¿Quien es el más fuerte? Parte 2

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«¡Y por qué demonios era el medio para encontrarlo?» pensó María antes de respirar este no era el lugar ni momento.

Solo sabía que ahora estaba detrás de un auto cubierta con varios agentes intentando retrasar lo más posible a Jungernaut que simplemente seguía lanzando autos y exigiendo una cosa.

—¡DONDE ESTAS SAIYAJIN! ¡SAL MALDITO Y ENFRENTA TU MUERTE! —grito Juggernaut.

—El no está aquí —grito María Hill desde los autos.

—¡MIENTES ME DIJERON QUE AQUI ESTARÍA Y SI TIENE MIEDO! —grito Juggernaut comenzando a correr— ¡YO MISMO ENTRARE A BUSCARLO!.

Maria abrió los ojos a eso ya que sabía el impacto de Juggernaut y el edificio tenía agentes adentro aún, ella tomó un arma creada de la fase dos y comenzó a balacear al gigante que seguía tomando mas velocidad apesar de los disparos, si seguía así seria imposible detenerlo.

—¡RAPIDO APARTENSE DEL CAMINO! —grito María Hill disparando hasta que de gasto las carga, cuando pudo reaccionar fue para ver a Jungernaut a metros de ella, era enorme con un simple pisotón todo acabaría, y para ella fue como en cámara lenta.

Hasta que sintió como fue apartada del camino soltando el arma justo a tiempo para mirar cómo una bola de luz decendia y formaba un hoyo donde Jungernaut cayó y se perdió de la vista, es cuando ella pudo ver quién la había salvado.

—¿Esta bien subdirectora? —dijo Natasha vestida con su uniforme de Shield mientras se levantaba lentamente y sacudia la cabeza para luego tenderle la mano.

—Si gracias Romanoff, ¿de dónde saliste? —dijo María tomando la mano y levantandose.

La espía apunto al rubio que en ese momento decendia sobre una rodilla y levantaba la vista.

—Bien hecho Natasha lograste llegar a tiempo —dijo Golden dragón con su voz gruesa— te dije que sabía que hacer.

—Si, aunque preferiría que no me lanzes como una flecha la próxima ves o al menos me avises —dijo la pelirroja con una mueca para luego sonreír un poco— necesitaré una disculpa después.

—Lo tomare en cuenta agente Romanoff —dijo Golden dragón con su sonrisa de lado.

Tan metidos estaban en su pequeño dialogo que no notaron que María Hill estaba mirando el modo en que interactúaban tan amistoso, tan... ella sacudió la cabeza que rayos les ocurria no notaban el desastre.

—Basta de bromas, ¿donde rayos se metieron? —dijo Hill enojada.

—He,bueno —dijo Golden tratando explicar mientras Natasha se preparaba para darle una respuesta sarcástica pero el sonido del viento cortadose por la salida de algo y el temblor que derribo a las mujeres lo impidió.

Golden dragón que logró mantenerse de pie, giro a la dirección del impacto ahí estába el gigante nuevamente, lleno de músculos y cubierto con un casco café Igual a su vestimenta.

—¡TU ERES ESE LLAMADO SAIYAJIN DRAGÓN! —dijo Juggernaut sonriendo— ¡POR FIN SALISTE MALDITO, ESTE SERA EL DIA QUE MUERAS!.

El saiyajin solo lo miro unos segundos con sus ojos verdes escadiandolo, mientras recordaba la información que había recibido de el, después le dió la espalda y miro a las dos agentes, dejando a Juggernaut ahí que sentía como una vena se le formaba al ser ingnorado.

—Cuento con ustedes para evacuar la zona y después salgan de aquí también —dijo Golden dragón.

—Claro Dragón...¿recuerdas toda la información que te di sobre el? —dijo Natasha mirándolo fijamente— no lo dejas correr de acuerdo.

El Hijo De La Leyenda Où les histoires vivent. Découvrez maintenant