Sentimientos no tan ocultos.

𝕯𝖎𝖊𝖟.

«𝕸𝖎 𝖈𝖔𝖓𝖋𝖎𝖉𝖊𝖓𝖙𝖊.»

Siempre intenté ocultar mis sentimientos.
En especial mis emociones.

Que nadie las vea en mi rostro, ni en mi acciones y mucho menos en mi forma de hablar.

Sentia como mi corazón se hacía cada vez fuerte, como una armadura de hierro puro se formaba arriba de el.
Era fuerte.
O eso era lo que yo creía..

Y un día todo lo que ocultaba se convirtió en una bombé.
En realidad siempre lo fueron. Solo que no me había dado cuenta hasta que fue demasiado tarde.
Demasiado.

Y con el tiempo entendí que no podía seguir viviendo en mis propias mentiras.
Estaba mal, no podía seguir negándolo.
En relación...
Si podía hacerlo, lo había hecho durante mucho tiempo, pero solo servía para herirme más de lo que ya estaba.
Necesitaba ayuda
Y la encontré.

Mi pluma y papel fueron mis más grandes amigos.
Mis confidentes.
Con ellos logré comprender lo que creía que era incomprensible.

Aun tengo muchas dudas.
Muchas preguntas.
Muchos sentimientos negativos me invaden para molestarme.

Pero estoy bien.
Esta vez no es una dulce mentira.

A veces me caigo.

Y esta bien.
Es normal.

Lo importante es no estar ahí mucho tiempo.