Capítulo 8

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Ya todos en la posada, comentaban la reciente revelación e discutían sobre lo que hacer al respecto.

-Deberíamos quedarnos aquí y ayudar en lo que podamos.- Opinó Yua. Las chicas parecían más afectadas que ellos ante aquella situación.

-No, sería inútil.- Objetó I-shui.- A estas alturas la mayoría de los animales ya estarán muertos y los que no lo estén no les quedara mucho y nada de lo que hagamos podrá ayudarlos.

-Tal vez deberíamos investigar a la vuelta, cuando Saiko venga con nosotros.- Soltó Himerish con una sonrisa.

- ¿Saiko? ¿La dejaras venir, maestro?- I-shui parecía enteramente agradecido.

Himerish se dispuso a contarle sus motivos, pero Yua lo interrumpió:

-Aclarado este punto,- Apuntó impaciente.- ¿Qué haremos cuando volvamos? Estaremos igual que ahora.

-No tiene porque. Sí averiguamos que veneno es podemos encontrar su antídoto y neutralizar los efectos. Y supongo que no mucha gente tiene acceso a venenos por lo que también será más sencillo hallar al culpable de esto.- Señaló I-Shui.

-¿Y cómo adivinaremos que tipo de veneno es? ¿Y donde encontraremos el antídoto? ¿Cómo sabremos quien tiene acceso a venenos?- Yua los desinfló a todos. No pensaba que fuera a ser tan fácil como lo había expuesto I-Shui.

-Ashelville es una ciudad grande,- Aportó Himerish tras meditar un momento.- hay expertos capaces de identificar cualquier veneno y de proporcionarnos su antídoto. Además, conozco a todo el mundo en la ciudad, se quien tiene acceso a venenos allí y quien puede proporcionarnos información.

-Voy a por una muestra entonces.- Dijo I-shui levantándose.

-¿Ahora?- Le preguntó  Bella.

-Mañana podría no estar y ya lo hemos acordado todo ¿No?

Sin decir más se dirigió a la puerta mientras los demás se acostaban con el ruido de la puerta al cerrarse. Si bien sabían que no iban a conseguir pegar ojo en toda la noche.

 

Los siete templosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora