Apariencias [J.H]

[01]

—¡Joven amo son las nueve de la mañana, es hora de levantarse!—Una voz femenina cargada de energía fue la encarga de interrumpir su preciado sueño, por lo que se removió entre las tibias sabanas y con el ceño fruncido se obligó a abrir sus ojos de manera lenta, sintiéndose brevemente aturdido por la luz que se colaba por las persianas mal cerradas.

—Buenos días noona—Saludó frotando sus ojos con lentitud y justo después la vio, Moonbyul se encontraba de pie a pocos centímetros de su cama observándolo con una sonrisa amable que el pelinegro se apresuró a devolver, justo después la mujer de cabellera rubia hizo una reverencia en señal de respeto y dio media vuelta, marchándose a pasos tranquilos, dejando oír únicamente el ruido de sus tacones al impactar con el suelo.

Jungkook soltó un suspiro lleno de cansancio y se levantó de su cómoda cama para después caminar hacía el baño, después de una ducha caliente se preparó para la universidad.Una vez que estuvo listo observó la chaqueta gris que el joven castaño le había dado el día que lo conoció y no evitó sonreír decidido a ir nuevamente a la cafetería, quizás con un poco de suerte finalmente podría verlo.

Salió de su habitación su bolsón colgado en el hombro derecho y bajó las escaleras intentando pasar desapercibido.

—¡Jeon Jungkook!—Detuvo sus pasos ante el llamado y volteó de manera lenta, encontrándose con su hermano mayor, quien estaba a pocos pasos de él con una taza con decorados celestes y que lo observaba fijamente con una expresión tranquila.

—Buenos días hyung, uh no sabía que regresaste de Japón—Saludó con una sonrisa un tanto avergonzada, fijándose un poco más en el aspecto de su hermano mayor, uh definitivamente Jeon Yugyeom era un desastre, con el cabello desordenado y un simple pijama gris.

—No hay problema—Respondió su mayor alzándose en hombros, restandole importancia al hecho y bebió un sorbo de la taza que sostenía en su mano derecha soltando un sonido de satisfacción.—Volví el jueves después de convencer a Takahashi de firmar el contrato para aceptarnos como principal exportador de insumos para su compañía.—Informó.—Uh, también quería decirte que papá se marchó hace unas horas y no volverá hasta el día de mi boda—Comentó tranquilamente y su menor sonrió. 

—Eso es un gran alivio—Respondió sintiéndose aliviado, sin embargo, de manera casi inmediata su sonrisa decayó, dejando en su lugar una mueca inconforme.—¿Estás seguro de que quieres casarte?—Cuestionó notando a su mayor asentir tranquilamente, como si no fuera la gran cosa.—No deberías hacerlo, no la quieres, asi que no es justo.—Sentenció con pesar cruzándose de brazos un poco molesto.

—Yerin es muy bonita, además es una buena persona.—Se defendió Yugyeom recordando a su prometida.—Y aunque quisiera no puedo dar marcha atrás, mi matrimonio fue acordado desde que ambos eramos unos bebés, tanto ella como yo entendemos la importancia que esto tiene para nuestras familias y lo que la unión de ambas empresas representa—Dejó su taza sobre la mesa, tomando de inmediato el periodo y suspiró con pesar.

—¡Pero eso no es lo que mamá nos enseño!—Exclamó elevando ambas manos a sus costados, haciendo más dramática la situación.—Ella no estaría para nada feliz con esto y-

—Lo sé—Interrumpió su mayor mostrándose un poco frustrado.—En serio lamento no poder seguir su ejemplo y elegir mi propio camino,pero me tranquiliza que papá permitió que tú lo hagas.—Le sonrió amablemente.—Por cierto, ¿iras a buscar al chico de la cafetería que me contaste?—Cuestionó en un intento desesperado por cambiar de tema. 

 —Si, iré en cuanto mis clases en la universidad  terminen—Respondió Jungkook con una sonrisa espléndida—Espero tener suerte hoy...

—Entonces ve y mucha suerte—Yugyeom colocó su mano en el hombro de su menor.—Lo olvidaba, lleva a Taehyung contigo, Jin necesita quitárselo de encima  por hoy—Informó con una sonrisa divertida al notar la expresión de su menor.