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O5 : ❛ 费解的 ❜
la oscuridad de la noche era la única compañía que, últimamente, tenía qian kun.
sentía como su estómago y cabeza dolían, como sus tobillos ardían, y como sus lágrimas intentaban abandonar sus ojos y recorrer sus mejillas.
¿...por qué? ¿por qué él estaba así? ¿por qué debía estar así?
algunos tratos son duros, obviamente... pero lo que había pasado aquel día, había sido el colmo.
¿qué sucedió?
O7:46
como una rutina típica, el chino se levantó de su cama y se dirigió a la sala de practicas de la sm. debía practicar, hasta las horas que le dijera la empresa.
pasó una hora, y decidió descansar un momento. como una persona normal que hace ejercicio.
pasaron unos cinco minutos de eso, y él continuó con su practica.
normal, ¿no?: hacer ejercicio dos horas es lo más sano y normal del mundo.
sí... hasta que, una de sus entrenadoras entró a aquella sala, para derrumbar la tranquilidad del chino, que, de por sí era poca.
— ahora no pareces un niño, ya haces las cosas por tu cuenta. — entró la muchacha, y dijo aquellas palabras de forma irónica.
— buenos días. — saludó antes que nada el idol. — ¿qué sucede?
— ey, a mí no me hables de esa forma. — dijo en un tono molesto la muchacha.
— ¿de cuál forma...? — el chino no lograba entender las actitudes de la entrenadora.
— ¿qué se yo?, me molesta que me hables. no entiendo como hay gente que te admira... a ti, un pedazo de mierda. — las palabras las cuales salían de los labios de aquella muchacha, los decía con una cínica.
aquellas palabras, kun las había escuchado antes. porque, en ese lugar, todos los entrenadores trataban como una mierda a sus artistas y trainees.
los ojos de kun se cristalizaron en ese momento. él dio un suspiro, y regresó su mirada a la "entrenadora".
— ¿por qué viniste? — la voz del idol se escuchaba entrecortada, puesto a dichas palabras de aquella mujer.
