-Capítulo 02-

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Hope entró corriendo muy agitada a la sala común de Hufflepuff.

-¿Qué te pasó? -le preguntó Susan Bones, su mejor amiga, que escribía sentada en uno de los sillones.

Entonces a Hope se le pasó el susto de golpe. ¿Qué le había pasado? Había encontrado a Draco Malfoy en la sala de menesteres y él la había corrido. ¿Por qué se había asustado tanto, entonces? Nada malo le había ocurrido.

-Perdí mi cuaderno de dibujo- respondió Hope con pesadez, dejándose caer en el sillón junto a Susan.

-¿Y cómo?

-Lo olvidé por ahí.

-Oh...- susurró Susan.

-¿Qué haces?

-Le escribo a mi padre... ya sabes, intento darle ánimos.

Hope sabía a qué se refería Susan: en el verano de aquel año, hacía apenas unos meses, Lord Voldemort había asesinado a la tía de Susan, Amelia Bones.

-Por cierto... ¿has hablado con Terry? -preguntó Susan con una sonrisa, y de inmediato Hope se sonrojó.

-Sí, hablamos en la mañana, luego del desayuno.

-¿Y?

-¿Y qué?

-¡Vamos, Hope! ¡Te gusta!

-Claro que no -replicó la castaña-. Sólo somos amigos -agregó con pesadez.

Hope y Terry Boot se habían hecho amigos el año anterior, cuando ambos pertenecían al Ejército de Dumbledore. A veces hablaban en los pasillos o en las clases que compartían, y a Hope le gustaba, pero no sabía si Terry sentía lo mismo hacia ella.

-¿Has hablado con tu padre?- preguntó Susan cambiando de tema.

-Sí- respondió la castaña-. Ayer él y mamá me escribieron.

-Me refiero a tu otro padre.

-Baja la voz- regañó Hope de inmediato-. Ese hombre no es mi padre. Ya te lo he dicho, me abandonó cuando era pequeña y ahora que volvió, ya no lo necesito.

-Hope, él ha demostrado que de verdad quiere arreglar las cosas. Lleva años pidiéndote perdón.

Hope no contestó y cambió de tema.

.

Al día siguiente, Hope llegó a la biblioteca y se encaminó hacia un rincón.

-¡Hola, Hermione!- saludó al pasar junto a la castaña de Gryffindor, que se encontraba con la nariz metida en un viejo libro.

-¡Hola, Hope!- saludó Hermione-. ¡Espera!

-Dime.

-¿Has oído hablar de un tal príncipe mestizo? -preguntó Hermione.

-¿Príncipe...? No, creo que no- respondió Hope pensativa-. ¿Es algún autor?

-No exactamente. Harry encontró ese nombre en un libro viejo y me causó curiosidad, eso es todo. Bien, gracias, Hope.

-Nos vemos, Hermione.

Hope se ubicó en una mesa vacía a unos metros de Hermione. Se hubiese sentado con ella si Hermione no hubiese tenido la mesa llena de libros.

Sacó unas cuantas hojas de pergamino, pluma, tinta, y su libro de Elaboración de Pociones Avanzadas y se dispuso a hacer la redacción que el profesor Slughorn les había dado de tarea.

De pronto, la sombra de una persona alta cubrió la mesa. Hope levantó la cabeza y se encontró a Draco mirándola fijamente.

-Hola -saludó Draco.

-Hum... Hola...

-¿Eres Hope Davis?

-Sí.

-Creo que tengo algo tuyo... -Draco dejó su mochila sobre la mesa, sacó de ella el cuaderno de dibujo de Hope y se lo entregó.

-Mi cuaderno- sonrió la castaña-. Gracias- Draco le sonrió de vuelta, no con esa sonrisa de suficiencia con la que solía creerse el rey del universo, sino una amistosa.

-Sí, bueno... se te cayó ayer en la sala de menesteres. ¿Por qué no volviste por él?

-Porque no quería volver a molestarte y que me gritaras- respondió ella.

-Sí, sobre eso... -Draco suspiró-. Lo siento.

La chica lo miró con ambas cejas levantadas; eso sí que no se lo esperaba.

-Me asustaste, eso es todo- continuó el rubio-. Creí que estaba solo y verte allí me tomó por sorpresa.

-Está bien, ya pasó.

-¿Por qué entraste a la sala?

-Buscaba un lugar tranquilo para dibujar. Afuera estaba lloviendo, así que...

-Bueno, debo irme -la interrumpió Draco-. Adiós.

-Adiós, gracias por devolvérmelo- sonrió Hope tomando el cuaderno.

-Dibujas bien.

-Gracias.

Draco se alejó unos metros, pero de inmediato, Hope lo vió volver a su lado.

-¿Si?

-Hum... -Draco se rascó la nuca-, ¿ese lugar está ocupado?- indicó el asiento frente a Hope.

-No- respondió ella un tanto extrañada-. Puedes sentarte si quieres.

El rubio se sentó frente a ella, sacó un libro y comenzó a leer.

Al cabo de media hora, Hope había levantado tres veces la cabeza y las tres veces había sorprendido a Draco mirándola, cosa que ya comenzaba a incomodarla.

-¿Necesitas algo?- preguntó intentando no sonar pesada.

-No- dijo Draco volviendo a posar la mirada en el libro.

-¿Entonces por qué me miras?

-No estoy mirándote.

-Ahora no, pero hace un rato...

-¿Y qué tiene?- replicó Draco.

-Bueno...

-Si tanto te molesta, me voy.

Se puso de pie y guardó el libro en su mochila con evidente molestia.

-¿Me dirás tu nombre?- preguntó Hope, y Draco la miró incrédulo.

-¿No sabes quién soy? -preguntó él con un tono arrogante.

-No- mintió ella-. ¿Por qué habría de saberlo?

-Digamos que el nombre de mi familia ha estado en El Profeta desde el inicio del verano- respondió el rubio con una mueca-. De seguro ya lo has escuchado.

-Si no me lo dices, no lo sabré.

-Soy Malfoy. Draco Malfoy.

-Aah, bueno- para sorpresa de Draco, Hope le tendió la mano-, es un gusto conocerte de forma oficial, Draco Malfoy.

Draco le estrechó la mano aún sorprendido, pero sonriendo.

-¿Acaso tus padres no te han ordenado que no te acerques al hijo de un mortífago?- preguntó él con un tono divertido.

-Mis padres son muggles- respondió Hope, y Draco le soltó la mano.

-Imaginé que reaccionarías así, Malfoy- dijo Hope en un tono más frío y decepcionado, recogiendo sus cosas-. Qué pena que seas igual a tu padre.

Y se marchó.

Lo que ella no sabía, era que Draco había planeado ese encuentro desde la tarde anterior, y que de inmediato se arrepintió de rechazarla. Él no era como su padre, y se lo probaría.

Más allá de los secretos [COMPLETA] ✔️ (Draco Malfoy, fanfic)Där berättelser lever. Upptäck nu