LA MOMIA

CAPITULO 3

- adiós Mike – Kara regresó a su labor con la mochila en la mesa, pero se percató de pisadas húmedas, frunciendo el ceño se acercó de nuevo a la borda para confirmar sus sospechas

En la habitación de Lena, la joven estaba en pijama, leyendo uno de sus libros mientras daba vueltas por el lugar

- George Bembridge... en el 1860... - agarró sus prendas de vestir para colgarlas, de manera distraída las dejó caer al suelo – en 1865 con... ¡por Dios, ese beso no fue nada del otro mundo! – se quejó, dio un golpe a la ventana y caminó hasta situarse frente al espejo, donde agarró el cepillo para peinar su cabello, el libro cayó al suelo, y ella se inclinó para levantarlo, una vez incorporada, su reflejo en el espejo le indicó que había alguien más, el hombre la tomó del cuello arrinconándola contra la pared, puso un garfio en su mejilla para amenazarla

- ¿Dónde está el mapa? – pregunta el hombre con voz rasposa

- ahí – Lena mira hacia la mesa, el hombre sigue el rango de visión, constatando que ahí está el papel

- ¿y la llave?

¿Dónde está la llave? –

- ¿la llave? ¿Qué llave? – pregunta Lena muy nerviosa

- ¡LENA! – se escucha el grito antes de que la puerta del cuarto sea derivada, Kara entra con un arma en cada mano, el hombre, al ver la intromisión usa a la azabache como escudo humano, la rubia se da cuenta de que hay corriente de aire, apunta su arma hacia la ventana, la cual se abre para mostrar a otro encapuchado, la mujer dispara, matándolo en el acto, una de las balas da en el candelabro, el cual se cae e incendia el sofá, Lena, aprovechando la distracción, toma una de las velas y la dirige al rostro de su captor, quemando uno de sus ojos, el hombre la suelta y ella corre para resguardarse con Kara, otro hombre se acerca a la ventana para disparar, la azabache se posiciona tras Kara, quien dispara pasa salir de la habitación, Lena corrió por delante, pero al percatarse que algo faltaba decidió volver

- ¡el mapa! ¡el mapa! – Kara la detuvo por el brazo

- no se preocupe, yo soy el mapa –

- ¡que consuelo! – ambas siguieron su trayecto para salir

En la habitación de Lena, el hombre se quejaba por la lesión en su ojo, tumbando la mesa la llave cayó al suelo, él se inclinó para levantarla, pero un distraído Lex lo empujó por accidente, haciendo que el hombre cayera directo en el sofá abrasado por las llamas, Lex adoptó una patética pose de pelea, haciendo gesto de asco al ver al tipo ser consumido por las llamas, su vista fue a dar al suelo, donde la llave estaba, se inclinó rápidamente para levantarla, pero un garfio se lo impidió, dio un zarpazo que Lex logró esquivar, huyo del cuarto siendo perseguido por el hombre en llamas.

En cubierta, los mumias incendiaban todo a su paso, los pasajeros saltaban al agua para salvar sus vidas, Lena y Kara corrían

- aguante esto – Kara le dio su preciada mochila, Lena la tomó con esfuerzo, la rubia miraba su arma, dándose cuenta que se había quedado sin balas, metió la mano en su bolsillo para sacar municiones, distrayéndose los disparos empezaron a llegar, de último momento Lena la movió para que no impactara en su cuerpo ninguno de los proyectiles, Kara volvió a la realidad, y disparando para abrirse paso llegó a cubierta junto a Lena

- ¿sabe nadar? – pregunto a voz en grito

- solo si fuera necesario – responde la azabache

- créame, es necesario – Kara levanta a Lena para tirarla por la borda, cuando la rubia se disponía a saltar es envestida por uno de los mumias, quien empieza a golpearla, acorralándola, pero es la rubia quien pronto revierte la situación, devolviéndolos golpes y empujándolo hacia uno de los cuartos, donde el hombre es recibido por una llamarada, Kara vuelve a colocarse su mochila

- ¡DANVERS! ¿Qué vamos a hacer? – llega James preocupado

- ¡no se mueva! ¡traeré ayuda – recomienda la rubia y el hombre asiente, Kara salta por la borda cayendo al rio

- bueno - James mira hacia todos lados, viendo que todos están saltando, demora un poco en registrar las palabras de la rubia y la situación en la que está, y echando una maldición se lanza del barco

Lex corría despavorido, había logrado quitarle la llave al hombre, vio a los americanos disparando, negó con la cabeza

- tontos americanos – el hombre que lo perseguía llegó a su encuentro, y Lex arrinconado no hallaba que hacer, unas detonaciones se escucharon y el hombre en llamas cayó al rio - ¿Qué si he tenido pánico? ¡yo diría que no! – reflexionó con la llave en su mano, una explosión resonó en el sitio y Lex saltó asustado para caer al agua, loa americanos también saltaron y nadaron rumbo a la orilla

Kara, Lena, Lex y James estaban del lado opuesto que sus contrincantes

- ¡lo hemos perdido todo! – se quejaba la azabache – las herramientas, el equipo ¡toda mi ropa – Kara lanzó el maletín a la arena

- ¡DANVERS! ¡HEY, DANVERS! – Kara voltea al escuchar la voz, su arma estaba completamente húmeda - ¡POR LO VISTO TENGO TODOS LOS CABALLOS! – se mofa Mike

- ¡MIKE! ¡A MI ME PARECE QUE ESTÁN DEL LADO EQUIVOCADO DEL RIÓ! – Kara sonríe

- ¡rayos! - Mike, incrédulo mira a su alrededor, dándose cuenta de que su "amiga" tenía razón – otra vez tiene razón ¡maldita sea! – chapotea en el agua