Estrella diurna

Capítulo 3: los chupitos (Reescrito)

Cuando empieza a sonar una que no nos gusta y nos acercamos a la barra a pedirnos esa copa, cuando voy a pedir la mía un nuevo escalofrío recorre mi espalda y se clava en mi nuca, sé que acaba de entrar. Empiezo a pensar que es como mi sentido arácnido. Pido mi bebida intentando que no se note la extraña sensación que acabo de sentir. Cuando me giro con mi copa en la mano Loren me arrastra de nuevo a la pista.

Y llego la hora de mover un poco el culo con Lola Indigo. Levanto la cabeza y veo a nuestro alrededor y estamos de nuevo los 5 aunque han dejado un pequeño hueco en nuestro círculo, me fijo un poco más y veo que da directamente a uno de los reservados. La chica morena que esta de espaldas me resulta familiar. Vuelvo a notar ese maldito escalofrió y me giro pero no hay nada.

Todos me miran y sonríen, sé que ha pasado algo y yo no lo he visto pero no le doy mayor importancia. Seguimos bailado a ritmo de reggaetón cuando vuelvo a mirar al reservado y veo que la chica es Lara que se acerca sonriente para bailar con nosotros.

Le damos la bienvenida mientras la saludamos levantando las copas.

- He intentado que esa panda venga a bailar pero no hay manera.

- Tranquila, hacer que estos bailaran nos costó más de dos años- le dice Karla mientras hace una señal hacia los chicos.

- ¿Me acompañas al baño?- dice Loren después de un rato más en la pista.

No hay mucha cola así que entra rápido, yo la espero en la puerta cuando lo veo acercarse. Está muy guapo, lleva un pantalón de traje gris a rayas con un chaleco que ahora está abierto y deja ver la camisa blanca sin corbata que lleva puesta. Tiene el pelo rubio peinado con ese aspecto descuidado y la barba de varios días, es simplemente espectacular, y aun por encima viene sonriendo. Por los dioses está empezando a arderme la nuca.

- Veo que lo estáis celebrando.- señala hacia su reservado- Nosotros también, nuestro novato también ha pasado aunque con menos nota que tú, felicidades.

- Muchas gracias, no sabía que nos poníais nota –consigo decir aunque parece que lo hago medio ahogada, no sé porque ha venido a hablarme– Me alegro por Mark, se lo merece.

- Es genial y podremos limar los fallos más adelante. –da un paso a delante y baja un poco la voz–Estas muy guapa por cierto.

Siento que no soy capaz de hablar, me pesa la lengua y noto como me estoy poniendo roja. Creo que él lo nota porque su sonrisa se hace todavía más grande. Da un par de pasos hacia atrás.

- Resérvame un baile me lo cobrare cuando suene mi canción- y como ha venido se va, con esa maldita sonrisa que me ha hecho temblar las rodillas. Me quedo mirando fijamente su espalda y como se sienta en el reservado y se pone a hablar con los de su equipo como si no pasara nada.

- ¿Te cojo las bragas del suelo o puedes tu sola?- la voz de Loren me da un susto de muerte.

- ¡Calla estúpida! Que a lo mejor alguien te oye.

- Estamos en la pista de baile, nadie nos oye. Vamos a la barra que necesitas alcohol para recuperar el color de la cara.- me dice mientras me empuja a la barra.- Ponme dos de Jager con Red Bull por favor.

- Y 2 chupitos de tequila- le grito al camino sin pensar.

- ¿Vamos a celebrar algo? Como que el inalcanzable de Dunkan ha mostrado interés por algo que no sea pelear después de años...

- ¿Por qué soy la única que no lo conocía? Todas parecéis encantadas de que ahora me lo encuentre siempre, hasta Lara intenta meter baza poco sutilmente.