Razones por las que no debería amarte

42: Realmente odio las interrupciones

            Me despierto con la sensación de unos labios presionados suavemente sobre mi hombro. Contengo un suspiro y fijo que sigo dormida. Los besos continúan su camino hasta mi cuello y siento una risa rozando mi piel.

―Sé que estás despierta

―No es cierto ―murmuro riendo

―mmm... ―sus labios continúan entreteniéndose con mi cuello― ¿de verdad?

―Sí, estoy teniendo un sueño bastante bueno justo ahora

―Pues, me estoy sintiendo bastante tentado a quedarme contigo y ayudarte con ese sueño... ― me rodea la cintura con el brazo para atraerme hacia él, mientras toma una respiración profunda sobre mi cabello.

―¿pero?

―¿pero qué? ―responde besando mi mejilla

Me giro, quedando frente a frente con él. Está sonriente y parece bastante feliz.

―Ibas a decir el pero ―sonrío

―Ah, sí... Bueno, ya es tarde y tomando en cuenta que te saliste a media mañana el jueves, faltaste a clases todo el viernes y me dejaste sacarte de la última ayer, pensé que querrías que te despertara.

―Demonios ―murmuro cerrando los ojos―. Tienes razón ―los vuelvo a abrir y lo miro. Está acostado por encima de las sabanas usando sólo unos jean oscuros.

Pasan unos segundos y espero que lo capte, y salga de la habitación, para poder levantarme y tomar una ducha, dado que no puedo ver mi ropa desde aquí.

―¿Qué pasa? ―me pregunta arqueando una ceja

―eh...estoy esperando que salgas para levantarme

―wou, no pensé que me sacarías de tu cama a la mañana siguiente ―bromea

Me río

―no te estoy sacando

―¿entonces? ―se ríe― ¿te da vergüenza que te vea? ―sonríe con malicia

Me muerdo el labio, causando que su sonrisa se agrande.

―¿es en serio, Azucena? ―ríe de nuevo― después de lo de anoche eres tímida?

―¡Jake! ―me quejo cerrando los ojos y lo escucho reír una vez más― oye, no te muestres tan sorprendido, era mi primera vez

―También la mía ―alzo la vista y entorno los ojos en su dirección―, nunca antes había estado con una chica a la que amara. Fue muy diferente ―explica―. En realidad, nunca antes había amado a una chica así que... ―no lo dejo terminar. Me inclino hacia adelante y le doy un rápido beso que lo toma por sorpresa ―Hey ―sonríe―, ¿a qué vino eso?

―No sé ―me encojo de hombros sonriendo también―, estabas siendo increíblemente lindo y creo que no pude resistirme

―Me ganaste con eso ―se sienta―, seré bueno de ahora en adelante ―toma algo de los pies de la cama ― palabra de explorador ―agrega haciéndome un guiño mientras vuelve a su posición anterior ―ten ―besa mi frente y pone mi camiseta (que en realidad es suya) entre mis manos

Me siento usando la sábana para cubrirme y lo miro, tiene una sonrisa fanfarrona y ninguna intensión de moverse.

―No te irás, ¿cierto?

―No, dije que sería bueno, no idiota... Además, nunca fui explorador

―No me sorprende ―me río y me coloco la camiseta por encima de la sábana, ocultándome lo mejor que puedo ―. Me daré una ducha ―planto un rápido beso en sus labios y camino hacia el baño