Mi mate es mi ex

¿Cómo sabes? capítulo 8

Amy esperaba a que contestara, habia pasado cinco minutos , y no era capas de verla o hablar, se habia hecho una costumbre sentir ese nudo en mi garganta, ese nudo solo provocaba que cada vez no pudiera ni respirar o hablar.

La película seguía, como si nada, mire a Amy antes de abrir mi boca, pero ninguna palabra salió, la abrí varias veces, pero nada, no salía absolutamente nada, Amy seguía esperando, bajo la mirada.

--¿Es enserio?--dijo --¿Nada? o es que no lo sabias--niego, mientras la miro

--Si lo sabia--la miro --Pero.. me entere hace poco--asiente

--¿Es de Liam?--bajo la mirada mientras niego --¿Tu lo...

--No--muerdo mi labio --Te contare todo-- asiente 

Amy acaricia mi cabello mientras acaricia mi cabello, escucho todo, solo podía ver como cerraba sus ojos o como pequeñas lagrimas bajan de sus ojos, como poco a poco se formaba ese nudo, en la garganta, al negarse al llorar.

Amy estaba disculpándose por algo que no tuvo culpa alguna, yo negaba mientras decía que no debía, al final ambas terminamos en mi habitación acostadas, hablando sobre todo lo que habia pasado en estos meses, que para ambas fueron eternos

--Te apoyare en todo, y seré la mejor tía--reí

--Todos quieren ser los mejores tíos, vas a tener competencia--esta suelta un bufido de indignación

--Jamás, nadie me ganara ese puesto--dice indignada --Seré como su segunda mama--reí

--Eso es lo que yo quería escuchar--recargue mi cabeza en su hombro --Tengo un problema--la mire

--¿Cual?--tome su mano la puse en mi vientre, se podía sentir una pequeña curva

--Ya que este bebe será un lobo, necesito el olor--ella comprendió

--El olor de su padre--asiento --Habia escuchado de omegas que son madres solteras, pero muy pocos habían logrado que sus cachorros sobrevivieran al no tener su olor--

--Un omega me conto que habia una posibilidad de que sobreviva--me mira --Podrá sobrevivir si comparto el olor de un ser al cual quiero, pero no como el amor de la familia o amigos, debe de ser..

--¡Liam!--grita --Liam podrá darte de su olor, estoy segura de que podrá ayudar--sonrió, pero se borro al ver que negué 

--No, porque el aun no puede...

--Liam tuvo su trasformación dos días después de que te fuiste, el nos conto que habia sentido una molestia en su pecho, y dos días después tuvo su trasformación, así que el lo hará--estoy segura, es mas ¿por que no vamos y le preguntamos?--me paralizo 

--¡No!--balbuceo --Mejor descansemos-- esta me mira, bostezó --El viaje fue largo--

--Esta bien-- se rinde

(......)

Marco comenzó a hablar sobre lo que paso anoche, preguntando si estaba bien, así que solo decía que si, el se disculpo por no llegar a noche, pero dijo que Liam olio mi olor, y se molesto porque no le dijimos que volvería

Así que el vendría esta noche, Amy solo sonreía, pero esa sonrisa era de burla hacia mi y la odie, así que le di un rodillazo, esta se quejo mientras me miraba mal

--No te golpeo, solo porque mi sobrino o sobrina esta en tu vientre--rodé mis ojos

--Ya vamos a desayunar, que me muero de hambre--dije mientras sobaba mi vientre

--Esta bien-- Marco nos sirvió.

–Me alegra que lo sepas, asi no tengo que  tartamudear–Amy sonrió.

–Estoy segura que ya me lo abrias dicho–asiente –Pero lo bueno es que soy genial y no hay ni un secreto que no sepa–Dice mientras mueve su pelo como toda una diva.

Amy es una chica hermosa, es más alta que yo, y eso para ella es genial, ya que se burla de mi estatura, es delgada y tiene las curvas que le benefician, sus ojos son cafés o como ella los llama, ojos seductores.

Tanto Amy como Liam, tienen una similitud, ya que al ser mellizos, aunque Liam es mejor por tres horas.

Amy es una beta, aunque aveces parece una alfa, es muy mandona, pero no, es beta.

–Por cierto, ¿Como esta Jemes?— Marco ríe

–Cuando lo dejé en la mancion principal, su madre y padre lo golpearon, diciendo que era un inmaduro, aunque lo es– asentimos.

–De todos el es el inmadiro–

–¿Mama te a llamado?– asiento

–Hable con ella hace unas horas, se molesto porque no la llamamos– hago una mueca —A mi ya me dio el regaño, te toca a ti– este niega

–No voy a contestar– Amy ríe

–Conociendo a tu mamá, te irá peor–ríe

Y como si lo invocamos, recibió una llamada de mi madre, este se puso pálido, comenzó a decir, ¿qué hago, que hago?.

–No lo se—

–En tres segundo se cortara– dice Amy

–¿Cómo sabes?— pregunto

Antes de que respondiera, se cortó la llamada, y Marco se puso como loco, diciendo que lo iba matar, así que cuando la llamada volvió, se levantó y se fue a contestar

–¿Enserio cambiaste el numero de tu mamá?– asiento riendo.

–El pobre cree que es ella– reimos

–¡DANA!–grito