Only one call

Capítulo 9

Las manecillas del reloj siguieron el ritmo rutinario, Yuuri recordaba haber estado en esa misma sala, en una reunión familiar, con mucha gente y todos sentados de la misma manera. Claro que hoy era diferente, Viktor estaba a su lado y al frente solo sus padres y su hermana, la pequeña mesita tenia algunos bocaditos y la televisión estaba prendida más allá, pero aparte del sonido de las manecillas del reloj y la película que daba, el silencio se extendía por toda la casa. Entonces, sonó las doce del mediodía, fue realmente irritante.

Todos se quedaron quietos esperando a que acabara el sonido. —Bien, ya que mis padres se ven dudosos de comenzar la conversación. Sería bueno si superamos tu nombre, es decir, Yuuri nos mencionó que te llamabas Viktor, pero nada aún de tu apellido —la hermana de Yuuri habló.

El alfa se acomodó en su asiento y asintió antes de responder. — Mi apellido es Nikiforov, mis padres tienen una empresa en otra ciudad, pero es posible que hayan escuchado de ella. Y voy al mismo colegio que Yuuri, recientemente este año, pudimos estar en la misma clase.

Todos asintieron, la madre de Yuuri respondió. — Es bueno saber que no se conocen solo hace días; por cierto, te gustará saber que conocemos a tu madre. Antes de casarse trabajó con nosotros en una pequeña empresa de aquí. Que agradable sorpresa.

Finalmente, Yuuri sintió que el ambiente se hacía menos pesado y suspiró tranquilo, Mari parecía entretenida hablando con Viktor e hizo una broma que por alguna razón terminó en la idea de hacer una boda. 

El omega volvió a sentirse incomodo, su padre siguiendo la broma contradijo a su hermana. —Eso no será posible, ellos son considerados aún menores de edad en Japón.

 Mari aún entusiasmada con la idea dijo. —Va, pero se puede intentar.

—¿Tú crees que nuestros familiares vendrían a una boda de dos chicos de dieciocho años? Seguro a todos les da desmayo masivo, ya sabes como son, no lo entenderían.

Era un comentario rudo pero su padre lo decía de una manera que lograba que sonará gracioso. La hermana de Yuuri aún no se rendía con sus intenciones y le comentó a Viktor su idea. —Lo que sí podemos hacer, es presentarte a la familia como novio de Yuuri.

 La madre del omega intervino en la conversación. —A todo esto ¿Cuánto tiempo llevan saliendo?

El silencio volvió a reinar en la sala. No es que la pareja no quisiera decir el tiempo, es solo que no lo sabían. Se había dado de manera tan natural que no recordaban cuando había comenzado. Los dos se miraron tratando de recordar y Viktor respondió. —Algunos meses. Quizás.

Todos rieron ante la información y volvió la normalidad. Los padres de Yuuri estaban más interesados en saber de la madre de Viktor, que preguntar sobre todo su tiempo en el departamento del alfa, Yuuri estaba bien con eso. Se paró silenciosamente para tomar un poco de agua, aún se sentía un poco deshidratado y eso no le haría bien a su cuerpo, estaba decidió a tomar por lo menos dos vasos de agua.

El omega iba acabando el segundo vaso cuando su madre apareció por la puerta, estaba alegre y le dedicó una gran sonrisa a su pequeño. Pero no estaba ahí para solo sonreírle, se acercó cuidadosa y algo preocupada comentó. —¿Tomaste tu pastilla?

—Oh mie...

Su madre habló antes de que el terminará su frase. —Mejor apúrate, la farmacia no esta tan lejos —ella le tendió un poco de dinero y él lo tomó mientras agradecía con la cabeza—. Debemos almorzar, tu padre cocinó algo delicioso y yo tengo que servirlo.

...

Viktor se sintió sorprendido al ver un gato negro aparecer en la sala. Lo acarició. El gato subió a sus piernas y sorprendió a todos cuando se acomodó tranquilamente en el regazo del alfa. Viktor sintió un leve escalofrío, asumió que eran las miradas de tres personas al mismo tiempo. Sobre todo, si las personas son la familia de su novio.

Mari volvió a comentar algo ante el silencio, miró a sus padres al hablar —Viktor parece ser divertido, en serio, debería venir a la reunión familiar —volteó la mirada hacia el alfa—. Tienes que ver a mis primos, son tan aburridos. No los soporto.

—¡Mari! —gritaron sus padres al mismo tiempo. Viktor iba a reír por lo dicho, sin embargo, se paró súbitamente. El gato cayó al piso asustado, pero nadie se dio cuenta. El frío vino de sus pies y manos al mismo tiempo, sus hombros se sintieron pesados. Sintió su corazón detenerse y luego latir rápidamente "¿Dónde estaba Yuuri?" miró hacia todos lados, hacia unos minutos su presencia estaba cerca. "¿Corrió?" No, aún está cerca. Está asustado.

—¿Dónde está? —dijo congestionado, su voz se volvió un susurro. 

La madre de Yuuri lo comprendió de inmediato. —Salió a la farmacia. 

El alfa sintió un sudor frío recorrer su espalda, las manos le temblaron. —Tengo que encontrarlo. Ahora.

Viktor trató de ser racional. Tenía que estar calmado, hacer que Yuuri se tranquilice, que sepa que está en calma y que irá por él. Era difícil. Su instinto hizo que corriera a la puerta, el terror acumulándose debajo de su abdomen, su omega aun no entraba en pánico y eso ayudó. Agudizó sus sentidos para poder saber la ubicación exacta y caminó hacia la calle sin parpadear.

Los padres de Yuuri estaban detrás de él, asustados.

Viktor corrió a toda velocidad. Su omega empezó a llamarlo demasiado angustiado, eso le estaba destruyendo los nervios porque no podía correr más rápido.

Continuará...