Capitulo VI: Ecos del Pasado

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Lydia cayo de rodillas cuando imágenes comenzaron a golpear su mente, el dolor fue tan intenso que únicamente pudo ceder al dolor, y todo se volvió oscuridad.

Hace seis años atrás, los Hale eran una familia poderosa de hombres lobos. Pero no eran depredadores, creían en al coexistencia de humanos  y seres sobrenaturales.

Su Alfa, Talía Hale, era la líder entre Alfas, buscada como una consejera, como una guía entre su gente.

Esa noche, Talía se sentía inquieta, especialmente, como si algo no estuviera ocurriendo del todo bien, era una persistente sensación que le picaba la piel.

Derek, Laura y Cora se encontraban estudiando, apenas siendo las 7 de la mañana, el cielo se encontraba oscurecido.

La mayor parte de la casa dormía, y ella se pregunto el porque no podía hacerlo, suspirando sonoramente se levanto y tomo el collar dorado que se encontraba sobre su repisa, sonrió ante el, había pertenecido a su familia por centurias, y cualquiera diría que este debía de pertenecer a una de sus hijas.

Pero sabia que ahora cambiaría de dueño, se había encargado de que este le llegara a Lydia Martin, la pequeña niña que venia una y otra vez a su casa, cuando ella charlaba con Natalie, en su cumpleaños número 10.

No tenia nada de especial esa fecha, pero sabia que para Lydia lo tendría. Porque tiempo después, se vería afectada por serias decisiones que cambiarían su vida, para siempre.

Lo que no era consciente Talía, mientras envolvía al collar en su caja, y luego en un papel de re galo, era que ella no vería los ojos de Lydia iluminarse al ver el regalo.

Ni tampoco volvería  a ver la luz del sol de nuevo.

No volvería a ver nada.

Fuera de la casa Hale, un plan oscuro estaba siendo tramado, Kate Argent junto a varios cazadores  Argent, estaban planeando tal masacre que seria recordada por todos, y por siempre.

Era irónico, los hombres lobos, los Hale, una manada tan fuerte como poderosa, reducida a cenizas en medio de gritos de agonía, de dolor, de muerte.

Aquella noche la luna se tiño de sangre, mezclándose con gritos y suplicas.

A la mañana siguiente, cuando la policía fue al lugar, cuando se contó cada cuerpo que había podido ser identificado. Cuando Derek Hale había llegado a su casa gritando de dolor y había encontrado a su tío, casi muerto.

Sin saber si sus hermanas estaban con vidas, y creyendo lo peor, se había ido del pueblo, para siempre.

Lo que no vio, fue que entre los cimientos, el Sheriff Stilinski encontró una caja, envuelta en un papel levemente chamuscado, el nombre Lydia Martin garabateado.

Nadie sabia lo que eso significaba, el caso nunca pudo cerrarse, y se dio como resultado una falla eléctrica.

Nadie supo que fue una conspiración, y nunca más, se volvió a ver a ese collar, hasta el cumpleaños de Lydia.

***

—Eso es imposible —dijo Allison negando, conmocionada cuando Scott termino de contarle la historia— estas mintiendo.

Scott negó

—Ojala fuera así —dijo este— pero Kate fingió ser la novia de Derek para conseguir la información que necesitaba para atacarles. Y Peter decidió matarla, porque debido a ello el quedo en coma, la peor tortura para un hombre lobo, inmóvil, pero consciente.

Allison volvió a negar, y sintiendo sus piernas temblorosas se sentó en una de la sillas de allí.

Al ver que ella un no le creía, Scott decidió usar otra táctica

—Preguntale a tu abuelo, el te lo dira —le insito— Los Argent se sienten muy orgullosos de lo que hicieron esa noche, Allison. Y se que no eres como ellos.

Ella sintió de repente deseos de salir de allí, y de olvidarse de todos. Empezando a quedarse sin aire,  y dándose cuenta de que tendría un ataque de pánico, se levanto y salio de allí.

—¡Allison! —la llamo Scott, pero ella la ignoro, necesitaba pensar, necesitaba...necesitaba saber si era verdad.

Scott sabia que había plantado la duda en la mente de Allison,   y que la única forma en que ella entendiera todo, era sabiendo la verdad, quitando el la mascara a su propia familia.

Sabia que era ruin, pero tenia que hacerlo...porel bien de todos.

Apoyando la cabeza contra las rejas, Scott cerro los ojos y deseo que todos sus amigos estuvieran bien.

Y se preparo mentalmente para cuando Gerard apareciese para su próxima hora de la tortura.

***

Lydia parpadeo, despertándose lentamente y sintiendo un fuerte dolor en su cabeza. Mirando alrededor, con la vista borrosa, se dio cuenta de que no estaba en la oficina de Brunski, sino en una de las habitaciones...donde se encerraba a los pacientes violentos.

Intentando levantarse, solo para tropezar de nuevo, Lydia se percato de que a unos pasos se encontraba Brunski con una jeringa en mano.

—Por fin te has despertado —dijo este, una cruel sonrisa extendiéndose en su rostro— Sabia que tarde o temprano estarías en busca de esto...

Alzando la mano, Lydia vio al collar entre sus manos, este brillo a la luz de la habitación.

—¿Qué quieres? —pregunto, su voz sonaba demasiado rasposa, no parecía ser suya— ¿Qué me has hecho?

Brunski no respondió a la primera, sino que se tomo su tiempo para atormentarla con la duda.

—Bueno, Lydia —comenzo este arrastrando las palabras— siempre fuiste una chica que me diste curiosidad. Tan silenciosa, tan...como decirlo...especial. No puedo negar que siempre he tenido esa sensación de que sabes algo que el resto no.

—Yo no se nada —dijo

Este dio algo parecido a una risa sarcástica, aunque realmente era aterradora. Lo que hizo que Lydia se empujara en sus pies para retroceder cuando este dio un paso cerca.

—Tengo una pregunta, Lydia —Continuo acercándose hasta que se detuvo frente a ella y seagacho— Si la chica  loca que escucha voces desapareciera un día para siempre... ¿le importaría realmente a alguien?

—Si sigues en tu camino de intentar saber la verdad... —amenazo este— descubriremos quien te extrañaría de verdad.

La soltó, dejándola caer

—Por cierto —dijo desde la puerta— El sheriff vendrá dentro de poco a buscarte, parece que te necesitan como testigo, una palabra de lo que sucedió aquí, o de lo que sabes,  y me encargare de que esta vez te quedes en la oscuridad...para nunca despertar.

Dispara | Teen Wolf #3|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora