Sasakibe me ayuda a vestirme y peinarme para salir decentemente a la sala principal donde mi esposo está hablando con algunos de sus aliados que siempre están rondando por el castillo para ver cómo van las cosas en la comarca. Veo a Soujun jugando con los niños en un lado de la sala, ajenos a cualquier contacto con su padre. No me gusta esta situación, he de conseguir que Starrk vuelva a interesarse por Soujun. Se lo debo.

-¡Soujun!- llamo la atención de mi amigo y de nuevo veo como su rostro ha desmejorado bastante. Si Starrk vuelve a dejar en cinta a Soujun, tendrá motivos de peso para tratarle como se merece o sin eso, haré lo posible porque le preste algo de atención.

-Hola pequeños ¿estáis aprendiendo a leer?-

-Ya sabemos leer, no somos tontos-

-Byakuya hijo, pórtate bien- el hijo de Soujun me mira muy rencoroso. Es lógico, sufre al ver a su "madre" así y el otro pequeño también sufre aunque no dice nada.

-¿queréis que hoy comamos en el jardín?- el pequeño Sen se emociona al oírlo y tira de la ropa de Soujun para animarle. Quiero tenerles entretenidos porque en un futuro espero que estos pequeños se lleven bien con mi hijo que el pobre no tiene la culpa de la situación en que le he metido y mucho menos cómo le concebí con su padre. Con él...

-Soujun esta noche me apetece jugar al ajedrez ¿aceptarías una partida conmigo?-

-¿ajedrez? El único que juega a eso es Yhwach-

-Oh sí, ya nos hemos conocido, es un hombre intimidante pero tiene buen corazón-

-No, no lo tiene. No te fíes de él Jushiro-

-¿ha intentado....ya sabes...?-

-No. Solo que nunca me ha inspirado confianza, además...él te trajo aquí-

Soujun ya no puede evitar lanzar alguna puya sobre nuestra situación pero es normal. Intento hacer que todos seamos una familia cuando en realidad las relaciones entre nosotros son horribles. Los dos dependemos del rey. Ambos tenemos que abrirnos de piernas ante él y parir a sus hijos. Starrk no es un mal rey....pero es rey a fin de cuentas y todos tienen supremacía sobre sus amantes, consortes o como nos llamen.

-Por favor...solo te quitaré un poco de tiempo-

-Está bien. Solo un rato-

-Pero vístete bien ¿de acuerdo? Me gusta mucho ese kimono que tienes de cerezos bordados, estás espectacular-

Soujun alza una de sus finas cejas al oírme hablar pero yo sé lo que me propongo. Esto no es propio de mí, pero ya nada de lo que he hecho hace que me reconozca. A fin de cuentas tampoco tengo nada que perder salvo la vida de mi hijo y aún queda mucho para que nazca.

**Starrk**

-Mm....he bebido demasiado...esos judíos van a acabar conmigo....-

Llevo casi dando tumbos a mi aposento nupcial aunque antes me acerco a una palangana para mojarme la cara y espabilarme. No puedo entrar así y que me vea Jushiro, se preocupa mucho cuando bebo tanto y sé que no le gusta.

-¿Jushiro? ¿Estás aquí esposo?-

-Estoy, Starrk- Jushiro se asoma bajo la cortina de la cama y me hace suspirar al ver que está vestido solo con una bata blanca como el color de su cabello aunque tan trasparente que veo sus pezones marrones por debajo de ella.

-Me encanta cuando me recibes así....-

-Me alegro porque hoy tengo una sorpresa-

-¿qué sorpresa?- le doy la espalda al oír la puerta del dormitorio abrirse y abro los ojos cuando Soujun entra mirándome igual de sorprendido. Va vestido con el kimono de cerezos que le regalé en su último cumpleaños, lo que eso me recuerda....hoy es su cumpleaños....lo había olvidado por completo, en este día hacíamos de todo y nos devorábamos mutuamente bajo las sábanas antes de que los niños entraran a tirarse sobre nosotros...

"Consorte"Where stories live. Discover now