Paso 6: no te desesperes

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Ya han pasado meses.
Mi vientre a crecido, parezco una vaca gorda, ya no e podido avanzar a los quiaceres de la casa, solo por estar todo el día acostada o sentada en el sofá, como ya estoy en mis últimos meses el doctor me pidió que tuviera cuidado.

Pero yo soy de las personas que a haces se cansa de no poder hacer algo.

- hola - dijo Gogo al entrar

Gogo vino temprano hoy para ayudar me con unas cosas, fue a la tienda por algo de comida que yo le había encargado.

- aquí tienes - dijo y me dió una bolsa

- muchas gracias Gogo, no te imaginas cuántas ganas de comer tengo

Gogo solo me sonrió.

- y ¿Ya sabes que es?

- el doctor me dijo que ya podía decir me, pero prefiero que sea sorpresa - conteste mientras tomaba una manzana

- ¿Y que te gustaría que fuera?

- no lo sé, Hipo quiere una niña y yo quiero un niño

- típico - dijo Gogo - cuando estaba embarazada muchos querían un niño, y mira, tengo a Reyner

Reyner estaba dormido en la carreola.

- yo no sé si pueda ser una buena madre, me quejo de mi panza de vaca - dije y solté una risa

- Astrid, a veces las cosas buenas cuestan, no lo veas así, él o ella está escuchando te - dijo y miró mi vientre

- no me molesta tener un hijo - acaricié mi vientre

- siempre habla le bonito

- Hipo me gana - dije entre risas - siempre que llega me da un beso y también a mi vientre

- Hiro también hizo lo mismo conmigo - dijo y miró su reloj - ya debo ir me - comento y tomo sus cosas - cuídate Astrid

- si igualmente oye

- ¿Si?

- mañana te vas... ¿Verdad?

- si - contesto Gogo - mañana te voy a dar un regalo

- ¿Un regalo?

- si - contesto Gogo, tomo la carreola y salió de la casa para después cerrar la puerta

- ¿ya oíste cariño? - Pregunté acariciando mi vientre - Gogo me dará algo

Aunque algunos no me lo crean, a veces llegaba a hablar le bonito a mi niño, no le cantaba porque no quiero que mi hijo escuché mis gallos que se me salen.

Cómo Hipo hacía más el quiacer pues, no tengo nada que hacer y eso es molesto para mí.

Pero como dijo Elsa "no te desesperes"

Al día siguiente...

Hipo tuvo día de descanso así que estuve toda la mañana acostada en la cama viendo televisión.

- hola mi Lady - dijo Hipo entrando con una canasta llena de ropa

- hola cielo

Hipo se acercó y me dió un beso en los labios, después miró mi vientre.

- hola campeón o campeona - dijo y le dió un beso

- Hipo, eres el mejor

- tú también Astrid

- ¿Cómo puedo ser la mejor? Si ni siquiera puedo hacer algo

- Astrid ya hablamos de esto - dijo Hipo y se sentó a un lado mío - debes estar en reposo, una ves casi te caes

- ... Si tienes razón...

- has lo por nuestro pequeño

- si, por él - dije y acaricié mi vientre con ternura - y por ti

Tocaron la puerta, Hipo se paró.

- ¿Quieres ir a ver?

- no gracias Hipo - dije con una sonrisa y seguí viendo la televisión

Hipo no me dijo nada y se fue de la habitación.

- cariño no quiero que te sientes mal... Mamá es muy imperativa - comenté - pero quiero que sepas que te amo y te daré todo mi amor - comenté acariciando mi vientre

Pasaron unos minutos y llego Hipo.

- hola Hipo - dije - ¿Quien era?

Él no dijo nada y entro Chimuelo muy contento a la habitación y atrás de el entro Luz

- Luz...

- Gogo e Hiro la vinieron a dejar - dijo Hipo

Tenía ganas de llorar, no lo sé, creo que la escena de Chimuelo y Luz me hizo sentir un sentimiento de cariño y a la vez de tristeza.
Solo forme una sonrisa

- Chimuelo está muy contento

- si - dijo Hipo y me miró - ¿Quieres comer algo?

- ¿Quieres que me levanté? - Pregunté - que flojera

- mira quién lo dice - dijo indignado Hipo - la que quería hacer grandes cosas estando embarazada, pero no sé puede levantar para ir a comer algo

Solo solté una risa.

- vamos a comer aquí - dije

- ¿Vamos? - pregunto Hipo

- si, tu... Yo - dije y luego Chimuelo me miró para después ver a Luz y ver me nuevamente a mi - claro, junto con Chimuelo y Luz

- claro como tu no tienes que traer todo - dijo bromeando Hipo y se fue de la habitación

- ¡Gracias mi amor! - grité

A los pocos minutos llego Hipo con 2 platos y los dejo en una mesa que estaba cerca de la ventana, después se fue nuevamente y trajo 2 platos más llenas de comida para perro y los dejo en un espacio que quedó en la habitación.

Después volvió a tomar los platos que dejo en la mesa y me dió uno, se sentó a un lado mío y comenzó a comer.

Mi madre siempre decía "disfruta de las pequeñas cosas" y esto lo disfrute, sé que no era una comida en un restaurante o en el parque, pero al menos tenía a mi lado a mi familia, algo que vale más que el dinero

Pasos para ser la mejor esposa Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt