Sentimientos no tan ocultos.

𝕮𝖆𝖙𝖔𝖗𝖈𝖊.

«𝕷𝖆 𝖕𝖚𝖊𝖗𝖙𝖆.»

Todos los días intento mirar hacia atrás. He observado que muchos los hacen, y yo solo quiero copiarlos.
Pero.
Cuando lo hago, no siento nada.
Será que ¿Lo estoy haciendo mal? ¿O ellos tampoco sienten algo?

Aquellos momentos llenos de alegría y felicidad, no puedo verlos...
Solo son vagos sentimientos de lo que alguna vez fue. Se cómo sucedió, lo sé perfectamente, como un lector recordando su escena favorita de la historia, pero no puedo recordar más allá de ello.

No entiendo como las personas logran hacerlo...

En mi día a día puedo ver a muchas personas sonriendo, olvidándose de todo y solo disfrutando esas sensaciones, que aún sabiendo que son pasajeras quieren retenerlas todo el tiempo posible.
Me pregunto ¿Sera sencillo? Ellos lo hacen ver algo tan pero tan fácil, que hasta un niño lo lograría.
¿Pero de verdad lo es?

Para mi eso es imposible,poder centrarme en un solo momento y lugar del tiempo.

A lo mejor...
El mayor problema es que copiamos muchas acciones de otras personas, esperando obtener los mismo resultados.
Cuando esos imposible, no somos los mismos que ellos.
No podemos hacer lo mismo.

Aunque creo que es como una puerta...

Atrás se puede ver el reflejo ,aquel reflejo en que tantos nos refugiamos para intentar superar todas nuestras adversidades de la vida, y adelante se encuentra la luz que entra por la puerta , una luz que solo podemos ver mientras mas caminemos.
Por que no tenemos otra alternativa que seguir caminando.

Pero la diferencia es que algunos encuentran paz viendo aquellos reflejos.
Mientras otros solo quieren llegar lo más rápido al picaporte.
Y sin mencionar aquellos neutros, aquellos que disfrutan del camino y a la misma vez sufren.
Porque saben que nunca estarán bien y lo han aceptado.
Que para haber felicidad primero debe haber tristeza.
Para disfrutar de una risa primero debe haber lágrimas.
De esa manera, saber bien porque es tan importante sonreír.