Luhan retrocedió unos pasos. Sentados alrededor de Junmyeon había dos chicos altos y dos más bajos.

—¿Quién es ese perdedor? —preguntó uno de los chicos altos, tenía orejas considerablemente grandes y notables.

Junmyeon se dio la vuelta. Yixing sonrió cuando sus ojos se encontraron. —¡Hola Junmyeon! —saludó.

—¿Qué quieres? —dijo Junmyeon con disgusto.

Yixing tragó saliva, no por miedo sino por nerviosismo. —¿Puedo sentarme co-contigo?

De todos los ojos mirándolo, los de Junmyeon se sentían más fuerte. Lo miró de pies a cabeza, casi como evaluándolo. Entonces, Junmyeon se dio la vuelta y sin decir una palabra volvió a comer. Los otros hicieron lo mismo, ignorando la presencia de Yixing allí. Luhan tiró de su camisa por detrás, intentado decirle que escaparan ya.

¿Hizo caso? No, Yixing era así de terco, aunque otros dirían estúpido porque él siguió llamando el nombre de Junmyeon y preguntándole si se podía sentar. Eventualmente Junmyeon se puso de pie, dándose la vuelta y viéndose enojado. Agarro el otro extremo de la bandeja de Yixing y la volteó. La comida se esparció por toda la camisa de Yixing.

—¡Deja de molestarme!

—Bas- —intento decir Luhan, pero fue interrumpido cuando uno de los chicos altos se levantó. Tenía los brazos cruzados y miraba amenazadoramente a Luhan. —¿Qué dijiste? —preguntó.

Luhan tragó saliva. Yixing se inclinó para recoger la bandeja junto con los platos, los cubiertos y el vaso vacío. Cuando se puso de pie, Luhan lo arrastro lejos de la mesa.

—¿Viste? Por eso gente como nosotros no se juntan con esos imbéciles —dijo Luhan en chino. Su amigo siguió sacudiendo la cabeza y regañándole por hacer algo tan estúpido.

Y aun así Yixing estaba más preocupado que aterrado por las acciones de Junmyeon. Tal vez Junmyeon no estaba acostumbrado a hablar con los otros estudiantes, con alguien preguntándole algo amablemente. Después de todo, Yixing solo lo había visto al lado de esos chicos, su pandilla habitual. Quizás Junmyeon no sabía que hacer con alguien que no era grosero, violento o cruel. Bueno, Yixing le iba demostrar que no había nada que temer.

Sin embargo, con el paso del tiempo, Yixing aun no tenía idea de cómo acercarse. Si lo intentaba en la cafetería se quedaba sin almuerzo. Si lo intentaba en los pasillos, Junmyeon lo empuja de su camino y fingía no escuchar a Yixing. Al final decidió no seguir molestando a Junmyeon, así que solo lo miraba de lejos.

Cada vez que almorzaba, Yixing se aseguraba de sentarse la mesa donde tenia una mejor vista de Junmyeon. Un día lo vio sonreír y reír genuinamente con sus amigos por primera vez. Su corazón dio un vuelco porque los ojos de Junmyeon ser curvaron hermosamente y el brillo de sus mejillas se destacó aun más. Se había visto tan encantador, tan bello. Yixing había deseado poder haber escuchado su risa de cerca y saber que lo había hecho tan feliz.

Otras veces, Yixing siguió a Junmyeon en los pasillos, manteniendo una distancia considerable para no ser visto por supuesto. Se había aprendido la mayor parte del horario de Junmyeon (desafortunadamente no estaban en la misma clase). Yixing había comenzado a llegar tarde a sus propias clases porque Junmyeon al parecer nunca llegaba a tiempo a las suyas. Si Junmyeon no estaba con sus amigos, estaría caminando solo alrededor de la escuela. Al contrario de lo que la gente decía, Junmyeon si iba a la secundaria todos los días. Solo se había faltado una vez desde que Yixing empezó a echarle un ojo.

Las veces que Yixing vio a Junmyeon peleando en el patio de la escuela, o afuera de ella, Yixing sintió un latido de corazón diferente, fue más doloroso. Le preocupaba que algún día alguien lastimara seriamente a Junmyeon. Siempre miraba sus pleitos en primera fila, listo para saltar a la defensa Junmyeon. Lo cual era estúpido porque Yixing no tenía idea cómo pelear, pero sentía que aun así haría lo que fuera para defender a Junmyeon. Afortunadamente, hasta ahora nunca necesito intervenir. Junmyeon era muy fuerte y luchaba estratégicamente, a veces ni siquiera llegaban a los golpes. Y lo curioso era que Junmyeon no atormentaba a personas inocentes, pero si era grosero con todo el mundo. Junmyeon solo peleo con los que lo enojaban hasta el punto de que llegaron a usar la fuerza bruta. ¿Cómo consiguió Junmyeon aquella reputación tan mala? A los ojos de Yixing, apenas y calificaba para ser la peor pesadilla de la escuela. Pero Yixing nunca había prestado atención a Junmyeon durante los dos años de secundaria pasados. Quizás fue en ese entonces que Junmyeon se había ganado ese título.

Flechado 「Sulay」Where stories live. Discover now