Because it's Your: JAEMIN 재민

chapter four • 장 네

-Quise venir temprano, le avisé a las chicas que tenía otra que hacer antes, así que les pedí que no fueran por mi- suspiró -Y JaeMin... Estamos peleados- rodó los ojos.

-¿Peleados?- ella asintió -¿Na JaeMin y Park KiSung peleados, molestos?- volvió a decir incrédulo.

-Si, ¿Qué hay de malo en ello?- frunció el ceño.

-No me lo creo- se echó a reír.

-Oye, ni es gracioso, a mí no me gusta estar así con él...- bajó la mirada triste.

-Oh vamos, ni creo que a él le guste, él te adora, tonta- le dio un golpe en la frente -Él no puede vivir sin ti- siguió riendo.

-Pues aunque no pueda hacerlo, debe acostumbrarse, porque el día que yo me case, no podrá estar conmigo como mal tercio- se sintió extraña al haber dicho aquello.

Mark la miró sorprendido, no creía en lo que acababa de decir KiSung, ni ella lo creía, cuando era niña siempre soñó en casarse con un chico igual de guapo como JaeMin, alguien como él, exactamente con él, ahora de mayor lo pensaba más, pero si JaeMin no correspondía sus sentimientos, ella no podría obligarlo, al fin, ella terminaría encontrando a alguien, fuese con JaeMin o fuese con otro, ella se casaría.

-Ya veo, está bien entonces- dijo y la plática terminó allí, ya que habían llegado al instituto y llegaron por él chico.

-Mark, necesito que me acompañes con el entrenador- le tiraba de la mochila, DongHyuk, mejor conocido como HaeChan.

-Ya voy~- se sacó del agarre.

-¡Hola Ki!- HaeChan se lanzó a KiSung en un abrazo.

-¡Hola Hae!- correspondió al abrazo.

-Bien, aléjate 1,000 metros de ella- se alcanzó a oír JaeMin, quién tomaba de la mochila a HaeChan, arrastrándolo y llevándolo lejos de ella.

-Y están enojados- habló con sarcasmo Mark.

-Siempre hace eso, ya es costumbre- respondió restándole importancia.

-Lo que tú digas, me voy Pequeña Ki- le iba a abrazar pero el grito de JaeMin lo detuvo.

-¡Y tú aléjate 10,000 metros Lee!- parecía señora regañona.

-¡Eran 100 metros tonto!- dijo y se echó a reír.

-Mejor apúrate Mark- le dijo Lo y se retiró sacudiendo su mano en señal de adiós.

Las clases teóricas habían terminado, era hora de Educación Física, por lo que debían ir a cambiarse los uniformes, en lo que llevaban del día, JaeMin no le había dirigido la palabra sólo para decir, "¿Traes un bolígrafo?" Y solo eso, de ahí en más, nada, ni siquiera la volteaba a ver. Ella estaba un poco -mucho- preocupada, pues mañana ya era su cumpleaños y si seguían igual, ¿Cómo haría para dárselo? Se supone que no se hablan o al menos él no le quiere hablar.

Iba a entrar pero alguien le empujó tan fuerte, que provocó que golpeara en la pared de los vestidores, esa persona iba corriendo, ella sólo se quejó.

-Disculpa, no fue mi intención- el causante del golpe, al parecer era un chico.

-No importa, está bien- trató de entrar al vestidor pero él le detuvo.

-De verdad lo siento, ¿Te duele?- y justo tomó de su brazo recién golpeado.

-Auch...- murmuró sin querer.

-Ven, tengo que arreglar eso- y sin previo aviso le llevó a la enfermería.

-La enfermera al parecer no está... Tendré que hacerlo yo- dijo el chic, aún desconocido para ella.