Denver

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Minutos después torres estaba golpeando la puerta

-pase Sr Torres -dije abriendo la puerta-

-a ver, podríamos aumentar el ritmo de impresión? -pregunto Nairobi-

-a ver, poder, podríamos, pero correríamos un gran riesgo -dijo Torres- si se nos atasca, tardaríamos entre tres y cuatro horas en liberar la máquina

Nairobi nos miró y nosotros asentimos

-calculeme en cuanto aumentariamos la producción -dijo Nairobi-

-de acuerdo, Srta Nairobi -dijo y se fue-

-vamos a ver... -dijo Nairobi-

Luego de unos minutos torres volvió con una hoja

-dime -dijo Nairobi abriendo la puerta antes de que golpee-

-aumentariamos la productividad en dos millones cada hora -dijo-

-hazlo, y es más, las paradas técnicas las vas a hacer cada seis horas, porque  esos son otros dos millones extra -dijo Nairobi-

-muy bien -dijo-

El se fue y Nairobi nos miró

-esto lo levanto como que me llamo Nairobi -dijo-

-a-a-a-a -rió Denver-

Cuatro meses antes del atraco:

Entre al comedor y me senté junto a Río, traía dos cervezas, una para mí y otra para Tokio, se la di y bebí un trago de la mía
El profesor hablaba de algo pero había llegado tarde para saber de qué se trataba

-pues imaginad un partido de fútbol -dijo el profesor-

-otra vez con el fútbol? -pregunte-

-no no, pero Verona, escúchame, pero un partido de fútbol del mundial y están jugando Brasil contra Camerún -dijo- quien gana?

-hombre.. jaja -dijo Moscú riendo-

-para, para, mejor dicho, quien queréis que gane? -dijo-

-ganar, gana Brasil, pero yo iría con Camerún, seguro -dijo Moscú-

-Camerún -dije con la boca llena de comida-

-Camerún -dijo el profesor señalandome-

-Si, Camerún -añadio Moscú-

-Camerún, Camerún -dije-

-Camerún a muerte -dijo Denver-

-si os fijáis, instintivamente el ser humano siempre siempre, se pone de parte de los más débiles, de los perdedores, hum? -dijo El profesor- así que si nosotros mostramos al mundo nuestras debilidades, nuestras heridas, que estamos al borde de la rendición, produciremos un... Estremecimiento

-si no eres brasileño, creo que cualquier tío del mundo iría con Camerún -dijo Moscú-

-incluso algún brasileño que otro -dijo el profesor-