Because it's Your: JAEMIN 재민

chapter twelve • 장 열두

-Harían una linda pareja- BoJin tenía esas insistentes ganas de empujar a YuhKei para que algo surgiera entre él y KiSung.

-Propongo que tomemos asiento- sugirió JaeMin.

El trío asintió y todos se dirigieron hacía una pequeña mesa de parque con cuatro asiento.

-Hace algo se calor, ¿Quieren algo de beber? Yo invito- ofreció KiSung, podría ese pretexto para salir de ese horrible ambiente.

-No te permitiré pagar nada- se quejó YuhKei.

-Descuida Wong, yo pagaré- respondió JaeMin.

-No, yo lo hago, además iré yo por las bebidas- respondió sin mirar a JaeMin.

-No podrás cargar cuatro latas, te acompaño- se ofreció YuhKei.

-Te demostraré que si puedo- le guiñó un ojo.

KiSung se levantó, dispuesta a irse ya, claro que regresaría, pero tardaría en hacerlo.

Estaba ya considerablemente alejada de ellos, hasta que oía cada vez más cerca una respiración agitada.

-YuhKei, te dije que no era necesario-se giró.

-No soy Wong, soy JaeMin- dijo con dificultad.

-Vete- y siguió su camino con más aprisa.

-Espera, tu y yo debemos hablar- la detuvo y tiró de su brazo atrayéndola a él.

-¿Qué quieres? ¿Ahora sí me conoces?- dijo ofendida.

-¿Tu y Wong son novios?- alzó una ceja.

-Eso no es de tu incumbencia- trató de quitar su mano pero no pudo, al contrario, el agarre se hizo más fuerte.

-¿Entonces porqué tan acaramelados? ¿Te gusta?- continuaba cuestionando desesperadamente.

-Ya te dije que no es asunto tuyo- logró quitar su mano.

Pero no estaba dispuesto a irse, ahora no, ésta era su oportunidad para sacar todo el coraje.

-¡Responde con coherencia!- se exaltó.

-No me grites, y ya te dije que no te importa, no tienes que forzarme a decirte algo que yo no quiero- el coraje estaba llegado a su cuerpo.

-¿Te gusta? ¿Tan rápido te has enamorado de él?- seguía insistente.

-A ver, entonces, ¿Tú y BoJin son novios? Respóndeme- le volteó el juego.

-Yo no tengo porqué responderte eso, además ni es el caso aquí- se molestó ante tal pregunta.

-¡Ay! Discúlpame, ya no preguntaré nada sobre tu extraña relación de BoJin y su querido Nana- se cruzó de brazos molesta.

-No debes meterte en mis asuntos, ¿Y tú? ¿Tanto te gusta ese tal Xuxi?- hablaba incrédulo.

-¿Sabes qué? Piérdete, arruinaste mi día definitivamente- se fue de allí molesta.

JaeMin ya no la detuvo, seguía enojado, y tal ira le impidió detenerla.

Ambos habían mostrado un lado de su mismos, que no lo habían mostrado nunca, sólo que ninguno se dio cuenta, los celos habían aparecido, habían pasado desapercibidos.

El cielo tenía todo el día nublado y parece que la vida odia a KiSung, pues a unas cuadras antes de llegar a su casa, la lluvia cayó muy pesada, allí no aguantó y soltó gritos de enojo mientras sus lágrimas se resbalaban agresivamente por sus mejillas, se sentía llena de rabia, quería gritarle más cosas, quería golpearlo, sentía mucho odio pero no tanto por JaeMin o incluso BoJin, sino hacía ella, quién al tratar de amar a YuhKei, no pudo por seguir amando a ese idiota llamado, Na JaeMin.

-De nuevo llorando- habló YuhKei detrás de ella.

Cómo pudo, la cargó en su espalda, hasta que llegaron a sus casas, YuhKei le daba indicaciones mientras que KiSung sólo asentía, seguía hundida en la tristeza sobre lo pasaba con JaeMin, seguía llorando.

-Entra a tu casa, quiero que en cuanto entres te dirijas a tu balcón y estés allí, quiero hablar contigo- ella solo asintió y entró a su casa.

Parecía zombie, no era consciente, todo lo que le había ordenado YuhKei, lo realizo como si de un robot se tratase.

Abrió la ventana, se desplomó en el reducido espacio del balcón, YuhKei estaba frente a ella, en su balcón, a duras penas logró tomar una mano de la chica, acarició el dorso de ésta y agradecía enteramente tenerla un poco lejos para no abrazarla y quedar más enamorado de ella, aparte del corazón dolido de KiSung, también estaba el de YuhKei.

-Ahora sí, cuéntame todo- suspiró, pues estaba a punto de oír de la boca de la chica que le gusta, todo lo que él ya suponía.

-YuhKei... Quisiera odiarlo, pero simplemente no puedo- habló con dificultad debido a sus derrames nasales constantes.

-Lo amo muchísimo, desde que tengo uso de razón estoy enamorada de él, nunca me ha visto cómo tal así que nunca hemos sido nada, aveces quisiera que mi vida fuera de esas clichés, que de pequeños prometen contraer matrimonio y de adultos lo logran, nosotros nunca hicimos eso, al contrario... Dijimos que nunca nos casariamos- continuó mientras seguía llorando.

-Odio tanto amarlo de ésta manera, no me lo puedo sacar, estaba muy clavado en mis pensamientos, en mi corazón... No puedo más- y con esa frase terminó para continuar llorando.

El balcón de la reciente habitación de KiSung, se encontraba cerca de la parte frontal de su casa, desde allí, se podía escuchar bien lo que ellos dos mejor chico, toda la confesión de KiSung se podía oír desde allí, y otro testigo de tal confesión fue JaeMin, quien se escondía, escuchando casi toda la conversación, le dolía saber qué KiSung lloraba de esa forma, se había enterado que KiSung estaba enamorada, el problema es que nunca-o al menos eso cree- dijo que de quién, JaeMin pensó en alguien.

Hendery, estás muerto.

Pensó con enojo.

[ CONTINUARÁ ]