Cuándo, Dónde y Cómo el Amor Quiera

¿Alguien quiere preguntar algo?

Estudio de Jennie – Miércoles en la tarde.

- JISOO ¿PUEDES DEJAR DE ACOSAR A LAS MODELOS? – Jennie se había cansado de ver como Jisoo babea, la agarró del brazo y la separó de la chica con la que estaba hablando – Juro que vas a dejar de ser mi abogada, me haces pasar vergüenza – amenazó Jen.

- Quieres dejar de hacer berrinches morena hueca, enfría tu trasero quieres. Se que trabajar con estas modelos te sube la temperatura y encima no tienes al bomboncito para refregarte contra las puertas pero cálmate que el plato principal todavía no llega, y hablando de ella, ¿a que hora piensas que llegue la señorita Hadid? Esta vez no se me escapa. Que me firma el pecho me lo firma – La abogada estaba decidida a que Bella Hadid cumpliera con lo que Jisoo le había prometido a su prometida.

- Jisoo esa mujer es un dolor de cabeza, es una Diva. Llega a la hora que quiere y hay que hacer las cosas cuando ella quiere. Es la peor modelo con la que me ha tocado trabajar. Espera a que se entere que le cambie el vestuario – suspiro Jennie – De todas maneras, no se porque te torturas con estas cosas - justo pasaba una modelo en bikini negro por delante de ellas y ambas admiraron el paisaje – si tu no puedes hacer nada, al menos yo estoy soltera – otra mujer en bikini, esta vez en animal print y las cabezas de las dos amigas volvían a girar.

- Jajaja, ¿Soltera? – Preguntaba mientras se reía la latina – ni tú te lo crees J. Puede que no tengas el título todavía pero el bombón te trae como quiere – afirmaba la morocha mientras sus cabezas volvían a girar para seguirle el paso a otra escultural modelo.

- Jennie– la llamo su secretaria – Bella Hadid está llegando – le informó.

- Bien por fin vamos a terminar está sesión. Estoy agotada – Jennie no había tenido una buena noche. Su cabeza no paraba de trabajar al estilo ruedita de hámster y para colmo no había querido atender ninguna de las llamadas de Lisa.

Miró a Jisoo – Oye te comportas ¿si? No quiero que esta tipa me traiga problemas – le advertía a su amiga. Si algo aprendió cuando salía con Sana es que las modelos pueden ser muy caprichosas cuando quieren.

- Jennie  tranquila, tómame como si yo fuera una asesora ocular o decorado. - trató de sonar los más inocente posible.

- ESCUCHEN TODOS – la diseñadora se dirigía a su equipo – VAMOS A EMPEZAR CON LA ULTIMA PARTE DE LA SESION. QUIERO QUE SALGA TODO PERFECTO – justo en ese momento entraba a la oficina la modelo profesional seguida de su estilista, maquilladora, representante y dos personas más que Jennie no tenía idea quienes eran. –Bella ¿cómo estás? Tu camarín está preparado, cuando estés lista sales y empezamos – le señaló el pasillo que guiaba a el camarín.

La modelo se saco los lentes de sol y miró a la fotógrafa – espero que esta vez te luzcas. Las últimas fotos no me beneficiaron mucho – ayyy Bella, Bella estas metiéndote en terreno peligroso.

- Si hubieras seguido mis indicaciones hubiéramos evitado ciertas imperfecciones, pero tu elegiste hacer las cosas a tu manera – cada vez que Jennie recordaba ese día le volvían los dolores de cabeza – Yo que tu esta vez le haría caso a la fotógrafa – fínanlo la morena volviéndole a apuntar con su dedo el camino hacia el vestidor.

- BIEN TODOS A SUS LUGARES VAMOS A HACER UNAS PRUEBAS DE LUZ – Indicó a sus Staff

Jennie se puso detrás de la fotógrafa que estaba por dar el primer click cuando escuchó la voz de su hija

- MAMI, MAMI… ¡SORPRESA! – la niña saltó sobre su madre que a su vez casi pierde el equilibrio, Jennie le iba a tener que explicar a su hija que no todas tienen la misma fuerza de Lisa