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El doctor nos terminó informando que todo había salido bien pero que igualmente tenía que tomarse una semana de reposo, por ser justamente Alec.

El no se lo tomo tan bien ya su obsesión es el trabajo, pero aceptó ya que sabía que si no lo hacía después sería peor.

En respecto a mi tía, Magnus nos contacto para decir que alguien había entrado a su departamento con ayuda de un glamour hecho por un brujo, pero que tanto Damon como mi tía se encontraban bien, por lo cual al fin pude tranquilizarme.

En fin, era el 3 día de reposo de Alec y el por poco no caminaba por las paredes así que decidí llevarle el desayuno antes de ir a una misión.

Toco tres veces la puerta y el me indica que pase. Al entrar, pude ver que estaba a medio cambiar y con su arco y flechas en la cama.

-¿Qué piensas que estas haciendo?- le preguntó tratando de no fijarme en sus abdominales y centrarme en sus ojos.

-Ir a la misión, me siento genial- me dedica una sonrisa falsa mientras que se termina de poner la remera- y tu...?- mira el desayuno extrañado.

- Tu no vas a ir a ninguna misión- le digo en un tono autoritario- y esto es tu desayuno- dejo el desayuno en la cama, pasando por su lado- come- lo señalo mientras que lo miro de brazos cruzados.

-Estoy cansado de estar acostado, me aburro y ademas tu no eres quien para....- agarro mi celular y busque entre mis contactos a Maryse- ¿qué estas haciendo?- me pregunta.

-Llamando a Maryse- digo para luego poner el altavoz.

-NO- musito al escuchar la voz de su madre.

-¿Qué ocurre?- me pregunta Maryse del otro lado.

Alec niega con la cabeza mientras imploraba con sus manos ya que sabía que si yo le decía algo de esto a Maryse, ella lo suspenderia por mas tiempo.

Hago un movimiento con mi cabeza en dirección al desayuno y el suelta un bufido para luego sentarse en la cama y agarrar una de las tostadas y dedicarme una sonrisa falsa mientras la comía.

En cierto punto me sentía mal por el, hacia 3 días que estaba en la habitación junto a una computadora para las cosas administrativas del Instituto, así que se me ocurrió una idea.

-No me siento bien, ¿puedes mandar a otra persona a la misión?- le preguntó y ella me responde que no había problema para luego cortar la llamada mientras que yo tenía la mirada confusa de Alec sobre mi.

- Yo necesito un amigo ya que desde que vine no pude hacer muchos y tu necesitas hablar con alguien porque sino te volverás loco, así que podemos hacer una tregua y llevarnos bien durante tu reposo- dirigo mi mano hacia su dirección para que el la tome pero el sólo la mira- vamos- la muevo y el rueda los ojos para luego agarrarla.

-Ya que- la suelta para agarrar otra tostada y comersela.

Al principio habían ciertos silencios incómodos pero luego de hablar sobre algunas misiones en las que se tuvo que ausentar, el empezó a soltarse.

En fin, en eso se basaron los días de su reposo, yo le llevaba el desayuno y nos quedábamos hablando. Lo que me sorprendió es que lo seguimos haciendo incluso después de su reposo, exactamente 2 semanas más; semanas en las cuales todavía no recibía noticias del asesinato de mis padres, lo cual me estaba volviendo loca pero las charlas con Alec me ayudaban bastante.

-Es Halloween- le digo mientras entro con dos cafés y una bolsa la cual contenía muffins que parecian fantasmas.

Me siento en la cama mientras el agarra una bandeja de encima de su mesa de luz y la pone sobre la cama. Me río al recordar como uno de los desayunos que tuvimos terminamos mojados por el jugo multifrutal, y todo por no haber ido a buscar una de estas.

《 Shadowhunters 》Alec Lightwood y Tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora