Fool Buddy

Disaster

Toda mierda tiene un inicio, y la mía resulta ser tan cliché que no comprendo ¿cómo demonios caí en el juego más antiguo del colegio? Esa manía que tienen los perdedores de enamorarse de sus mejores amigos, los típicos populares. Creo que las películas como Carrie no son lo suficientemente claras, NUNCA, debes poner tus ojos en alguien que nunca te corresponderá, NUNCA debes enamorarte de quien no te sabe apreciar, porque solo encontrarás humillación, yo lo sé, experiencia propia de la peor manera, pero supongo que a los seres humanos, nos gusta sufrir, en fin, demos inicio a la mierda, ¡Disfruten!.

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— Los Angeles - 2019 —

No entiendo nada de este día, quisiera estar en casa recostada en el sofá, viendo algún Tv Show divertido, o leyendo el más reciente libro que compré, la autora es buena y supo manejar la historia en solo 14 capítulos, sin necesidad de tanto drama o triangulos amororos estúpidos, sí, eso debía estar haciendo, se suponen que son mis días de descanso, donde todos dormimos hasta las tres de la tarde y solo nos levantamos de la cama para comer o ir al baño, pero al aprecer a mi padre y hermanastra, eso no les importa, me han traído a este lugar, y de no ser porque la terapeuta es demasiado sexy, ya habría saltado por la ventana.

-Ya que has terminado de inspeccionar mi consultorio, podemos iniciar Kara, así que te pido amablemente tomar asiento — cruza las piernas, mi mirada se pierde en esa nívea suavidad que me gustaría probar sin duda alguna, al encontrarme con sus hermosos ojos verdes, ella tiene una ceja arqueada y sonríe — ¿Entonces?-

-Esto le parecerá cliché doctora pero, yo no necesito terapia — meto las manos en los bolsillos de mis jeans y le sonrío ladina, ella ríe y asiente — Lo ha escuchado cada día ¿cierto?-

-En efecto, no eres la primera que dice esas palabras y no serás la última, pero no crees que será mejor hablar y acabar con todo más rápido, así podrás seguir componiendo esas maravillosas canciones-

-¿Ha escuchado mis canciones? — frunzo el ceño divertida, sentándome en el sofá marrón.

-Por supuesto, me encanta Green Sky y Metaphor tienes un inigualable talento — halaga y mi ego crece pues ella es una mujer de buen gusto, solo basta con ver la decoración.

-De no ser mi terapeuta, haría lo posible por cortejarla, Doctora Lauren — ladeo la cabeza moviendo las cejas con picardía y ella ríe.

-Va contra mi juramento salir con mis pacientes — suspira — Y ahora que sientes un poco de confianza, háblame sobre tu pasado en la escuela-

-¡Buen intento!— le apunto con ambas manos riendo — Me niego hablar, esto es una basura doctora, es psiquiatría sin esfuerzo — me pongo de pie caminando hacia la ventana.

-Ya que es psiquiatría sin esfuerzo, no debe importarte hablar sobre ello — la escucho y siento ganas de arrojarle la lámpara al hombre que va caminando por la acera, ¿mi puntería habrá mejorado? — Esa es la base de tu comportamiento y actitud violenta-

-Ese reportero se merecía el golpe que le di — giro para mostrarle mi amplia sonrisa — Y yo soy una persona con poca paciencia, así que no le sorprenda sí en cualquier momento decido arrojar el sofá por la ventana-

-Eso explica tu pasión por el hockey — comienza a escribir como sí no creyera mis palabras — Tengo entendido que tu equipo ha sido campeón en algunas ocasiones-

-Tricampeones Doctora — levanto tres dedos — Y bajo mi mando seguiremos ganando, puedo asegurarle eso-

-Tu innegable deseo por ganar en cada cosa que haces, es signo de inseguridad en la adolescencia, así que en aquel entonces no eras ni la sombra de lo que eres hoy, ¿cierto?-