Capítulo 10

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Nueve Años después.

Nueve años habían pasado pero solo vasta con resumir que las cosas han cambiado radicalmente.

Tantas cosas que han pasado, tanto buenas como malas. Tantas cosas que han cambiado, las personas lo hicieron, algunas para bien, otras para mal... Pero lo han hecho. El cambio es algo a lo que estamos constantemente expuestos, era inevitable. Así es la ley de la vida. Nada se queda como inicialmente fue.

La familia inesperadamente creció y la manada también.

Por un lado Dulce y Anthony decidieron tener más hijos y hoy en día tienen tres hermosos niños; Dos niñas y un barón. Anaya, Cedy y Candy son sus nombres pero esta última apenas y tiene unos meses de nacida.

Zed y Connor luego de una lucha interna, de trámites y papeleos, habían cumplido su deseo de ser padres. Hace 4 años atrás decidieron adoptar a un niño pero no sabían que saldrían por "paquete doble" y los hizo muy felices. Así fue como llegaron a la familia un par de revoltosos gemelos llamados Maximiliano y Westley Hobbs los cuales ahora tienen Dieciséis Años y en pocos días obtendrán su primera transformación.

Este hecho tiene a los chicos constantemente nerviosos y a su padre Connor triste porque tiene la absurda idea que al tener ellos su transformación encontrarán a sus mates y lo alejarán de sus "bebés" tal y como paso con él.

Mis padres por su lado decidieron ir a conocer el mundo, ampliar sus horizontes, conocer nuevas culturas, gente humana y bestias.

Así que un buen día simplemente empacaron sus pertenencias, se despidieron y se marcharon.

Y con respecto a mi, los años ya me empezaban a pasar factura, cada día que pasaba sentía que me ponía más viejo y eso no me favorecía en nada. Mi relación con Willow se había estancado tanto que habíamos caído en los roles de "padre e hija" los pequeños besos que compartíamos a escondidas de mi madre se habían detenido, ya no compartíamos mucho tiempo juntos ¡Ya ni siquiera compartíamos cama por las noches!

Nuestra relación de mates esta estancada y eso me desesperaba. A veces quería decirle lo que éramos en realidad y poder iniciar una relación de pareja pero por otro lado no quería forzarla, quería que si ella me llegara a querer sea espontáneamente.

Me ponía ansioso el pensar que ella podría llegar a enamorarse de otra bestia puesto que me ve como un padre.

Mientras a mi los años se me empiezan a notar.... Ella con cada día que pasaba se volvía más y más hermosa ¿Cómo no? Si estaba en plena flor de la juventud.

A sus catorce años ya tiene el cuerpo de una mujer de Veinte, muy bien proporcionado: con anchas caderas, piernas torneadas, cintura pequeña y busto a la medida. Era a lo que llamaban coloquial mente como "Noventa, Sesenta, Noventa" y era casi imposible apartar la mirada de ella y si para mi no pasaba desapercibido el cambio tan drástico que sufrió su cuerpo en los últimos años para los cachorros hormonales de la manada tampoco. Y de solo pensar en lo que me provocaba con un cuerpo de cinco años era nada, comparado con eso.

Y no puedo evitar sentirme furioso cuando la miran de una manera lujuriosa y pervertida pero lo que más me enojaba es cuando vienen a la casa con sus caras llenas de confianza a pedirme permiso para que los deje tener una relación con mi "Sollum"

Mi Pequeña LunaWhere stories live. Discover now