The Replacement | CYL #1

23. The Window.

Midnight memories, oh, oh.
Baby you and me
Stumbling in the street
Singing...

Una de las cosas que mas odiaba Perrie era el hecho que la gente no contestara su teléfono. Peyton necesitaba presentarse en Londres en menos de veinticuatro horas y ella tenia que irse a Miami a la misma hora.

Leigh-Anne había hecho lo posible para que ellos fueran los últimos en presentarse y no lo había logrado.

Con el problema de la mesa de comida en el bufete del hotel la señorita Jones les había prohibido al trio volver a salir al
ultimo recorrido. Los encargados del hotel habían sido considerados y no las hecharon de ahí. En cambio fans que habían causado todo el alboroto fueron sacadas de ahí con una docena de hombres de seguridad.

La noche ya había caído en Londres y las tres chica suspiraban por millonésima vez. Sus cosas ya habían sido guardadas en sus bolsos y se encontraban listas para bajar a cenar.

— Tengo hambre. — Cher gruño mirando la hora en el reloj de pared de habitación. Las rubia jugaba con su celular en las manos y cada minuto lo miraba solo por si Peyton se dignaba en contestarle.

— Puede que ya venga en un avión directo a Londres. — susurro Jade a su amiga para alentarla.

— Ya, no lo creo Jadey. — hizo una mueca y se levanto del sillón. Camino al espero y miro su atuendo. Llevaba ropa de ella excepto la chaqueta roja que se había permitido robarse del armario de la cantante. Su cabello no estaba arreglado y no había nada de maquillaje en su cara. Ya se sentía de nuevo como ella misma.

— Son las nueve en punto, creo que podemos bajar ya. — el trio salió rápidamente por la puerta hacía el bufete para la cena. Bajaron por las escaleras y se unieron con sus demás compañeros que recién llegaron del ultimo recorrido. Todos estaban cansados y hablaban poco. Perrie saludo a algunos y camino a la mesa de la comida, la cual ahora era cuidada por dos hombres.

— Buenas noches. — dijo tímida a los hombres que solo miraban sin alguna expresión.

— Haz lo que quieras, — Cher le dijo con la boca llena de comida. — te odian.

— Gracias. — bufó y comenzó a servir comida en su plato. Había carne, papas, pastas y ensaladas a montón.

— Vaya, esto es genial. — Jade suspiro comiendo un trozo de carne. La rubia se sentó a su lado y comenzó a comer. La mesa para ocho solo estaba ocupada por ellas tres, nadie quería sentarse con ellas por el accidente del día anterior. Cuando había terminado su plato, saco su celular del bolsillo del pantalón con alguna esperanza de ver algún mensaje de la inglesa. En cambio vio un mensaje de uno de los chicos de One Direction.

"En que habitación te quedas?"

"Para que necesitas saberlo, Tomlinson?"

Tardo unos segundos en escribir el mensaje y presiono enviar.

— ¿Peyton? — pregunto su amiga señalando el aparato de la rubia.

— Tomlinson. — rodó los ojos antes de dar un sorbo a su vaso de agua.

— Tienes suerte. — la de apellido Thirlwall dijo riendo. — Tienes los números telefónicos de los cinco chicos mas populares en el mundo en estos momentos.

— No me importaría tener uno. — sonrío la otra castaña. Perrie solo nego con la cabeza divertida y miro la pantalla de su celular.

"Te estoy mirando ;)"

"Eso sonó algo tenebroso"

"Harry quiere verte."

"Dejate de tonterías y dime ¿que quieres?"