segunda parte

10.5K 1.1K 231
                                    

taehyung estaba hablando con jimin por teléfono, quien ya se estaba quedando dormido.

—y... ¿¡y si me visto de luciérnaga y me aparezco en su ventana!?

exclamó taehyung quien ya estaba teniendo una lluvia de ideas. tal vez se podría imaginar un pequeño foco encendiéndose en su cabeza.

–¿qué dices? ni aunque fuera halloween te dejaría hacer esa estupidez...— dijo jimin frustrado tratando de conseguir sueño.

—¿qué me dices de una serenata?

—puede ser... tal vez no esté tan mal. pero intenta pensar en algo más original.

—no es que me estés ayudando mucho.

—¿en serio quieres vestirte de insecto kim? mejor duérmete...

—está bien, mejor cuelga antes de que te vuelvas un viejo gruñón, descansa pequeño.

—¡no me digas pequeño! y duerme ya.

colgó la llamada con su mejor amigo, y vio la conversación que tenía con jungkook. el último mensaje era el menor lloriqueando que tenía que trabajar tarde.

trabajaré esta noche ㅠㅠㅠㅠ ¿y si mejor me mantienes?

ㅋㅋㅋ lo pensaré

suponía que él ya debía de estar en casa o durmiendo, pero su pantalla se iluminó con el nombre del contacto nochu y respondió a la llamada.

—hey... ya es tarde ¿no puedes dormir de nuevo pequeño?

—lo...— tenía respiración entrecortada como si hubiera corrido kilómetros— lo qué pasa es que, olvidé mis llaves y no tengo donde... dormir.

—oh y entonces-

—estoy fuera de tu casa.

...

jungkook estaba exhausto, tan pronto como entró tiró a dormirse en la cama del mayor quien lo miró con ternura. estaba acostado con el pelo alrededor de su cara. sus labios estaban rosados y jungkook se hacía pequeño abrazando una almohada, taehyung quedó del lado derecho, viéndose frente a frente.

y entre murmullos jungkook pidió que le cantara (porque quería soñar con su voz).

cantó para él de nuevo, pero viéndolo a los ojos, sintiendo su respiración cerca de la suya. como pestañeaba entrando en un sueño con la melodía. hacía frío así que había contacto. sus narices rozaban, y con timidez se acercaban más.

las manos de taehyung buscaron a las del pequeño y las tomó. se sentían tan calidas que las apretó más e hizo que el menor se sonrojara.

cantaba y sus ojos derrochaban miel, al ver a jungkook que era tan etéreo tan cerca de él, podía ver sus pequeñas facciones, sus labios que se abrían levemente y sus ojos entrecerrados, a veces se formaba una sonrisa en su rostro. hacía que taehyung sintiera calidez y demasiado pequeño como para ver algo tan bello.

poco a poco bajaba la voz y se volvían susurros hasta que terminó la última estrofa.

y con esperanzas de que no lo oyera dijo:

—nochu.— dijo aún tomando sus manos acercándolas más a si.

—hmm

—¿haz encontrado alguna vez una luciérnaga en tu ventana?— susurró por último sentía que el corazón se le caería.

—tal vez yo... quería mandar una.— respondió juntando su frente con el mayor, inconsciente de lo que decía.

—¿a quién?

—a ti, hyung.— respondió mirándole a los ojos, podía divisarlos a pesar de la escasa luz, taehyung vivía en un departamento de la ciudad: las luces de la calle aún podían iluminar su cara y ver su tez serena y hermosa.

hubo un pequeño silencio donde ninguno de los dos pudo distinguir si era real o un dulce, dulce sueño. al parpadear estaban juzgando si realmente estaban despiertos, y a través de las luces de la ciudad el pequeño vió como taehyung se sonrojó.

—y-yo también... quería enviarte una luciérnaga.—por fin respondió y jungkook se dió cuenta que no era un sueño.

porque vaya, le gustaba tanto, que lo extrañaba aunque se vieran seguido y su voz era de sus cosas más preciadas, lo hacía sentir seguro, lo hacía sentir en casa.

y de sus labios salían las palabras más dulces, palabras que nunca nadie le había dicho; que lo hacían sentir protegido, que le hacían sentir especial, quería probar si estas sabían a miel tal como se imaginaba.

entonces con timidez acercándose temeroso, cortó los pocos centímetros que los separaban y juntó sus labios con los de taehyung, cerrando los ojos y después separándose lentamente sin apartar la mirada, no quería perderla de vista por ningún motivo, quería que ese momento fuese suyo, y sólo suyo.
taehyung que aún sostenía sus manos, las posó en su pecho para luego abrazar a jungkook, volviendo a unir sus labios ahora en un beso más largo y dulce. el menor podía sentir con sus manos sus latidos que palpitaban con fuerza. no podía ser más feliz, no había forma.

era como si las miles de luces de la ciudad fueran pequeñas luciérnagas que se enviaban, y ninguno podía saber si todas ellas podían abarcar lo que sentían por el otro, podrían iluminarlos durante cientos de noches.

durmieron abrazados, con la cabeza de taehyung sobre la de jungkook quien tenía sonrisa en el rostro, que podían iluminar la noche, y el corazón de taehyung





Fin.

...


Muchas gracias, en serio muchas gracias a todos los que leyeron esto. Sigo sin creerme que a gente realmente le gustó, sus comentarios me hacían el día.

créanme que intente escribir esto dos veces con otras ideas diferentes, ¡pero creo que esta es la más linda de todas!

muy probablemente la edite y vaya mejorando pero esto lo escribí en la madrugada para no perder la costumbre.

espero que algún día conozcan alguien que les pueda cantar canciones hermosas y les manden luciérnagas que iluminen sus noches.

¡nos vemos en otra historia!

nath

through the night、taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora