Razones por las que no debería amarte

8: No debes remover el pasado

―Esto va dolerte un poco 

Jake acerca un algodón, humedecido con sabrá-Dios-qué-líquido-raro, al lado izquierdo de mi rostro, justo en el borde de mi oreja.

Efectivamente, en cuanto me toca, aprieto la mandíbula a causa del ardor.

―Relájate ―me dice―, no es tan malo

―Habla por ti ―mis palabras son seguidas por una mueca.

 Al hablar el líquido entra más profundo en la herida.

―Ya acabé 

Doy un suspiro en cuanto aparta esa odiosa fuente de dolor, pero aún puedo sentir que me escoce un poco

―Tienes suerte, no creo que vaya a quedarte una marca.

Uff, como si las marcas me preocuparan.

Él toma un pequeño paquete del botiquín y de ahí saca una de esas vendas que vienen con medidas exactas y ya traen adhesivo en los bordes. Tiene muchas más cosas de las que encuentras en un botiquín de primeros auxilios normal. Ahí dentro hay un montón de diferentes botellas con líquidos y pastillas, cajas, vendas y pinzas. Parece que acabara de asaltar una farmacia.

―¿Para qué necesitas un botiquín de primeros auxilios tan...abastecido? Tienes como medio hospital ahí dentro.

Me coloca la venda con cuidado, justo encima de la cortada.

―Supongo que debido a mi carrera me gusta estar preparado

―¿Qué estudias?

―Medicina

No puedo evitar fruncir el ceño.

―¿Sorprendida?

―Mmm...algo. No era lo que esperaba

―¿Y a que creías que iba a la universidad?

―Ejem...mmm... no sé... ¿A buscar mujeres? ―me siento un poco estúpida al decir esto en voz alta. Es más que obvio que Jake tiene que estar estudiando algo.

Él ríe.

―Pues, como comprenderás, necesitas más que atractivo físico y el deseo de buscar mujeres para matricularte en una universidad.

―Lo sé

Desvío la vista, un poco avergonzada... Qué tonta. Ni siquiera sé por qué me sorprendo tanto si fue el mismo Jake quien examinó mi tobillo torcido el día de la fiesta. Debí sospecharlo.

―¿Qué estudias tú?

―Artes, voy a especializarme en cine

―Me gustaría decir que yo también estoy sorprendido, pero creo que me esperaba algo así. Es como si tu aura murmurara "artista" ―le sonrío

Él se toma el tema con humor y no parece darle demasiada importancia al asunto, así que trato de dejarlo pasar.

Jake empieza a guardar todo dentro del botiquín y, como son tantas cosas, decido ayudarlo.

―Y dime, Susan, ¿dónde aprende una chica como tú a pelear así?

―Practico defensa personal desde los diez años. Mi madre siempre quiso que fuera lo más independiente posible, así que vi clases de casi todo desde esa edad... ―mi voz se apaga cuando me doy cuenta de que he hablado más de la cuenta. Mi política es jamás remuevas el pasado, así que no me gusta hablar de eso.

―Mmm... con que de ahí viene lo de ser independiente ―él asiente pensativamente―, ¿y que dice tu padre de todo esto?

―No creo que le hubiera molestado, aunque no tuvo tiempo de opinar nada