Blind Lie: fantasmas del pasado ━━ b.b | TERMINADA

O1O | a strong friendship

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「 una fuerte amistad」

—D, ES SOLO UNA NIÑA — LE HABLÓ FINN

— Y eso le da el derecho de matar gente — Ironizó, luego miró a la niña — ¿Que diablos te pasa por la cabeza?

— Basta D — Le habló sutilmente Bellamy haciendo que la chica bufara enojada, Bellamy y Finn debían admitir que la chica daba miedo en ese Estado. Miró a la rubia — Ahora te quedas callada.

— Son tus chicos los de allá afuera, controlalos — la defendió

— ¿Me culpas a mi? Si ella no hubiese abierto la boca, como se lo dije, esos idiotas seguirian construyendo el muro — Se defendió

— Tu tampoco eres muy inocente aquí, Bellamy, ambos son unos idiotas — lo señaló junto a la rubia. — Entiendan que no pueden justificarla por el hecho que sea una niña, estuvo bastante grandecita para quitar una vida, casi dos por quedarse callada, ahora que tenga los suficientes ovarios para afrontar las consecuencias. — Sin más que decir, salió de ahí hecha una furia.

John la miró esperando una respuesta.

—No creo que vayan a entregarla. No quiero saber nada de esto. Te veo luego John — Besó la mejilla del chico y se dirigió a su carpa a buscar su férula, la muñeca le dolía muchísimo gracias al alboroto.

Se mordió el labio inferior cuando se colocó esta, pero se sintió mejor una vez colocada.

No podían ni siquiera estar a salvo dentro del campamento. ¿Como iban a estar a salvo contra los terrestres?

Dentro de ella, esperaba que mañana ya todo estuviese resuelto y John no hiciera ninguna idiotez.

Se acostó en la improvisada cama y cerró los ojos, donde los recuerdos con su amigo la invadieron.

—¿Que hiciste para que te encerraran? — Ambos habían conseguido escaparse de la clase de habilidades terrestres con Pike, por lo que tenían dos horas antes de volver a sus celdas.

Estaban escondidos en la habitación donde se encontraba la máquina que producía agua para el Arca, miraban por la ventana lo único que podían apreciar, el espacio.

—Robé unas cuantas medicinas, lo hice a diario pero me descuide — Hizo una mueca — Es una idiotez que nos encierren por cosas tan mínimas.

—Lo sé — Asintió — ¿Eran para ti o...?

—No, eran para mi padre, esta enfermo, o quizá, estaba. — Ambos quedaron en silencio unos segundos — Pero ya no importa ¿Tu que hiciste?

La pelirroja dejó de mirar el espacio para verlo a él, dudo unos segundos.

— Molí a alguien a golpes — Se encogió de hombros, John sonrió divertido.

—¿Por qué no me sorprende? ¿Quien fué el desafortunado? —

— mi ex-novio— Ahora fué ella quien hizo la mueca e intentó cambiar de tema. — ¿Has tenido novia alguna vez? ¿O eres homosexual?

Murphy enarcó una ceja y soltó una risa.

—¿Tengo cara de marica? — Al segundo de decir eso, recibió un golpe en el brazo por su amiga. — Auch ¿Y eso por qué?

—Respeta los gustos idiota — John rodó los ojos y levantó sus manos en señal de paz.

—Respondiendo a tu pregunta, no, no me ha interesado nadie, al menos, no hasta hace un mes — Se acercó a ella, quien cruzó sus brazos, sonriendo de lado, divertida.

— Tendrás que esforzarte más, Murphy — este sonrió y tomando por sorpresa a la chica, la besó.

Ella pensando que no perdía nada, correspondió, pasando sus brazos por el cuello del contrario y su cintura era rodeada por los de él.

Ese no había sido el último, ni cerca de serlo, de vez en cuando necesitaban de ese roce, después de todo, eran adolescentes con hormonas.

Derieri no podía evitar pensar, que si en ese momento a ella no le hubiese gustado Bellamy, John y ella hubiesen sido algo más.

Pero estaba feliz con la amistad que tenían, John Murphy se había ganado su cariño.

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