitas- definitivamente, me encanta picar a este chico, es una ricura

-Oh claro que lo se, rubito-

-Raoul, me llamo raoul- extendió su mano y las entrelazamos en un agradable apretón- Pero con o eh, no te confundas

-Agoney, pero como me llames agonias te parto las piernas.

-Encantado, Agonías.

- Igualmente Raúl.

Al fin sabía el nombre que escondía aquel chico de voz suave, ojos miel y pelo color arena.
Raoul 

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Oct 27, 2019 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Omnipresente-RagoneyWhere stories live. Discover now