🎀We will be fine

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╚»★«╝

🌹Segundo capítulo de esta historia, espero que les guste.

Ya era casi de mañana cuando las chicas se quedaron dormidas en casa de Seulgi. Habían pasado un buen rato platicando de todo los detalles de la noche anterior.

-Oigan, no tenemos que confiar en esos chicos -decía Yeri mientras se quitaba el maquillaje. -Les pagan por atraer a chicas a ese lugar.

Les contó lo que Sehun le había dicho.

Wendy pareció decepcionada.

-Chen parecía un buen tipo...

-Lo siento unnie -Joy le rodeó los hombros. -Pero son unos canallas, en especial el tal Chanyeol que tiene una novia psicópata.

Al recordar cada detalle, escondió su rostro entre las manos.

-No puedo creer que hasta lo besé, no sé en qué estaba pensando, Dios que vergüenza.

-Tranquila, no pasa nada -esta vez fue Wendy quien la abrazó. -¿Saben lo bueno de haber ido a ese lugar y no a otro?

Todas las miraron con curiosidad.

-Nadie nos conoce, pudimos haber hecho puras idioteces, pero no las hicimos, eso fue bueno.

-Buen punto -recalcó Seulgi. -Aparte de Rosé y las chicas, no había ningún otro conocido.

-Así que todo lo que pasó allí, se quedará en ese lugar -comentó Irene con tranquilidad.

-Por cierto... -Yeri necesitaba saber algo importante. -Unnie, ¿qué pasó entre ti y el chico guapo castaño?

-Oh sí, yo también quiero saber -dijo Joy.

-Se los dejo a su imaginación -dijo cerrando los ojos y fingiendo que se había dormido.

-No nos puedes dejar así -Wendy le movió el hombro pero su amiga fingió que ya estaba roncando. -Queremos saber porque no llevaba nada debajo de la chaqueta.

-Habrá sido la calor, no sé -murmuró con los ojos cerrados.

Siguieron insistiendo pero Irene no quiso contar más, sin embargo tenían una idea de lo ocurrido.

-¿Y ustedes piensan que lo tenían todo planeado? -preguntó poco después Wendy cuando apagaron las luces y cada una estaba en sus colchonetas. -Digo, eso de acercarse a nosotras.

-No sé, quizás nos vieron entrar juntas-comentó Seulgi. -Almeno Lay fue muy amable, me defendió de los chicos molestos que vimos en el entrada.

-¿Hablas del chico chino? -preguntó Wendy. -Es muy lindo.

-Ah ¿era chino? -distraída cómo era Seulgi no tenía idea de que fuera extranjero.

Siguieron platicando otro rato hasta que el cansancio pudo más y cayeron en el dulce mundo de los sueños.

El día siguiente era domingo, un día muy sereno y tranquilo... Sino fuera por un celular que empezó a sonar.

-Apaguenlo -murmuró Yeri tapándose la cabeza con la almohada.

⋆✴𝑵𝒂𝒖𝒕𝒉𝒚✴⋆ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora