¡Eres solo una niña! ; Camren

02. buenas noticias... o no

¡eres solo una niña! | 02
“Buenas noticias... O no”

               El día domingo había llegado y consigo también las responsabilidades de Lauren, pues hoy finalmente encontraría un trabajo de medio tiempo... O bueno, eso intentaría.

Sus pasos comenzaban a ser perezosos luego de haber caminado más que de costumbre, mientras que sus ojos viajaban de lado a lado buscando un negocio en el cual pudieran aceptarla sin ningún problema ni requisitos fuera de su alcance. Ya había intentado con varios locales, tales como uno de tecnología, una carnicería, un local de ropa, un mini-super y hasta cadete. Nada, en ningún lado querían a una adolescente-poco-responsable.

Pero aún no se rendía, todavía tenía esperanzas de conseguir un empleo y restregarle a su padre que no era tan inútil como aparentaba.

"Y es que troy es taan idiota, a veces pienso que es un piensa-homo en vez de un ser humano" una voz chillona dijo aquello, una voz chillona que ella reconoció instantáneamente ya que era la misma que la molestaba de lunes a viernes diciendo sus burradas. No malinterpreten, no es que ella sufriera de bullying o algo de eso, sólo que tal y como dice una famosa frase, "Una mirada dice más que mil palabras", y las miradas que aquella chica le daba no eran para nada amistosas.

—es homo sapiens, y tú eres uno—la corrigió por lo bajo mientras suspiraba, comenzando a avanzar con más velocidad al querer evitar verla a toda costa. A lo lejos logró encontrar una frutería, la cual parecía bastante solicitada ya que estaba repleta de adultos con sus bolsas ecológicas. Sin dudarlo, corrió hasta aquél lugar y entró, ganando varias miradas curiosas ya que abrió la puerta con una fuerza innecesaria. Riendo por lo bajo se alejó, yendo directamente a la zona de frutas.

Mientras se regañaba internamente por haber entrado – ya que ahora debería comprar algo que no necesitaba –, sin querer logró oír algo que captó totalmente su atención; “pensamos en contratar una niñera para...” y dejó de prestar atención, ya que en su mente se repetía una y otra vez las palabras contratar y niñera. Instintivamente volteó y observó a la dueña de aquellas palabras, quién parecía estar muy concentrada hablando con uno de los empleados de la frutería. 

«¿Lo hago o no lo hago?» se cuestionó a sus adentros, y mientras que una parte de sí le decía que no, la otra gritaba que lo hiciera ya que sería una gran oportunidad. Lauren se llevaba bien con los niños... O bueno, eso cree.

—¿B-Busca niñera?

La mujer de anteojitos dirigió su atención a la adolescente, frunciendo ligeramente sus cejas ya que creyó haber oído mal y preguntando lo siguiente luego de unos cortos segundos:

—¿Qué?, Disculpa, no te oí bien.

—Usted busca una niñera, ¿verdad?—Su voz salió de una manera suave y nerviosa, no obstante, ella decidió continuar al ver un asentimiento de parte de la mujer—. Yo necesito trabajo, y estoy dispuesta a hacer lo que sea.

Sinuhe sonrió internamente, pues había conseguido lo que buscaba sin si quiera buscarlo. No sabiendo qué decir, creyó que sería mejor guardar silencio y esperar a que la chica de apariencia amable hablara de nuevo.

Lauren, en cambio, sentía que sus propios nervios la estaban consumiendo por dentro y que su rostro no podía estar más caliente de lo que ya estaba. Se sentía intimidada, pues la mirada de aquella mujer no parecía demostrar aprobación ante su propuesta pero tampoco demostraba negación. Era confuso.